Este año 2011 si que lo comenzamos de forma distinta, para empezar levantándonos a las 5 de la mañana y recorriendo el desierto, nada que ver con años anteriores. Salimos de noche todavía, nos amaneció en ruta hacia el pueblo troglodita de Matmata, bueno, el pueblo lo vimos de lejos, lo que realmente vimos es una casa, que si, será representativa, pero es la que la mayor parte del turismo visita, así que no debe ser muy normal, por tener, tiene hasta electricidad con placa solar, no creo que eso sea muy corriente. Todos nos quedamos con ganas de ver otras casas parecidas, pero el día de hoy era largo, muchos kilómetros y no había mas tiempo. La casa tiene varias habitaciones excavadas en la roca, que mas bien es una piedra caliza que no es muy dura, con lo que se puede hacer mas o menos facil.









Después de visitar este sitio tan singular, ya vamos rápido hacia el norte, abandonando el desierto y yendo paralelo a la costa. Esta zona de Túnez se ve mas rica, hay numerosos olivos, vides, naranjos. El clima es mas suave por la proximidad del Mediterráneo. Después de un par de horas llegamos al pueblo del extraño nombre de El Djem, un lugar que tiene interés por el magnífico coliseo romano. De los que he visto es el mejor conservado, se ve grandioso. Tiene un gran foso, donde estaban las fieras y los gladiadores. Ya solo por esto vale la pena visitar Túnez. Pongo unas cuantas fotos del montón que hice.






Almorzamos en la zona y ya salimos directos para Monastir, un antiguo pueblo que por tener unas excelentes playas se ha vuelto turístico. Alli se visita el mausoleo del primer presidente y fundador del Túnez moderno, Burguiba, que esta alli junto con sus parientes. Ya estaban cerrando cuando llegamos asi que no pudimos verlo bien, con prisas, pero bueno, algo vimos.

Aquí en Monastir es interesante la medina, mas que nada por la variedad, pero además tiene Monastir un gran castillo vigilando la bahía, y eso decidimos visitar nosotros, junto con nuestros amigos de Tarragona y Pedro, nuestro querido amigo de Madrid.
Las vistas desde lo alto de la torre principal son preciosas, se ve todo Monastir y además como era por la tarde salieron unas fotos con mucho color, de las que pongo unas muestras.






Luego visitamos la medina, pero ya estaba oscureciendo y no pudimos ver casi nada. Nos quedamos esa noche en un hotel ahí en Monastir y al día siguiente, muy temprano, como a las 3,45 ya salimos rumbo al aeropuerto, para salir hacia Barcelona a las 7,50 y asi finalizar el viaje.
