10/02/10
Es la hora Wilson, 6:15h cuando estamos todos desayunando, chai, dosa, tarta de chocolate... Yasmine la mujer de Wilson cocina de lujo.
A las 7h empieza la maratón, esta vez Sunil será nuestro conductor, el coche un Tata Indigo.
Para salir de Port Kochi, tomamos el ferry hasta Vyppeen Island, la cruzamos entera para coger otro ferry, y seguimos dejando atrás islas cruzando puentes. El trayecto de 300km nos va a costar unas 9h parando a comer y disfrutando del paisaje de bosque tropical.
Ya en Mudumalai National Park empezamos a ver los primeros ciervos y diferentes animales, es temporada seca pero se ve bastante verde por todo. Llegamos al Hotel Nest Inn, un hotel de lujo, con jardín, pájaros y una cama muy muy cómoda.
Descansamos un poco y a las 19.30 ya estábamos metidos en el Jeep con Kumar, nuestro guía y un conductor para hacer nuestro primer Night Safari. Vamos por una carretera que esta al lado del río donde los animales van a beber, no pasa mucho tiempo cuando avistamos los primeros animales, ciervos, renos, bisontes y una familia de elefantes con una cría de una semana, todos salvajes y nosotros allí curioseando en su hábitat. Durante más de 2h seguimos viendo todo tipo de animales, una experiencia muy recomendable, nos gusto mucho.
Ya de vuelta en el hotel, cenamos y preparamos nuestras mentes para el día siguiente, a la hora Wilson 6:15h en pie, chai rápido y treeking de 3h por la jungla a ver que vemos ***
11/02/10
La hora Wilson es muy dura, pero vamos acostumbrándonos a ella, a las 6:30h estamos tomando un chai de carretera camino a la jungla, que no esta a más de 2km del pueblo.
Empezamos el treeking en la misma carretera donde nos deja el Jeep, nos adentramos en la espesa jungla donde hay varios tipos de vegetación, una seca, la que tiene hoja caduca, y otra verde intenso que recuerda a una auténtica jungla tropical. A pocos pasos del comienzo vemos pisadas de tigre y sus necesidades, hoy nos acompañan Kumar y un viejecillo de una tribu local. La emoción de ver algún animal en estado salvaje se entremezcla con el miedo a un posible ataque de este, ya que estamos completamente indefensos.
A unos 50m vemos ciervos y renos que nos observan extrañados, son momentos muy bonitos. Seguimos caminando en silencio para que los guías escuchen los sonidos de la jungla para saber por donde seguir. Estamos en un terreno de cientos de kilometros cuadrados donde hay 60 tigres, 600 elefantes, osos, bisontes, búfalos, hienas, linces, monos de varios tipos, etc...
Llegamos a una zona donde hay una cierta altura y allí nos quedamos varios minutos observandoy escuchando, cuando de repente se escucha como si alguien estuviese rompiendo ramas de algún árbol. Los guías nos dicen que hay elefantes cerca y la emoción les invade, vamos en dirección al ruido para verlos en directo. En el camino nos encontramos con la comilona de algún tigre ya en los huesos, era un búfalo. Estamos muy cerca de los elefantes, los guías se agachan como si fuese una película, nosotros hacemos lo mismo con mucho silencio, conseguimos ver a dos elefantes y a su cría durante varios minutos, comiendo y partiendo ramas como si fuesen de papel. Estamos completamente en silencio, solo roto por el chasquido de hojas secas y el enfoque de la cámara. Pasados unos 10 minutos, el guía nos dice que nos acerquemos un poco más a Santy y a Mi, lo hacemos, por que no? (hemos estado muchas veces con elefantes cautivos y son muy buenos), hacemos una foto, pero el elefante se da cuenta de nuestra presencia, pone las orejas hacia delante, y el guía nos manda salir corriendo de allí RUN RUN RUN!!!!, el elefante hace un sonido muy fuerte, se empieza a escuchar como rompe ramas a toda prisa, es un ataque en toda regla. Nosotros apenas vemos al elefante, ya que en el esprint que pegamos de unos 100m seguro que hubo algún record del mundo de velocidad, pero pocos segundos más tarde del sonido estridente del elefante, el guía viejecillo se había parado. El susto dio paso a las risas, las explicaciones de los guías fueron que lo hizo para proteger a su cría. Salimos de la jungla con la sensación de haber vivido un gran momento, muy emocionante, fuimos a ver un par de templos y a descansar hasta la tarde.
Estamos otra vez en el Jeep de safari, solo el simple hecho de estar allí ya vale el momento. Vemos todo tipo de animales ya comunes para nosotros, monos, elefantes, ciervos, renos, bisontes, búfalos, hasta que aparecen una pareja de osos, una pasada. Siguiendo con la ruta Vanesa logra ver la parte trasera de un leopardo, estuvimos esperándolo, pero no hubo forma de volverlo a ver, una pena.
Ya de vuelta de tanta emoción, solo esperábamos que llegase la hora del Night Safari. Volvemos al Jeep a las 20h en una ruta diferente, vemos un oso gigante, otro más pequeño y otros animales. En esta ruta vimos menos, pero el día fue tan completo que no nos importo lo más mínimo.
Cenita y despertador a la hora Wilson ***
12/02/10
Empezamos el día con te indio, hace algo de frío y el sol todavía no se ve, a las 6:30h ya estamos en el Jeep con el safari en marcha, seguimos viendo muchos animales, pero el tigre no se deja ver. Vamos a una plantación de café donde hay unas ardillas muy grandes, una especie de comadreja-hurón y pájaros por todo, hay unas 350 especies diferentes, los sonidos son muy diversos y lo disfrutamos mucho. Aquí se acaban nuestras posibilidades de ver un tigre en estado salvaje por esta vez, tenemos una deuda pendiente, Kumar se ha portado de maravilla con todas sus explicaciones y su amabilidad, volveremos algún día, la jungla engancha de verdad...
Son las 10:30h y pasamos el resto de la mañana tranquilos en el jardín del hotel esperando la hora de comer, a las 13h Kumar viene a buscarnos para dejarnos en la estación del bus que nos llevara a Mysore nuestro próximo destino a 90km de aquí.
Son las 13.30h y nuestro bus a Mysore es de autentico lujo, asientos cama, aire acondicionado, casi nuevo, no parece un bus de la India.

















