gipe Escribió:
Hola amigos. Estamos ya en Bilbao y queremos comer txuleton. Tengo en mente el amaren pero entre precio y variedades que no entendemos... Algunas otras opciones están cerradas por vacaciones....
Donde aconsejáis comer txuleton? Menú o en carta ?
Tengo vistos 11 aldeanos y goizeko izarra... Mucha gracias
El Txakoli Simón me parece una excelente opción para comer chuletón. Tal vez su ubicación no sea la más cómoda ya que está en el monte Artxanda, en coche a 15 minutillos del centro, pero se puede subir incluso en funicular o autobús y te dejan a un cuarto de hora caminando ligero del restaurante y evitas así hipóteticos problemas de tráfico a la bajada (para mí un chuletón sin buen tinto es como un jardín sin flores).
La última vez que estuve en el Simón, hace como un año, el chuletón de vaca vieja estaba a 55 euros el kg, lo que es bastante asequible comparado con otros establecimientos y sobre todo teniendo en cuenta que la carne es excelente, de primera calidad. Supongo que habrá subido algo.
La carta es muy corta y sencillísima: ensaladas, pimientos, chorizo, morcillas, croquetas… como plato principal alternativo a la chuleta sólo hay bacalao.
Excelente selección de vinos. El txakoli es un caserío con comedor en el piso superior, otro exterior pero cubierto, ambos agradables aunque haya quien a veces se queje de las humaredas que se forman al acabar de hacer la chuleta en la mesa y luego también dispones de mesas al aire libre en plan merendero.
El Txakoli Simón ha ganado alguna vez el concurso “La mejor chuleta de Bilbao”, este concurso preselecciona varios restaurantes a través de votación popular y después un jurado profesional elige el ganador entre los seleccionados por el público. De hecho, si entras en la web de La Mejor Chuleta de Bilbao, el Txakoli Simón sale como el número 1 del ranking de Bizkaia.
Y por cierto, Gipe, salir del txakoli Simón sin probar los pimientos rojos Apurtuarte es casi constitutivo de delito. Unos pimientos de la zona de Sondika y alrededores, asados, que están para chuparse los dedos y volver a pedir otra ración.
Suele estar siempre lleno hasta los topes, fin de semana es casi misión imposible reservar con poco margen de tiempo.