19/08/2022
Al despertarme y abrir un poco las cortinas vi al fin algo de cielo azul y lo más sorprendente, las montañas de alrededor, a no mucha más altura de la que estábamos, tenían una ligera capa de nieve.
Me puse en la cama con el portátil a ver fotos ya que eran las 7:30 y tras estar una hora en la semioscuridad pregunté a mi mujer si íbamos a desayunar, me comentó que no se encontraba muy bien, que por la noche había estado con escalofríos y con algo de fiebre, que prefería seguir durmiendo, así que fui yo solo a tomarme el café al restaurante.
A las 9:30 pasadas es cuando partimos. Desde al lado del complejo se veía más allá el MacLaren Glacier, con la nieve de la pasada noche ya derretida.
Al igual que me sorprendió para bien la Denali Hwy hasta MacLaren River Lodge, el trayecto de hoy hasta que salimos a Cantwell fue un suplicio en gran parte, con baches por todos lados, sobre todo en la parte intermedia. La verdad es que estaba deseando salir de ella porque además no vimos fauna, quitando al final del todo, a poco menos de 10 kms de salir que vimos cruzar claramente un puercoespín.
Acercándonos a Sutsina Bridge
Con la bendita carretera asfaltada cogida nos dirigimos al norte, directamente a Denali National Park. El día seguía con nubes, pero curiosamente adonde nos dirigíamos se veían claros. El trayecto no fue rápido porque tuvimos una buena parada por obras, pero pasado el mediodía llegamos al famoso parque.
Tuvimos muchísima suerte y encontramos aparcamiento enseguida y cerca. La primera parada obligatoria en el Visitor Center, para pagar cada uno 15 dólares por la estancia. Vale por una semana. Allí echamos un vistazo al centro, nos conectamos a internet y como eran casi las 1 entre pitos y flautas, comimos al solecico. Por supuesto había bastante gente en los alrededores.
La primera actividad que realizamos fue ir a Horseshoe Lake, para ello cogimos el Taiga Trail y luego el propiamente denominado Horseshoe Lake Trail, para acabar de nuevo en el visitor center cogiendo el camino de bicicletas. Todos los senderos alrededor del visitor center están muy bien señalizados. Taiga Trail es prácticamente plano y no tiene más historia que el caminar por un caminito entre pequeños abetos. Horseshoe Lake es mucho más interesante con una bajada pronunciada hasta los lagos. Allí había unas buenas castoreras y por la parte más alejada llegas a la orilla de Nenana River. En ningún momento te encuentras solo, parece más un sendero de un parque urbano. Casi 6,5 kms.
Tras ello cogimos el coche y nos dirigimos hasta la zona de Savage River.
Yendo para allá nos encontramos con un par de coches parados, causa: caribús en la ladera.
Llegamos a la zona y los Rangers nos pararon a unos cuántos coches ya que el aparcamiento está lleno, así que hay que esperar a que se despeje. Tras unos 10 minutos de espera entramos y aparcamos y hacemos la rutilla de Savage River Loop, que no es más que andar por las dos orillas del río, aprovechando que hay unos puentes para cruzarlo. Ni llega a tres kilómetros, pero no estaba mal.
En la última foto, hecha en la carretera se ve si os fijáis a una persona de pesca
De vuelta al centro de visitantes pillamos otro atasco en la carretera, señal de bicho. Un moose macho que lo pillé de milagro ya que el autobús del parque no se movía y a los de atrás que nos dieran, así que imaginando que había animal me bajé del coche para ver qué era. Es el primero que hemos visto, siempre habíamos visto hembras y crías.
De ahí nos fuimos a nuestro alojamiento en Cantwell, donde estaba el cielo totalmente cubierto. Por cierto, aquí no hay nada, no llega ni a la calificación de poblado. Nos duchamos, cenamos viendo serie y estuvimos acompañados del jaleo de la fiesta del bar hasta las 4 de la mañana, ya que había fiesta de despedida porque al acabar el verano cierran. Nos resignamos a no dormir.
Me puse en la cama con el portátil a ver fotos ya que eran las 7:30 y tras estar una hora en la semioscuridad pregunté a mi mujer si íbamos a desayunar, me comentó que no se encontraba muy bien, que por la noche había estado con escalofríos y con algo de fiebre, que prefería seguir durmiendo, así que fui yo solo a tomarme el café al restaurante.
A las 9:30 pasadas es cuando partimos. Desde al lado del complejo se veía más allá el MacLaren Glacier, con la nieve de la pasada noche ya derretida.
Al igual que me sorprendió para bien la Denali Hwy hasta MacLaren River Lodge, el trayecto de hoy hasta que salimos a Cantwell fue un suplicio en gran parte, con baches por todos lados, sobre todo en la parte intermedia. La verdad es que estaba deseando salir de ella porque además no vimos fauna, quitando al final del todo, a poco menos de 10 kms de salir que vimos cruzar claramente un puercoespín.
Acercándonos a Sutsina Bridge
Con la bendita carretera asfaltada cogida nos dirigimos al norte, directamente a Denali National Park. El día seguía con nubes, pero curiosamente adonde nos dirigíamos se veían claros. El trayecto no fue rápido porque tuvimos una buena parada por obras, pero pasado el mediodía llegamos al famoso parque.
Tuvimos muchísima suerte y encontramos aparcamiento enseguida y cerca. La primera parada obligatoria en el Visitor Center, para pagar cada uno 15 dólares por la estancia. Vale por una semana. Allí echamos un vistazo al centro, nos conectamos a internet y como eran casi las 1 entre pitos y flautas, comimos al solecico. Por supuesto había bastante gente en los alrededores.
La primera actividad que realizamos fue ir a Horseshoe Lake, para ello cogimos el Taiga Trail y luego el propiamente denominado Horseshoe Lake Trail, para acabar de nuevo en el visitor center cogiendo el camino de bicicletas. Todos los senderos alrededor del visitor center están muy bien señalizados. Taiga Trail es prácticamente plano y no tiene más historia que el caminar por un caminito entre pequeños abetos. Horseshoe Lake es mucho más interesante con una bajada pronunciada hasta los lagos. Allí había unas buenas castoreras y por la parte más alejada llegas a la orilla de Nenana River. En ningún momento te encuentras solo, parece más un sendero de un parque urbano. Casi 6,5 kms.
Tras ello cogimos el coche y nos dirigimos hasta la zona de Savage River.
Yendo para allá nos encontramos con un par de coches parados, causa: caribús en la ladera.
Llegamos a la zona y los Rangers nos pararon a unos cuántos coches ya que el aparcamiento está lleno, así que hay que esperar a que se despeje. Tras unos 10 minutos de espera entramos y aparcamos y hacemos la rutilla de Savage River Loop, que no es más que andar por las dos orillas del río, aprovechando que hay unos puentes para cruzarlo. Ni llega a tres kilómetros, pero no estaba mal.
En la última foto, hecha en la carretera se ve si os fijáis a una persona de pesca
De vuelta al centro de visitantes pillamos otro atasco en la carretera, señal de bicho. Un moose macho que lo pillé de milagro ya que el autobús del parque no se movía y a los de atrás que nos dieran, así que imaginando que había animal me bajé del coche para ver qué era. Es el primero que hemos visto, siempre habíamos visto hembras y crías.
De ahí nos fuimos a nuestro alojamiento en Cantwell, donde estaba el cielo totalmente cubierto. Por cierto, aquí no hay nada, no llega ni a la calificación de poblado. Nos duchamos, cenamos viendo serie y estuvimos acompañados del jaleo de la fiesta del bar hasta las 4 de la mañana, ya que había fiesta de despedida porque al acabar el verano cierran. Nos resignamos a no dormir.