Tres semanas en Grecia por libre (2022) ✏️ Blogs de Grecia

NOTA AGOSTO 2023: se nos ha pasado el año volando y, a pesar de haber comenzado el diario durante el viaje (para evitar olvidar detalles), algunas partes siguen sin terminar. Sobre todos las imágenes-fotos, ya que requiere disponer de tiempo suficiente. ¡Intentaremos completarlo!

Os damos la bienvenida a este diario, que intenta resumir nuestras aventuras durante tres semanas, por libre, en Grecia.

CORONAVIRUS
Aunque no es el asunto más importante, por supuesto, lo ponemos en primer lugar por si próximos viajeros están preocupados por ese tema.
El viaje estaba previsto para el año pasado, pero la situación sanitaria y las decisiones del gobierno griego sobre las restricciones de entrada a ciudadanos españoles hizo que nos decantáramos por turismo nacional (Islas Canarias).

Y fue una sabia decisión, ya que es un viaje que necesita meses de preparación y posibles restricciones sanitarias podrían no arruinarlo, pero sí hacer que no lo disfrutáramos de la forma que merece.
Podemos asegurar que en agosto-septiembre 2022 el Coronavirus no existe en Grecia. Uso casi inexistente de mascarillas y ninguna medida o restricción notable.

SEGURO DE VIAJES
Solicitamos la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE), pues la teníamos caducada. Tarda una semana o así en llegar, así que no os demoréis:
www.seg-social.es/ ...11566/1761
No vimos necesario contratar un seguro adicional. Afortunadamente, las únicas incidencias fueron una picadura de insecto y otra de anémona, jejeje.

LA RUTA
Grecia es un país tan rico en todos los aspectos, especialmente a nivel geográfico, que resulta muy sencillo trazar multitud de posibles rutas. No hay más que leer el foro para comprobarlo.
A anteriores viajes les hemos dedicado dos semanas, pero siempre acabamos con ganas de más y nos arrepentimos cuando tenemos que volver a casa.
Así que en esta ocasión apostamos por un recorrido de tres semanas. Un gran acierto, pues es totalmente asumible y no supone un gran cansancio o saturación con una buena planificación y ganas, muchas ganas.
Gracias a los consejos de las personas que colaboran desinteresada y amablemente en el foro, trazamos la siguiente ruta, expresada según el número de noches que pasaríamos en cada lugar:
6 noches en el Peloponeso: Micenas, Mistrá, Olimpia, Delfos y Meteora (2).
9 noches en Creta: Chania (4), Rétino (2), Agios Nikolaos (2) y Heraklion.
4 noches en Rodas.
2 noches en Atenas.

NUESTRO PERFIL
Pareja joven (más o menos :roll:) incansable, sin miedo a jornadas maratonianas, ya sea caminando, en coche o de turismo.
Cansinos de yacimientos arqueológicos, nos gusta exprimir e interpretar toda la información mientras los visitamos. Disfrutamos mucho viendo más allá de lo parecen tres piedras mal puestas, imaginando lo que allí hubo hace cientos o miles de años y dejándonos llevar por el ambiente y la magia del lugar.
La vida es un continuo aprendizaje, y de Grecia volvemos con unos conocimientos e inquietudes inusitadas (haciendo honor a nuestro nick), tanto adquiridas como por descubrir cuando vayamos digiriendo lo vivido y ampliando conocimientos.
Nos encanta la playa, pero no nos gusta invertir un día completo, salvo excepciones, porque somos activos y para descansar las tenemos cerca todo el año. Y si para llegar hay que hacer una ruta de senderismo, más las disfrutamos.
Alternamos jornadas comiendo en restaurantes o “tavernas”, o bien haciéndonos unos bocatas para comer tranquilamente en la playa o en la montaña, dependiendo del plan del día.
Hemos alternado alojamientos baratos y algo más caros (máximo 100 € la noche), bien hoteles o apartamentos, siendo todos igualmente de buenos y adaptándonos a los que nos ofrecía cada alojamiento.
Las fuerzas han acompañado todo el viaje, a pesar de que nos acostamos tarde y nos levantamos un poco temprano. Sólo flaqueamos un poco al final de un día intenso de muchas visitas e información, sumado al excesivo calor cretense. Por normal general el cuerpo nos pide más y sólo contábamos con la limitación de horarios y la luz diurna. A finales de agosto comienza a oscurecer a las 19:45-20, de manera súbita, tras el ocaso. A las 20:15 ya es noche cerrada.
No nos da miedo conducir de noche ni en carreteras de cabras con curvas. En Turquía, hace ahora tres años, nos curtimos bastante en este aspecto. Pero como contaremos en una jornada, no todo el monte es orégano…
Así que en este diario encontraréis una curiosa mezcla de senderismo, culturas antiguas, playas, gastronomía, naturaleza, monasterios, etc.
Y sobre todo intentaremos dar respuesta sobre posibles tiempos de visitas según nuestra experiencia, algo que siempre solemos echar en falta de cara a planificar nuestros viajes.

EQUIPAJE
Tres intensas semanas con jornadas en las que alternábamos senderismo, playa y visita de yacimientos y sitios arqueológicos. Por ello, necesitábamos bastante ropa para una mayor comodidad.
Optamos por llevar, por persona, maleta grande facturada de hasta 23 kg de peso, maleta de cabina de 8-9 kg (imposible llenarla más con ropa normal) y una mochila mediana como objeto personal en cabina y para las excursiones diarias.
Y ya que íbamos a cargar con las maletas, pues las llenamos hasta arriba.
Siendo agosto-septiembre, mayoría de ropa veraniega, camisetas de senderismo (finas y ligeras), calzonas y pantalones cortos, chubasquero/cortavientos y una sudadera (por si las mocas, que nunca se sabe).
Hay que tener en cuenta que llevamos botiquín completo, la poca (pero necesaria) ropa de abrigo, cámaras, gafas de buceo/esnórquel (imprescindible), productos de higiene, zapatillas, zapatos de senderismo (caña baja y alta), etc.
Y la verdad es que nos ha sobrado muy poca ropa.
Sin olvidar que en plena temporada estival y visitando yacimientos algo perdidos y abandonados, llevamos 3 botellas térmicas para el agua, a fin de que conservaran mínimamente la temperatura gran parte del día.

VUELOS DE IDA Y VUELTA
Una vez definidas y “sincronizadas” nuestras vacaciones, lo primero fue buscar vuelos. Íbamos tarde, y éramos conscientes.
Terminamos reservando en junio, apenas 2 meses antes de partir. Es un poco agobiante ver cómo empiezan a subir los precios a diario, pero el trabajo y las vacaciones mandan.

La ida la hicimos en dos partes independientes.

La primera, y más urgente, consistía en buscar un vuelo a Atenas.
Muchísimas opciones, escalas en aeropuertos recónditos, compañías, comparadores, metacomparadores y bailes de precios. Pero optamos por destinar una partida mayor a este gasto para evitar escalas interminables y estar tirados en el aeropuerto toda la noche. Y pensándolo bien, la diferencia de precio no es tanta valorando calidad y bienestar.
Encontramos un vuelo directo a Atenas con Aegean que salía pasadas las 2 de la madrugada desde Madrid-Barajas. Afortunadamente no nos lo pensamos mucho y lo compramos. Aunque no solemos hablar de presupuesto en nuestros diarios, para que conste como referencia para futuros viajeros: sobre los 275 €/pax, con sólo 2 meses de antelación en la compra.
Es una arma de doble filo, pues te garantiza disponer de un día completo para aprovecharlo al máximo, pero cuando llega la noche comienzas a ser consciente de que llevas casi 48 horas sin apenas dormir. Pero nada, al día siguiente ni te acuerdas…

El cómo llegar a Madrid lo estudiaríamos más adelante (ya fuera en bus, coche, tren o avión), pero encontramos un vuelo relativamente barato de Iberia Express que sólo nos supondría esperar un par de horas en el aeropuerto antes del vuelo a Atenas. Menos de 50 €/pax con maletas facturadas. Rápido, que se agota.

El vuelo de vuelta lo hicimos con Iberia e Iberia Express, para llegar, respectivamente, a Madrid-barajas y a nuestra ciudad.
Era con transbordo, así que nos olvidamos de las maletas hasta llegar al aeropuerto final.
Fue más barato que la ida con Iberia Express+Aegan.

FERRY
Muy caros, con poca frecuencia y recorridos larguísimos. Los descartamos rápidamente a favor de vuelos internos.

VUELOS INTERNOS
Buena experiencia con la aerolínea Sky Express para desplazamientos desde Atenas a Creta y Rodas.
Primer vuelo Atenas-Creta con una hora de retraso, imaginamos que acumulado por estar todo el día yendo y viniendo el mismo avión en modo bus.
Personal simpático tanto en facturación como en cabina.
Bebida y galleta de cortesía para todo el mundo.
Hicieron la vista gorda con el exceso de peso de una de las maletas facturadas.
En todos los vuelos nos ofrecieron facturar gratis el equipaje de mano, lo que alivia mucho el movimiento por las puertas de embarque.
Dejaban pasar a todo el mundo con mochilas como objeto personal, sin comprobar medidas.
Elegimos tarifa "Enjoy" (70-80 €/pax de media) porque necesitábamos facturar maletas y resultaba más favorable que la básica más maletas aparte. Está tarifa incluye acceso rápido y prioritario en el control de seguridad, así como acceso libre a su zona VIP con sillones, comida y todo tipo de bebidas.
La del aeropuerto de Atenas era completísima, tenían de todo.
La de Heraklion algo más corta, pero muy bien.
La de Rodas, tras buscarla insistentemente, resultó que estaba cerrada en verano... o eso nos dijeron en el punto de información.
El vuelo Creta-Rodas fue algo más caro porque teníamos que hacer transbordo rápido (sin tocar maletas) en Atenas. Ya hablaremos de ese aeropuerto y nuestra accidentada llegada a Rodas…

SOBRE GRECIA
Os remitimos a un diario de referencia como es el del usuario @Donni: “Tras las huellas de Ulises (Grecia 2015)”
Geografía, población e idioma:
www.losviajeros.com/ ...ION-IDIOMA
Historia, arquitectura y mitología:
www.losviajeros.com/ ...-MITOLOGIA
Gastronomía:
www.losviajeros.com/ ...ASTRONOMIA

ALQUILER DE COCHES
Por nuestras preferencias de viaje el coche de alquiler es imprescindible. Nos aporta tal libertad que nos no nos importa el gran desembolso que supone. Porque vaya cómo estaban los precios este año, sobre todo en Grecia continental.
Como nuestra ruta suponía viajar con la maleta a cuestas, buscábamos un coche con buen maletero que nos asegurara no dejar nada a la vista, para nuestra tranquilidad, durante las visitas.
En Turquía nos fue de maravilla y la sensación de seguridad fue total, pero no sabíamos cómo podría resultar en Grecia.
El perfil de coche buscado era berlina intermedia con un mínimo de potencia, aunque en Grecia no se puede correr mucho, cambio manual y maletero de más de 500 litros.
Los candidatos: Peugeot 301, Škoda Rapid y similares.
Descartamos los SUVs porque la mayoría tenían, curiosamente, menos volumen de maletero y era una pérdida de dinero, en nuestra opinión. Y tras el viaje, nos reafirmamos en esta idea.
Buscado ese perfil de coche mediano-familiar con capacidad holgada para 4 maletas, la semana se iba a más de 1000 € con seguro a todo riesgo sin franquicias. En un viaje con un presupuesto tan elevado, pagar 100 € más no supone nada para garantizarnos el ir conduciendo con toda la tranquilidad del mundo en unas carreteras tan complicadas.
Para el Peloponeso contratamos un Peugeot 301 con Kosmos Car Rental (www.kosmos-carrental.com/en). Es un coche equilibrado y sencillo, que respondió muy bien. 780 € con seguro a todo riesgo y franquicia máxima de 100 € (vimos empresas con precios muy parecidos y 1000 € de franquicia para coches similares: una locura). Y porque elegimos el pago con cancelación por lo que pudiera pasar, pero al pagarlo completo de manera anticipada el ahorro era considerable. Recogida y entrega en terminal de llegadas y un personal súper majo y atento, que no nos puso pega alguna por retrasar la hora de entrega (avisando el mismo día, con antelación, teniendo en cuenta que tenía que desplazarse expresamente para recogernos el coche) y entregarlo con algo menos de combustible. Totalmente recomendado.

En Creta no nos complicamos mucho y optamos por Anna Cars (www.annacars.gr). Nos resultaron muy serios y atentos las semanas previas. Además, precio final garantizado sin sorpresas. 485 € por 9 días coche de categoría C (Peugeot 208, Skoda Fabia, VW Polo o equivalente) y 585 € por uno de categoría D (VW Golf, Fiat Tipo o equivalente). Pagamos un mínimo suplemento para tener un Škoda Rapid de gasolina, muy nuevo, y cambio automático. Totalmente aconsejable para las carreteras de montaña cretenses. Muy buen coche.
100 € por anticipado y el resto allí. Te piden que, a ser posible, se page en metálico, pero aceptan pago con tarjeta un poco a regañadientes.
Nuevamente, muy recomendado.

Para Rodas optamos por Rhodes Car Rental (www.rentacar-rhodes.com/). Vistos los precios de Peloponeso, nos pareció una buena oferta para un Peugeot 301 durante 4 días: 288 € con seguro a todo riesgo que incluía daños en ruedas, bajos y lunas. Sin costes ocultos, aseguran.
La empresa pertenece al grupo Rodos Cars, con sus tristes coches blancos fácilmente reconocibles por los “discretos” vinilos de color rojo, incluso hasta en la puerta del combustible no vaya a ser que te equivoques y eches el que no toca. Esta empresa o grupo podría tener más de dos tercios de la flota de la flota de coches de alquiler isla, seguida muy de lejos por Marathon Rent a Car. El resto de empresas son residuales a nivel de cuota.
Cuando llegamos nos dieron, sin avisar, un coche superior con el que disfrutamos mucho conduciendo por las carreteras de la isla, un Toyota Corolla diésel manual, potente y aunque castigado por fuera (la sal no perdona), con menos de 20.000 km. Qué delicia de coche.

CARRETERAS Y COMBUSTIBLE
El diésel rondaba en Grecia continental los 1,80 €, no habiendo mucha diferencia en ciudades grandes. En los pueblos aprovechan, imaginamos que por la falta de oferta, y el precio se iba a los 1,90 € como mínimo. Las estaciones de servicio más baratas solían ser BP, Shell y Aegean.
En las islas se notaba bastante la subida de precio. En Creta no nos fijamos mucho en el diésel, ya que usábamos “unleaded” de 95 octanos. Quizás estuviera en torno a 1,90 €.
Aquí si que había diferencias abismales. En 500 metros podías encontrar más de 5 gasolineras y los precios de la 95 iban desde los 2 € a los 2,20 €.
En Rodas más o menos parecidos.
A ver si ordenamos papeles y buscamos los tickets de combustible.
Qué decir de las carreteras. Muy a la “turca”, arcenes que sirven de carril adicional, carreteras de dos carriles con 4 coches en paralelos (dos circulando por los respectivos arcenes y otros dos adelantando a los primeros).
Como íbamos curados de espanto, tampoco nos sorprendió.
En media hora ya te haces y eres un griego más, literal.
A pesar de ello los conductores suelen ser atentos, yéndose al arcén para que los adelantes si ven que vas más rápido que ellos. Y, lógicamente, nosotros hacíamos lo mismo.
Las líneas continuas no existen, y te mal acostumbras a hacer alguna que otra barbaridad que en España sería punible con algún puntillo…hemos de confesar.
En Grecia continental y el Peloponeso hay mejores carreteras, casi todas de pago. Suelen ir por tramos de 2 a 5 € como mucho, aunque cruzar el puente del Río-Antirio para cruzar al Peloponeso nos costó casi 14 €. Una barbaridad, a ese paso podrán forrarlo de pan de oro en unos años.
Es la panacea comparado con las islas. Unos 1700 km de 7 días. Prueba superada y convalidado el primer curso de kamikaze griego
Es curioso como nunca sabes a qué velocidad has de ir, pues en un tramo de pocos kilómetros el límite de velocidad puede cambiar decenas de veces: 80-50-90-130-90-110-120…Qué jaleo.
La llegada a Creta en plena noche fue una auténtica locura. Conducir desde el aeropuerto de Heraklion hasta la Cánea, sin anestesia, fue un curso acelerado que nos sirvió para el resto del viaje. Carreteras con curvas interminables sin apenas luz, radares escasos pero puestos a mala leche a 50 km/h (que ni funcionarán, porque el personal los pasaba a toda leche), cruces inverosímiles de 8 carriles que coinciden en un metro cuadrado, señales liosas tanto verticales como en el asfalto (que podrían llevar lustros sin pintarse), cabras cortando carriles, kamikazes, ir sin tener ni idea de la velocidad actual porque la última señal la dejamos a 5 kilómetros, etc.
Si os gusta conducir, vais a disfrutar como niños. Lo prometemos.
En Rodas está algo más tranquila la cosa, pues casi todo el mundo se acumula en los alrededores de la capital (vaya atascos se forman) y cuando más al sur vas hay menos tráfico.
Las carreteras de costa son algo mejores, pero cuando se cruza de oeste a este (o viceversa) hay que cruzar carreteras muy sinuosas en las que íbamos prácticamente solos.
Disfrutamos mucho también los desplazamientos en Rodas.

Desde que llegamos a Grecia nos llamó poderosamente la razón una especie de buzones que había junto a las cunetas y arcenes de las carreteras. Totalmente despistados nos dio por pensar que eran eso, buzones para la gente que vive en el campo
Llegaba a ser exagerado, porque nos encontramos algunos tramos de carretera en los que había un ejemplar de este peculiar buzón cada 10 metros. No había curva sin cubrir.
Más tarde caímos en que eran altares que contenían velas, medallas, estampas y flores, denominados kandylakia.
Leímos entonces que su fin es algo ambiguo. Por un lado hay quienes dicen que son para recordar una persona fallecida en accidente de tráfico. Que en Grecia, analizando la conducción, no habría sitio para poner tantos altares...
Otras fuentes indican que son para agradecer que alguien se libró de un accidente, o que incluso no guarda relación alguna con la muerte y la carretera.
Independientemente de su fin, es muy curioso ver todo lo que se mueve entorno a esa particular arquitectura religiosa (nos encontramos a pie de carretera más de un almacén especializado en estos altares, de todas las formas, tamaños y materiales).

HOTELES
21 noches, ahí es nada. Nuestra idea era gastarnos una media de 75 € diarios. Y sin querer lo clavamos.
Intentábamos prescindir de hoteles, ya que sólo nos interesaba dormir, desayunar y dejar la habitación temprano para llegar al siguiente hotel a la noche.
Hemos estado en hoteles, hostales, apartamentos y hasta en un camping (que siéndolo, realmente “no lo era”).
Dábamos prioridad a que las reservas estuvieran disponibles en Booking.com, por confianza, que fueran cancelables (nunca se sabe qué puede pasar) y a poder ser con terraza, vistas o algún encanto especial (ya hablaremos más delante de este último aspecto).
Lo mínimo que pagamos fueron 48,30 € AD, y lo máximo 100 € SA. Lo explicaremos con detalle a su debido tiempo, en cada etapa.
Nos cogió el toro y estaba todo casi reservado, quedando sólo migajas con unos precios muy altos. Pero era cuestión de tener paciencia y seguir buscando.
La satisfacción ha sido absoluta en todos los alojamientos, y no cambiaríamos casi nada. Nos consideramos muy afortunados con la elección realizada.

PLAYAS
Todas maravillosas, a su manera. La variedad es tan abrumadora que podríamos pasar semanas y semanas visitando playas sin repetir.
En la gran mayoría se puede realizar esnórquel con una magnífico sabor de boca. Llegamos a ver, sin mucho esfuerzo, multitud de peces exóticos. Incluso hasta un hermoso pez escorpión a unos centímetros, que nos causaba tanto asombro como miedo.
Y que decir de los erizos de mar, jamás vimos unos tan gigantes.
Mucho ojo, aconsejamos mirar donde pisamos y llevar, por precaución, chanclas cerradas o escarpines.

ENTRADAS MONUMENTOS
Por comodidad compramos de manera anticipada algunas entradas por aligerar trámites y hacer el gasto desde España, pero no es necesario.
Las únicas que debéis comprar con tiempo son las de la Acrópolis. Y, por supuesto, aconsejamos comprar la conjunta de 30 €.
Más información: etickets.tap.gr/ ....exe?PM=P1

PAGOS CON TARJETA
En el 95% de los comercios, por decir una cifra muy real, podréis pagar con tarjeta. Lugares donde seguro que no aceptan pagos con tarjeta: monasterios de Meteora (3 €), algunos monasterios perdidos, tiendas de monasterios o parecidas, barco de Elounda a Spinalonga (12 €) y algunos más que iremos recopilando.
Hay cajeros por todos lados en las grandes ciudades, incluso dentro de tiendas de souvenirs.
Nosotros llevamos unos 200 € en metálico y por precaución sacamos otros 100 € para los últimos días, pagando 2€ de comisión.

CAFÉ
Café bueno donde fuéramos, ya fuera de filtro, espresso o griego (o turco, que es lo mismo, con posos).
Con el agobiante calor de finales de agosto es casi obligatorio engancharse al frapé (café con hielo y crema de leche y/o café, aunque hay muchas variantes con nata, chocolate e incluso bolas de helado) o al fredo (café con hielo picado y agitado) espresso o capuchino.

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Dormir está sobrevalorado... comienza la aventura

Este era el plan del día:

· Canal de Corinto
· Acrocorinto
· Corinto
· Micenas
· Noche en Micenas


Tras una larga espera para recoger el equipaje facturado, a las 7:30 de la mañana ya estábamos completamente operativos, con el contrato del coche de alquiler firmado, las maletas cargadas y en marcha. Podéis ver los detalles del alquiler en la etapa 0.

Con el despiste, la ilusión y el jet lag se nos pasó comprar agua, un gran fallo teniendo en cuenta donde íbamos.

La primera visita prevista era la de Acrocorinto, pero con las ganas nos pasamos la salida del Canal de Corinto; y cuando nos dimos cuenta ya estaba unos kilómetros atrás. Como está cerrado el tráfico marítimo desde hace años por desprendimientos, nos hemos autoconvencido de que no nos perdimos mucho…esperamos, jejeje.

ACROCORINTO

Llegamos a las 9 horas, tras un primer encuentro muy tranquilo con las carreteras griegas. Era un espejismo.

Acrocorinto es una antigua ciudad asentada sobre una impresionante zona rocosa de casi 600 metros de altura, que la convertía en un importante bastión fortificado. Por lo que leímos, era habitual refugio para los habitantes de la vecina ciudad de Corinto en caso de ataque.


Google Maps: goo.gl/maps/7dNsPDDZGrmTX6ab6
Web oficial: odysseus.culture.gr/ ...j_id=15661
Horario de verano: 8:30-15:30
Entrada: gratuita
Recomendaciones: agua, gorra y protector solar, ya que prácticamente no hay ninguna sombra en todo el recorrido (a excepción de algún pequeño árbol). Y ojo con el calzado, que las piedras del acceso son extremadamente resbaladizas.
Tiempo aproximado de visita: 2 horas.
Dificultad: media por el sofocante calor y las acusadas pendientes.
Comentarios:
Impresionante vista desde Corinto y sudor frío al pensar que teníamos que subir hasta allí, jejeje.
Algún valiente, y loco, viajero iba subiendo desde el pueblo. Ahí es nada.
Hay parking amplio a unos minutos de la entrada.
La información dentro del sitio es muy escasa y parca.
A destacar el estado de su triple muralla y la restauración tan acertada que han realizado del castillo.


Las vistas son poco más que espectaculares.
Aconsejamos no subir al templo y a la tumba, pues no merece la pena el esfuerzo.
No os perdáis la fuente subterránea (Peirene), la iglesia de San Demetrio (omnipresente en toda Grecia este buen santo) y las ruinas de la mezquita.


Como estábamos secos y muertos de calor, a eso de las 11 ya estábamos reponiendo líquidos en el bar que hay justo al lado, que había abierto no hacía mucho: goo.gl/maps/pKmoDyAAsdU17Tgw7

Tras el receso, a las 11:20 ya estábamos en Corinto, nuestra siguiente parada.

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CORINTO

Corinto es una antigua ciudad estado habitada casi desde manera continuada desde el periodo neolítico hasta el s. XIX, que fue destruida por un terremoto.


Google Maps: goo.gl/maps/3zqrc71iU1LJyNTf9
Web oficial: odysseus.culture.gr/ ...bj_id=2388
Horario de verano: 8-20
Entrada: 8 €
Tiempo aproximado de visita: 2:30 --> 1:30 la ciudad antigua + 1 hora el museo
Recomendaciones: hay fuentes, así que sólo gorra y protector solar
Dificultad: baja, todo llano
Comentarios:
Buena información para interpretar, y señalización en general.
Museo aparentemente pequeño pero muy interesante y rico. Hay algún tesorillo que es mejor no desvelar y así dejamos la intriga.
A destacar el Templo de Apolo y la fuente Pirene.

Tras la visita nos acercamos al odeón y al teatro, ambos fuera del recinto visitable.
El Odeón está perimetrado por una cancela que no permite su visita.

El Teatro sí se puede visitar accediendo por un camino que sale a su derecha, bajando unos minutos bajo un sol de justicia. Pero no queda prácticamente nada. Os podéis ahorrar el paseo.


Camino de Micenas, paramos a almorzar en Melina's Taverna (g.page/melinas-mykines)

Taverna familiar con comida tradicional pero servicio lentísimo hasta desesperar, a pesar de haber pocas mesas a esa hora. Todos los comentarios de excelente atención y postres cortesía de la casa no encajaron con nuestra experiencia, la verdad.

Fue nuestro primer contacto con la comida griega: tzatziki (mezcla de yogur con pepino, aceite de oliva, limón, ajo y hierbas), souvlaki (pinchos de carne de cerdo ligeramente adobada, acompañados con tomate, lechuga, cebolla y pan de pita). Cerveza de ½ litro y vino blanco de la casa. De postre yogur con miel y tarta de nueces. Todo bueno pero nos pareció nada barato.

A las 16:30 ya estábamos en Micenas/Miceno.

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MICENAS

Micenas es un yacimiento arqueológico catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1999. Es muy importante en la historia de Grecia y el Peloponeso, pues pone nombre y contexto a la primera civilización griega notablemente avanzada, la micénica, que se desarrolló entre el 1700-1600 a.C. y el 1100 a.C., aproximadamente.

Los micénicos formaron un sistema de gobierno organizado en estados guerreros regidos por reyes, formando sistemas jerárquicos, políticos, sociales y económicos. Fueron grandes e innovadores guerreros, ingenieros y arquitectos. Comenzaron a adorar a deidades cuyo culto fue continuado en futuros periodos históricos, siendo la base de las deidades olímpicas que todos conocemos. Usaban el sistema de escritura lineal B, consistente en un conjunto de símbolos que representan sílabas para formar las palabras.

Google Maps: goo.gl/maps/EQJMVmwv5qPCA1VH7
Web oficial: odysseus.culture.gr/ ...bj_id=2573
Horario de verano: 8-20
Entrada: 12 € / 20 € la entrada conjunta (Micenas, Museo arqueológico de Micenas, Museo arqueológico de Nauplia, Fortaleza de Palamidi de Nauplia, etc.)
Tiempo aproximado de visita: 1:30 horas Micenas y 10 minutos el Tesoro del Átreo
Recomendaciones: imaginación y no dejarse llevar por las primeras impresiones.
Dificultad: baja a nivel físico y media por la falta de indicaciones claras para hacer un buen recorrido.
Comentarios:
Al principio nos decepcionó un poco, ya que el estado de conservación no era el que esperábamos.
Echamos en falta información extra en los puntos de interés y un itinerario o recorrido algo más claro.
Pero hay que ser conscientes del lugar histórico donde estamos y así valorarlo. Por eso aquello de intentar ver más allá de los escasos restos.


Hay puntos de gran interés como la Puerta de los Leones, la principal entrada a Micenas y el único, y más antiguo, vestigio de las magníficas esculturas monumentales. Sólo se conservan los cuerpos de los leones, ya que las cabezas han desaparecido. Es posible que éstas fueran de bronce y estuvieran ricamente ornamentadas.

O la tumba de Clitemnestra, esposa del héroe griego y rey de Micenas Agamenón. Se trata de un tholos o tumba de planta circular.

Pero el más impresionante tholos es el conocido como Tesoro de Atreo, la que consideran que fue tumba del rey Agamenón. El tholos, de tamaño colosal, fue construido sobre la colina Panagitsa en torno al 1250 a.C., y su estructura externa está muy bien conservada.

Está justo al lado del sitio arqueológico de Micenas, a sólo dos minutos en coche. La entrada es independiente pero se visita muy rápido.

Con esto dimos por finiquitado nuestro primer día en Grecia.
No habíamos dormido casi nada en 48 horas y queríamos relajarnos un poco.

Hicimos noche en el hotel de la Micenas actual (Mykines) La Petite Planete (goo.gl/maps/bEUHhWFHtL5LaPub6).

Es un hotel bastante antiguo pero con un encanto especial. Su personal es muy amable y cercano, y recibimos por su parte un trato casi familiar.
Tienen piscina abierta hasta tarde, que aprovechamos en cuanto llegamos.
Su punto fuerte, además de la atención, es la comida. Ofrecen una cena muy buena por 20 € (bebidas aparte) y desayuno, igual de bueno, por 6 €.
Ambos se sirven en una amplia terraza con unas maravillosas vistas del entorno.
Probamos una de las mejores comidas del viaje, así que pusieron el listón muy alto. Tzatziki, pisto de verduras con un sabor espectacular, ensalada de col y musaka insuperable. Todas las verduras de su propio huerto. Bebimos cerveza y un vino rosado de Nemea muy bueno. Probamos el mastika, un licor hecho con resina de lentisco que nos encantó junto al postre, un hojaldre casero relleno de crema pastelera.
La noche, en régimen SA, nos salió por 53,50 €

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Sueño reparador para afrontar el intenso día que teníamos por delante:
• Tirinto
• Epidauro
• Nauplia
• Mystras

Nos levantamos poco antes de las 8, pues el desayuno se servía a partir de las 8:15 y no queríamos prescindir de él.

Éste fue muy rico y abundante, con fruta fresca de su huerto (melocotón, uva y manzana), yogur con miel, tortilla, ensalada de tomate y lechuga con queso feta, sándwich de york y queso, tostadas y mermelada casera. Y sólo por 6 €.


Como hicimos buenas migas con el personal, charlamos un buen rato y nos hicieron varias recomendaciones que nos resultaron más que interesantes.

La primera de ellas fue un restaurante muy chulo de Mystras, del que ya hablaremos.

Y la segunda, y más inmediata, visitar la antigua ciudad amurallada de Tirinto.

A pesar de ser un importante yacimiento Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1999, junto a Micenas, no lo habíamos incluido en nuestra agenda del día.

Aceptando el consejo dimos un pequeño salto para hacer una breve pero interesante visita a una ciudad que vivió su más importante época coincidiendo con el desarrollo de la civilización micénica, entre el 1400 y el 1200 a.C.

Tirinto/Tiryns
Google Maps: goo.gl/maps/29Lg4TtbxfZNYJuD9
Web oficial: odysseus.culture.gr/ ...bj_id=2382
Horario de verano: 8:30-15:30.
Entrada: 4 € (2 € en invierno). Incluida en la entrada combinada de Micenas.
Tiempo aproximado de visita: 30 minutos.
Recomendaciones: agua, gorra y protección solar.
Dificultad: baja.
Comentarios:
Tranquilo paseo en sentido de las agujas del reloj, sin pérdida, disfrutando de los restos tan bien conservados de su magnífica muralla ciclópea. No hay mucha información que interpretar, de ahí la rápida visita. Estuvimos completamente solos durante el recorrido.
Media hora después estábamos en Epidauro.

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Epidauro
Google Maps: goo.gl/maps/TaPyVeCzqHQQzPbD8
Web oficial:
Horario de verano: 8-20
Entrada: 12 €
Tiempo aproximado de visita: 2 horas, museo incluido
Recomendaciones: -
Dificultad: baja.
Comentarios:
Buena señalética e información en general.


Epidauro fue una pequeña ciudad estado independiente que, sin ser tan conocida como Micenas, posee varias joyas arquitectónicas únicas en el país. Es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1988.


Destacan su colosal teatro (podréis comprobar la gran acústica que tiene) construido en el siglo IV a.C. y con una capacidad de hasta 12.000 espectadores. Está magníficamente conservado, pudiendo subir sus casi 120 escalones hasta llegar al punto más alto del graderío, que nos regalará una hermosa vista.

En él, y en el estadio cercano, se desarrollaban cada cuatro años las fiestas en honor de Asklepio, las Asclepeias, en la que se combinaban pruebas gimnásticas y musicales.

También el Templo de Asklepio y todos sus edificios colindantes (tholos, con andamios y en proceso de restauración, estoa de Abaton, estadio, baños o el templo de Artemisa).



Fue muy enriquecedor conocer de primera mano toda la información sobre este lugar de peregrinaje donde los enfermos se encomendaban al dios Asklepio para buscar la curación a sus males a través de la medicina y su relación con el sueño.


En el museo hay mucha información y objetos que han conseguido que se queden allí, aunque podréis encontrar mucho más en otros museos del país, como el Museo Arqueológico Nacional de Atenas.

Encontraréis objetos médicos, algunas copias de estatuas, capiteles y relieves de las edificaciones y alguna que otra curiosidad (como las recetas propuestas para sanar los males).

NOTA:
Cuando tengamos tiempo añadiremos el resto de información, pero sirva como referencia el recorrido de la visita:
• Teatro
• Katagogion
• Baños griegos
• Hestiatorion
• Santuario de los dioses egipcios
• Templo de Artemisa
• Tholos
• Abaton/Enkoimeterion
• Templo de Asklepio
• Termas
• Propileos
• Epidoteion
• Museo

Teatro

Katagogion
Construido a finales del siglo IV a.C., este edifico hacía funciones de hostal, hospedando a visitantes, peregrinos, pacientes y sus acompañantes.
El edificio cuadrado de 5822 m2 estaba dividido en cuatro partes iguales. Cada una de ellas tenía la misma estructura, consistente en un patio con peristilo dórico rodeado de habitaciones, tanto en la plata baja como en el posible piso superior.
Es curioso que no haya conexión entre las alas este y oeste del edificio. Esto puede ser debido a que buscaran la manera de aislar las estancias cuando el santuario estaba menos ocupado, o bien por razones médicas (como evitar contagios e infecciones).

Baños griegos
Construido hacia el año 300 a.C., este edificio, a tenor de su cercanía del Hestiatorion (salón de banquetes) y el citado Katagogion, daba servicio a los visitantes del santuario durante su apogeo.
Su planta era rectangular, con un gran patio interior. En las zonas norte y oeste había unas estancias alargadas donde se encontraban las duchas, con grandes salas hipóstilas en el centro del edificio y la zona sur.
Se cree que existía una segunda planta.
El agua llegaba a los baños a través de un conducto de piedra, que aún se conserva parcialmente.
En época romana se construyeron en el ala este dos piscinas y un sistema de almacenamiento de agua (o depósito), así como grande pilares cuadrados en el patio.

Hestiatorion

Santuario de los dioses egipcios

Templo de Artemisa

Tholos

Abaton/Enkoimeterion

Templo de Asklepio

Termas

Propileos

Epidoteion

Museo

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Nauplia
Google Maps: goo.gl/maps/UyubQnMuUTmjvHqP7
Web oficial: odysseus.culture.gr/ ...bj_id=1604
Horario de verano: 8-20
Entrada: 8 € (4 € en invierno)
Tiempo aproximado de visita: 1 hora
Recomendaciones: agua, gorra y protección solar por el abrasador sol propio de la hora en que realizamos la visita
Dificultad: baja en general, sólo a tener en cuenta algunos momentos de ascenso a pleno sol
Comentarios:


A las 13 horas llegamos a Nauplia y nos fuimos con el coche directamente a la Fortaleza de Palamidis, primera fortificación veneciana durante su segunda ocupación. Tiene 8 bastiones y una iglesia, de San Andrés, dentro de uno de éstos.

La fortificación está perfectamente conservada, siendo una grata experiencia pasear entre sus murallas y bastiones, aunque sea a pleno sol de agosto. Las vistas de la bahía son impresionantes.

Listado de bastiones:
• San Andrés
• Robert
• Temístocles
• Aquiles
• Milcíades
• Leónidas
• Epaminondas
• Fokion

Junto a la iglesia está la Prisión de Kolokotronis, figura destacada de la revolución griega, a la que se accede cruzando un agosto túnel.

Terminando el recorrido de la fortaleza vimos la que fue nuestra primera playa griega, Paralia Arvanitias (goo.gl/maps/LnjqkRuT2qxMBBsf9)q, que nos enamoró.

Dimos un rápido paseo por la ciudad y Acronauplia (goo.gl/maps/8D7CrDVxhzXCFEKi6), ciudad amurallada antigua, usada como cárcel durante 20 años en el pasado siglo, y nos fuimos directamente a la playa.

Fue un primer contacto con la costa y el esnórquel que nos encantó. Nos gustaría haber disfrutado más de Nauplia, pero sabíamos que era una parada rápida y no había tiempo para más.

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Nuestra siguiente parada era Mistrá/Mystra (goo.gl/maps/hnZ237iTL1dBdyiX8), una bonita ciudad fortificada construida sobre el Monte Taigeto, a sólo unos minutos de la archiconocida (que no encantadora) Esparta.

Según consejos leídos en el foro la visita nos llevaría bastante tiempo. Así que a las 17:15-30 ya estábamos por allí.

Dejamos el coche estacionado en la puerta norte, para acceder al sitio por la fortaleza (goo.gl/maps/kWUmXUm44jN75ZmH8)

Mistrá/Mystra
Google Maps: goo.gl/maps/hnZ237iTL1dBdyiX8
Web oficial: odysseus.culture.gr/ ...bj_id=2397
Horario de verano: 8-20 (hasta el 31/8)
Entrada: 12 €
Tiempo aproximado de visita: 2,5-3 horas
Recomendaciones: -
Dificultad: baja, sólo se acusa algo el tener que subir con cierta prisa.
Comentarios:
Hicimos el recorrido en sentido descendente, visitando en primer lugar la acrópolis o castillo en unos 30 minutos.


Después volvimos a la puerta de entrada norte para continuar con el recorrido. No hay perdida, ya que todo está perfectamente indicado.

Mystras tiene un ambiente mágico que embelesa y disfrutamos mucho de su especial encanto.

1. Entrada principal
2. Catedral de San Demetrio (Metropolis)
3. Iglesia de Evangelistria (Anunciación)
4. San Teodoro
5. Iglesia de Hodegetria (Aphendiko)
6. Puerta de Monemvasia
7. Iglesia de San Nicolás
8. Palacio de los Déspotas (plaza central)
9. Puerta de Nauplia
10. Entrada superior
11. Iglesia de Santa Sofía
12. Pequeño palacio
13. Castillo
14. Mavroporta
15. Monasterio de Pantanassa
16. Iglesia de Taxiarch (Taxiarques)
17. Casa de Juan Phrangopoulos
18. Monasterio de Santa María Peribleptos
19. Iglesia/capilla de San Jorge
20. Casa (Krevatas)
21. Entrada de Mármara
22. Ai Yannakis
23. Casa (Lascaris)
24. Iglesia de San Cristobal
25. Casa
26. Iglesia de Santa Kyriake

El recorrido fue, aproximadamente: Acrópolis y Castillo, Iglesia Santa Sofía (y sus impresionantes frescos), Iglesia de San Nicolás, Iglesia San Teodoro, Metrópoli (San Demetrio), Monasterio de Pantanassa, Monasterio de Santa María Peribleptos, Capilla de San Jorge, Iglesia de San Cristóbal, Iglesia de San Demetrio, Iglesia de San Teodoro, Monasterio de Brontochion, Iglesia de Nuestra Señora Hodiguitria y museo, por último.

En el Monasterio de Pantanassa, donde un grupo de niños y no tan niños jugaba con una numerosa colonia de gatos, nos paramos a comprar unos recuerdos de tan grata visita en la tienda. Allí nos atendió una monja, que nos ofreció unas golosinas típicas. La mujer no sabía nada de inglés, cosa lógica, pero pudimos entendernos bien en asuntos económicos, jejeje.
Como era de esperar, sólo pagos en metálico.

Seguro que encontraréis productos similares (tablas y pequeños trípticos, entre otros) en multitud de tiendas con precios similares, pero el saber de dónde viene le da un encanto adicional.

El extraordinario Palacio de los Déspotas se encontraba, desgraciadamente, cerrado por reformas. Al parecer lleva así desde el año pasado, como mínimo.

Invertimos unas 2,5 horas en la visita, teniendo en cuenta que teníamos que volver después al estacionamiento norte para recoger el coche.

Teníamos dos opciones, salir por la puerta sur y subir por la carretera, con el peligro que conlleva, o bien hacerlo cruzando rápidamente de nuevo todo el sitio arqueológico.

Optamos por lo segundo, con el único hándicap de que debíamos llegar antes de que cerraran (a las 20 horas). Para ello hay que contar con, al menos, 15-20 minutos, pues la subida es pronunciada y se hace pesada si vais a un ritmo rápido, como fue nuestro caso.


A las 20 horas, clavadas, ya estábamos saliendo por la puerta norte y recogiendo el coche en el aparcamiento para dirigirnos a nuestro alojamiento de esa noche.

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Encontramos una especie de camping que estaba bastante cerca de Mystras, y que tenía muy buena pinta y un precio ajustado: Castle View Bungalows (goo.gl/maps/Khy1Maj87njSwEXs7)

Pudiera parecer un camping, pero dispone de unos bungalows modernos, limpios y equipados a la altura de cualquier hotel de 3 ó 4 estrellas. Pagamos 65,00 € en régimen AD.

Aprovechamos para darnos un baño en la amplia y limpia piscina (que cerraba tarde), con el encanto de sus luces y la vista de la ya iluminada Mystras antes de prepararnos para ir a cenar.

Desde el alojamiento se puede ir andando al centro de la ciudad, pues estando junto a la carretera no es mucha la distancia (y hay acerado para mayor seguridad).

En el hotel de Micenas, esa misma mañana, nos aconsejaron el restaurante Chromata (goo.gl/maps/jSJpkSmVizAHLjFg9) como lugar especial y romántico, palabras literales.

Hay que ir en coche (10-15 minutos desde el alojamiento) subiendo por una sinuosa carretera, pues se encuentra escondido en el punto más alto de la zona. A más altitud incluso que el propio sitio arqueológico de Mystras.

Impresionantes vistas de Esparta, a pesar de ser de noche. Excelente servicio, ambiente de relax total, como en pocos sitios en este viaje, y comida muy buena.
Tienen entrantes a base de platos típicos y carnes, ensaladas variadas y como platos principales pastas, risottos y carnes de primera, principalmente.

Tomamos como entrante una exquisita panceta al horno con salsa de naranja y miel, acompañada de maíz. Y como primeros un sabroso chuletón con excelente punto de cocción (y nada de sal, sobran los comentarios) y pappardelle con setas, trufa y queso de la zona (Taygetus)

Es mejor ir de día para disfrutar más las vistas, pero aun así disfrutamos de una especial e inolvidable velada.

En el alojamiento hay una tienda con productos básicos y buenos precios, así que compramos una botella de vino de uva moscatel de la isla de Samos para tomarlo tranquilamente en la terraza antes de irnos a descansar.

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