Salimos el viernes tras desayunar en el hotel, continuamos por la 1 dirección noreste, pasamos el desvío a Hofn y poco después cogemos el desvío a la derecha dirección Stokksnes avanzando unos 4 km. hasta que se acaba la carretera en el punto donde hay un parking (gratuito) y una cafetería. En ese punto se venden las entradas para acceder con el vehículo, pagando según el número de ocupantes (1200 kr por persona más o menos), te dan un papel con el que un lector de abrirá la barrera que permite acceder con el vehículo, vamos primero hasta el parking del fondo para tener las primeras vistas de Vestrahorn, nos ha tocado una mañana despejada y la vista es preciosa.


Acercando más el coche a la entrada accedemos a la playa desde donde tenemos una vista un poco más cercana, por suerte no hay mucha gente aún.


Y allí al lado se encuentra el poblado vikingo (no real, sino antiguo decorado de película), no es gran cosa pero tampoco se pierde mucho tiempo en verlo.





Vista desde la zona hacia el glaciar:

Continuamos trayecto, no paramos en la cascada de Skutafoss (que no vemos imprescindible), parada rápida en la silla roja (está pegada a la carretera) y viendo los bonitos paisajes junto a la costa este del país.







Pasado Djupivogur bordeamos el fiordo de Berufjordur, como el día se ha nublado ya decido no coger el paso de Oxi (carretera 939) y seguir bordeando el fiordo hasta Breidalsvik donde cojo la 95 hacia Egilsstadir, quizás hubiese sido mejor paisaje siguiendo por los fiordos por la 1 hasta Reydarfjordur y ya desviarme allí, se tardaba más o menos lo mismo, pero entonces no lo pensé.
Por la 95 también había bonitos paisajes y paramos para ver la cascada de Flogufoss, donde no había nadie.
Por la 95 también había bonitos paisajes y paramos para ver la cascada de Flogufoss, donde no había nadie.




Continuamos, subiendo un pequeño puerto después del cual llega la incorporación de la 939 y 40 km. más adelante llegamos a Egilsstadir, la población más grande del este de Islandia.
Lo primero que hacemos es desplazarnos a Eidar, situado a 14 km. al norte, lugar donde tenemos reservado un apartamento para 2 noches, el sitio es bastante tranquilo y el apartamento está genial. Después vamos a Egilsstadir a comprar al Bonus y al Vinbudin que está al lado, y de nuevo al apartamento a comer.
Lo primero que hacemos es desplazarnos a Eidar, situado a 14 km. al norte, lugar donde tenemos reservado un apartamento para 2 noches, el sitio es bastante tranquilo y el apartamento está genial. Después vamos a Egilsstadir a comprar al Bonus y al Vinbudin que está al lado, y de nuevo al apartamento a comer.


Tenemos varias cosas para ver por allí y un día y medio para hacerlo, decidimos ir esa tarde a Seydisfjordur, pueblo situado al fondo del fiordo del mismo nombre.
Cogemos la 93 y la carretera sube, el día se ha abierto un poco, arriba se encuentra el pequeño lago de Heidarvatn, con las montañas con nieve detrás, y unas nubes que asoman y que en pocos minutos nos envuelven totalmente.
Cogemos la 93 y la carretera sube, el día se ha abierto un poco, arriba se encuentra el pequeño lago de Heidarvatn, con las montañas con nieve detrás, y unas nubes que asoman y que en pocos minutos nos envuelven totalmente.


Hasta que no bajamos un poco no nos libramos de ella, pero ya nos queda el paisaje nublado, por suerte esto ocurre antes de llegar a las cascadas que hay junto a la carretera, Haifoss, Gufufoss y Udafoss.




En Seydisfjordur damos un pequeño paseo bordeando el pequeño lago de Fjardará, es un pueblo muy agradable y está muy tranquilo. Es parada de cruceros.






Siguiendo la carretera 951, que sale por el norte bordeando el fiordo, tras unos 4 km. se llega a un parking gratuito desde donde se accede a Vestdalsfossar. Un sendero nos lleva a la bonita cascada del río Vestdalsa, el sendero sube hasta un mirador, y es al llegar allí cuando te das cuenta que te has situado sobre la cascada y la que estás viendo ahora de frente es otra superior que no se veía desde abajo, todo ello decorado con el fiordo y las montañas al fondo.




Vuelta al apartamento para cenar con los chicos que conocimos el primer día y que también estaban alojados en Eidar.