Martes 7 de Diciembre de 2.010.
De nuevo a las 7:30 horas en la puerta del hotel, eso sí, después de un copioso desayuno y de llenar las mochilas de bollitos y bocadillos para media mañana, el tentenpie de media mañana es sagrado en Alicante y en Túnez. El destino de hoy era doble, primero El Djem y después Monastir, las dos visitas al sur de nuestra posición actual.
El primer destino era El Djem, dónde nos esperaba desde hace mas de 1.800 años el Circo romano del lugar, y he de decir que esta en mas que buen estado de conservación, tiene la estructura prácticamente intacta, salvo alguna parte derrumbada, pero ademas se puede subir a las gradas y visitar las bodegas, por así decirlo, del circo, la zona de los gladiadores, la zona de los animales y demás, es una visita muy interesante, la entrada 8 dinares (un poco mas de 4 euros) mas 1 dinar por hacer fotos, este dinar es mas o menos opcional, pero tampoco esta de mas pagarlo, se supone que es para mantener el monumento, conservación y restauración así que no hicimos intención de esconder cámaras ni nada por el estilo. La visita nos llevó alrededor de una hora, recorrido completo y un montón de fotos que hicimos, lamentablemente, es lo único que se conserva en la ciudad de origen romano, El Djem es una ciudad bastante pequeña y su único atractivo es el Circo, con lo cual, al acabar la visita salimos rumbo a Monastir.
En Monastir había un par de visitas obligadas que fueron las que hicimos, el mausoleo de Habib Bourguiba, primer presidente de Túnez tras la independencia de Francia, tanto el entorno como el mausoleo en si son impresionantes, se encuentra al final de un paseo de unos 200 metros, flanqueado por dos hileras de farolas y con dos pequeños monumentos al soldado desconocido al comienzo del paseo, personalmente me impresionó, ya que Zaghouar nos dejó justo al comienzo del paseo y ver ya de lejos el edificio impresiona, realmente bonito.
La segunda visita era la Medina, como en todas las ciudades visitas sitio de paso obligado, aunque esta vez sólo hicimos una vuelta perimetral, para sacar un par de buenas fotos, está justo al otro lado de la calle del mausoleo a 50 metros del mar, junto a un pequeño puerto, las vistas son realmente buenas y un buen sitio para acabar la jornada de visitas del martes, un día muy aprovechado e interesante.