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Cinco de nosotros nos tenemos que levantar temprano pues tenemos reservada la actividad del jet boating. El resto puede dormir algo más.
Nos citaron con casi una hora de antelación. Total para estar esperando largo rato en sus oficinas que se encuentran enfrente del i-SITE. El traslado hasta el punto de embarque solo requiere unos diez minutos. Aunque también se pierde bastante tiempo en ordenar al grupo y en ponernos un capote impermeable, un chaleco salvavidas, unas gafas especiales…Teníamos un aspecto que no parecíamos nosotros mismos, totalmente disfrazados.
La actividad se desarrolla en el río Shotover. Más concretamente por la parte que forma un cañón de paredes blancuzcas, moldeadas por la erosión del rápido fluir de sus aguas. Esta parte del río se podría decir que es como una zona virgen ya que no se puede visitar y el único acceso es mediante esta actividad. Para este jet boating en el cañón del río Shotover tiene la exclusiva la empresa Shotover Jet. Los otros jet boating se desarrollan en otras partes de Queenstown y en otros tramos del río.
Aunque tenía mis dudas, esta actividad es muy recomendable. No tienes gran sensación de miedo a pesar de que la lancha circula a unos 85 km. por hora y en momentos determinados se acerca a escasos centímetros de los riscos y peñascos del estrecho cañón. Siempre y cuando no tengas duda alguna de la pericia del conductor de la lancha. Sin olvidarnos de los trombos de 360º que giran la lancha haciendo saltar las gotas blancas del agua del río a tu alrededor.
La foto más conocida de esta actividad se plasma desde su plataforma de embarque con la silueta del puente Edith Cavell por encima del río, antes de comenzar el cañón.
Finalizada esta actividad nos reunimos con el resto del grupo que estaban acabando de desayunar.
Nos ponemos en marcha hacia Glenorchy. La carretera de 48 km. que une Qeenstown con Glenorchy es considerada como una de las diez mejores carreteras escénicas del mundo, (esto indica un folleto de Glenorchy recogido en el i-SITE de Queenstown). La SH 6A discurre paralela y a veces pegada, a la orilla del lago Wakatipu.
El lago Wakatipu es de los grandes, con forma de rayo, ocupando una depresión glaciar y está bordeado casi siempre por altas montañas. Sus aguas de azul turquesa oscuro están consideradas como de las más limpias y también son muy frías. Por tener esta forma de rayo en el lago se produce una especie de “marea” que hace que el agua ondule unos 10 ctm. Cada 25 minutos. Aunque los maoríes tienen otra explicación para este fenómeno. Estas oscilaciones del nivel del agua son producidas por los latidos de un enorme monstruo llamado Matau que duerme en el fondo del lago. Pero a simple vista ni se notan.
Las vistas desde la carretera desde luego son esplendorosas. Hay varios puntos para detenerse, la mayoría para iniciar pequeñas caminatas. Como a medio camino hay un mirador con un aparcamiento más bien pequeño. Se llama Bennett’s Bluff Lookout y es conveniente pararse a echar una miradita. Una miradita que se convierte en algo más y que te recompensa con creces. Una amplia visión del lago que a nuestra derecha se abre hasta la parte superior del lago mostrando en su recorrido visual las islas Pingeón y Matau, al fondo podemos ver por primera vez como se yergue el Mt. Earnslaw con sus dos picos y su pequeño glaciar colgante. Es este el pico más alto, 2819m., que se puede divisar desde el lago, aun perteneciendo al Mount Aspiring NP. Volvemos a reencontrarnos con este parque.
En la cabecera del lago Wakatipu se encuentra la pequeña población de Glenorchy. En contraposición de Queenstown aquí se respira total tranquilidad. Aunque en ella también se pueden contratar varias actividades que se desarrollan en los alrededores.
Junto a esta población fluyen los ríos Dart y Rees desembocando en el lago Wakatipu.
Desde el embarcadero hay un paseo fácil y al parecer atrayente, el Glenorchy Walkway, en el que se pueden ver cisnes negros. Pero nosotros lo dejamos estar porque nos dirigimos al “Paraíso”.
Glenorchy también se conoce con el nombre de ”Puerta del Paraíso”
Paradise es un valle remoto situado a unos 20 km. tierra adentro de Glenorchy. Valle de cultivos situado en el borde del Mt. Aspiring NP, en un entorno impresionante, pasado Diamond Lake y justo debajo del MT Earnslaw.
Por una carretera asfaltada abandonamos Glenorchy, pero como a los 10 o 15 km. la abandonamos para proseguir por carretera de tierra hacia Paradise Valley. Pero antes ha tenido una bifurcación a otra carretera de tierra que va por el valle del río Rees y a alguna ruta de senderismo.
Por esta carretera de tierra en la que circulamos pronto nos encontramos la indicación de Diamond Lake. Otro lago diamante muy distinto del que visitamos en Wanaka y con el que no hay que confundirse. Este tiene una forma triangular (aunque no lo parezca a simple vista) y se encuentra rodeado de altas montañas, entre las que se encuentra el Mt. Alfred. Hay un pequeño arroyo que vierte sus aguas al lago y en sus orillas se extienden algunos prados húmedos que se encuentran ocupados por muchas vacas pastando. Estas vacas viven en un entorno privilegiado, con paisajes amplios e impresionantes, que destilan tranquilidad y sosiego.
Una buena antesala para Paradise Valley, del que ya tenemos una primera visión, en concreto de las montañas que lo rodean.
La carretera ahora atraviesa un denso y mágico bosque de hayas. En el mapa señalan que fue una de las zonas de rodaje de escenas del Señor de los Anillos. Pasado este bosque es cuando realmente se penetra en el Paradise Valley. No sin antes tener que atravesar un pequeño vado de un arroyo llamado Jordan. Ahora es pequeño pero no siempre está igual, de hecho hay carteles en la carretera avisando de tal eventualidad.
No hay una versión clara de porqué le pusieron Paradise a este valle. Por su belleza,… por los patos Paradise que por aquí había,….Pero dentro de la zona de Paradise te puedes encontrar con nombres como La “Roca del Edén”, la ”Puerta de los Cielos” y tienes que cruzar un río llamado Jordan.
A la entrada del valle se encuentra Arcadian House, hermosa mansión victoriana de color verde que vemos en la lejanía y que no te esperas encontrar por estos lugares. La misma fue construida a principios del s.XX y representa una triste historia de su dueño inicial, el “hermitaño de Paradise” que nunca llegó a habitarla. Precisamente Arcadia, en griego, significa paraíso.
Paradise tiene su propia historia y fue una de las excursiones favoritas para los primeros viajeros a Nueva Zelanda. En su entorno se han rodado algunas películas y una serie de televisión. No solo escenas de LOTR
Nos detuvimos al filo de la carretera, cerca de la valla metálica de los dominios de la granja. Porque la visión del paisaje desde el coche se nos hacía muy escasa. Amplios prados de pasto se encuentran rodeados de altas montañas con bosques de hayas en sus laderas inferiores. Algunas montañas conservan nieve en su cima. Como los picos de los montes Nox y Chaos que nos observan desde su altura y que son ya parte del Mount Aspiring NP.
La carretera que continúa por el valle sigue siendo de tierra, sin asfaltar. Con la añadidura de que hay que cruzar varios vados. En algún sitio he leído que son como diez vados. Pero yo no los conté. Y nosotros nos los encontramos con poca agua y la carretera no estaba embarrada. Circunstancia esta que puede ser muy distinta si ha habido lluvias o es otra estación del año. En uno de los mapas que me dieron en el i-SITE indicaba que a partir del lago Diamond la carretera era solo apta para vehículos 4x4.
Nosotros íbamos en ambos SUV y la verdad es que se portaron muy bien. Uno de los vados que cruzamos sí que tenía bastante agua y era ancho, los coches lo atravesaron sin ningún percance ni problema.
Las tierras de cultivo y pastos van pronto cambiando, apareciendo los prados de”tussock” y los matorrales de “matagouri”.
Y llegamos hasta….. que la carretera finaliza. Un amplio prado de alta yerba en dónde hay una caseta del DOC. Desde aquí ya no se puede ir a ningún lugar como no sea andando. Estamos en lo más remoto del valle. Varias rutas, clasificadas como ”tramping”, tienen su partida desde el lugar, como la mítica Dart Track.
Aunque son muchas las actividades que se desarrollan, bien desde Queenstown, bien desde Glenorchy, para visitar Paradise Valley y otras varias en el río Dart, solo nos encontramos un poco gente al inicio del valle. Aquí estamos completamente solos. Nosotros y el paisaje remoto que nos envuelve.
Nos acercamos hasta la misma orilla del río Dart cuyas aguas claras circulan tranquilamente en un amplio cauce trenzado, con varios brazos que se encuentran separados por bandas de arena dorada y que se cruzan a su antojo.
El Mount Earnslaw se alza imponente sobre el valle, al igual que otros tantos picos pertenecientes a Mt Aspiring NP.
Aquí se hace aún más evidente la sensación de que estamos en un lugar especial. Una mezcla perfecta de lugar remoto y aislado y una naturaleza grandiosa. El “paraíso” no es solo un lugar, es como tú te puedas sentir ante este lugar.
Volvemos por la misma carretera, cruzando los mismos vados, contemplando de nuevo estos paisajes impresionantes.
Llegamos al cruce que dejamos en la mañana con la Routeburn Road, ya asfaltada, y nos encaminamos por ella, rodeando el Mt.Alfred. Al poco esta carretera cruza el río Dart y desde este punto se obtiene otra de las vistas sublimes del día. Una vista de, quizá, los mismos picos que hemos contemplado con anterioridad pero desde otro ángulo. Un ángulo más amplio y centrado en el cauce amplio del río Dart. Esta vista es similar a la contemplada como Isengard en el Señor de los Anillos.
Por otro lado, amplios prados amarillos plagados de ovejas y de florecillas que parecen resplandecer bajo el sol, con el sensacional telón de fondo de las montañas.
El asfaltado de la carretera pronto se acaba, en un cruce en el que por la izquierda se llega al pueblito de Kinloch y a la derecha nos lleva hasta el inicio de la Routeburn Track.
Aunque nos detuvimos un poco antes. En un camping situado junto al río Routeburn desde el que se inicia la ruta al lago Silvan. Creo que se llama igual, camping Lake Silvan.
Hay que cruzar el río Routeburn por un puente colgante y adentrarse por un bosque nativo de altos y atractivos árboles cubiertos de musgo. El camino va atravesando viejas morrenas de río por lo que tienes varios sube y baja moderados y algunos puentes pequeños que salvan el arroyo de desagüe del propio lago Silvan. Desemboca en una hermosa plataforma de observación del lago situada justo al lado de la corriente de salida.
El lago Silvan es pequeño pero atractivo y está rodeado por montañas cubiertas totalmente de bosque. Por ello no suele soplar el viento, si bien no ofrecía en los momentos que lo visitamos una buena vista con reflexión de las montañas.
Sin habérnoslo propuesto hicimos la versión corta de la ruta ya que regresamos por el mismo camino. Aunque intentamos rodear el lago, nos topamos con mucha vegetación y suelos embarrados y no encontramos el camino. Tampoco buscamos con mucho empeño.
Así que nos perdimos la vuelta por la vía del antiguo tranvía que, tengo entendido, es la más bonita y con varios ejemplos de regeneración de bosque.
La ruta completa sería de unas 2 horas. A nosotros nos llevaría quizá 45 minutos.
Desembocamos nuevamente en el camping y aprovechando su zona de picnic y servicios nos tomamos el bocadillo con el fondo de aquellas gloriosas vistas.
Nuestra planificación contemplaba continuar hasta el inicio de la Routeburn Track y realizar, al menos, el Routeburn Nature Walk de 2,5 km. Pero pensándolo mejor decidimos volvernos a Queenstown ya que tenemos un largo camino hasta Te Anau, dónde hacemos noche. Todo este plan hubiera estado bien si nos hubiéramos quedado en Queenstown una noche más, como estaba contemplado en el programa inicial.
Con lo corto que sería el trayecto de poder atravesar estas montañas y llegar a la Milford Sound Road. Me refiero a ir por carretera ya que atravesarlas es posible. De hecho es lo que hace la famosa Routeburn Track que en sus 32 km. de travesía va a finalizar a la zona The Divide en la Milford Road, como bien comprobaremos en un par de días.
Respecto a este tema alguien comentaba que había una propuesta de hacer un túnel de unos 11 km. que atravesaría montañas del PN de Mt. Aspiring y conectaría más directamente a Queenstown con Milford Sound. Propuesta que no prosperó en un país tan cuidadoso con su naturaleza.
En poco más de media mañana hemos recorrido mucho más que lo que proponen las empresas dedicadas a organizar excursiones por Paradise Valley, Dart River y zona de inicio de la Routeburn Track. Y con un coste también muy inferior. Basta tan solo con echar un vistazo a las actividades de alguna de estas empresas.
Nos detuvimos en Queenstown para realizar compras en el supermercado que hay en el centro de la ciudad, Four Square, mientras algunos compañeros se tomaban un café. Con precios por las nubes, como casi todo en Queenstown.
Y carretera, ya sin paradas hasta la localidad de Te Anau.
De camino nos topamos con las dos desviaciones posibles para llegar hasta los Mavora Lakes. Los tenía anotados como plan B o C. Se encuentran en un impresionante valle entre montañas y ofrece actividades buenas de senderismo. Pero su principal reclamo es tener cinco localizaciones que aparecen en LOTR. Sin haber visto la serie hubiera sido difícil poder distinguir estas localizaciones. Las tenía incluidas porque, a mi entender, Peter R. Jackson ha demostrado tener muy buen ojo para elegir las localizaciones de estas series. Casi todas se encuentran en lugares fantásticos.
Más bien lo tenía anotado como plan B o C del día siguiente por si nos fallaba la actividad principal programada. Pero no fue así y los lagos Mavora se quedaron sin ver. Como tantos otros lugares.
En Te Anau teníamos reservado un solo apartamento de tres dormitorios, en dos de ellos podían dormir tres personas. Tiene buenas y cómodas instalaciones. Lo que no supe interpretar bien fue los de los baños. Dos baños y una toilette. Y así era. Tan solo que en los baños solo había eso, baños. Y una sola toilette separada para ocho personas. Al final nos las apañamos medianamente bien. Se repartieron los dormitorios, con mayor o menor fortuna, y pusimos algunos turnos.
Es un apartamento de Birchwood Cottages.
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