Llegando nos llovió pero aun asi nos fuimos caminando a las 10 de la noche en busca de la Opera House, no nos podíamos ir a dormir sin verla. Para volver al hostel fue inacabable, había lluvia, viento, frio, cansancio del viaje, eran las 12 o 1 de la madrugada, pero valió la pena, habíamos visto la Opera House

Al dia siguiente como no, volvimos al lugar, para verla de día y desde todos los ángulos posibles, la rodeamos toda, pasamos por los jardines botánicos aunque no nos quedamos y nos fuimos hacia el Harbour Bridge (al que volveremos en nuestro regreso a Sydney).
Después del opera house, jardines y harbour bridge, debo decir que era sábado, así que decidimos vivir el ambiente de la noche de Sydney, nos fuimos al hostel a arreglarnos y pusimos rumbo a la zona de Darling Harbour y NOS ENCANTO!!!!!!!!!
Al dia siguiente nos levantamos para coger nuestro ferry e ir directamente a Mainly Beach, una de las más famosas playas de Sydney y la verdad es que es muy muyyy bonita, pero despues de lo que vimos en Queensland tampoco nos dejo con la boca abierta, aun así nos encanto, después de eso volvimos con la puesta de sol en el ferry y decidimos quedarnos a esperar que anocheciera para tener buenas fotos de la Opera House y su alrededor de noche.
El tercer día fue más relajado, ya que por aquellas casualidades de la vida, una amiga que trabajaba para Emirates Airlines me dijo que en unos días tenía un vuelo a Sydney, así que con lo aventureras que somos, decidimos que volveríamos a Sydney después de Melbourne aunque en un principio no estuviera en nuestros planes, pero quien pierde la posibilidad de volver a una ciudad como Sydney y de reencontrarse con una amiga? Por lo pronto lo que hicimos fue coger el Monorail (ese trencito que va por vías por encima de la ciudad) y visitamos el China Town donde también cenamos.