Hoy también madrugamos porque tenemos unos 40 minutos de coche para llegar al siguiente parque. Este es Canyonlands National Park.
Canyonlands es enoooorme, y se divide en tres secciones (o distritos) no conectados entre sí.
Está The Maze, Needles y el que visitamos nosotros, Island in the Sky.
Hemos elegido este distrito porque es el más fácilmente accesible, o sea, por comodidad nuestra.

Island in the Sky consiste mayoritariamente en miradores, y algunos senderitos muy cortos. (O bien recorridos muy largos que bajan a los cañones y se necesitan días para completar).
Entramos y una vez más, no hay nadie en la taquilla para enseñarle el pase anual.

Vamos al primer mirador del día, el Grand View Point Overlook. Es un caminito llano que nos lleva al borde del acantilado, donde se observa la enorme extensión del cañón a nuestros pies.
Es un terreno que describimos como lunar, desde tanta distancia no se distingue vegetación ni se perciben señales de vida humana, sino sólo las formas erosionadas de la tierra.

Aquí disfrutamos del Silencio de la naturaleza. Así en mayúsculas. Nada. Y de repente algún pajarito. Y luego otra vez Nada.
(En los parques más populares, esto, al menos en verano, es imposible. Se escucha ruido de los coches, los shuttles o los visitantes.)

El White Rim Overlook se encuentra muy cercano, y se observa claramente la capa blanca superficial de la roca, las formaciones nos recuerdan a madera carbonizada.
El punto más popular del parque, ideal para las salidas de sol, es Mesa Arch. Un robusto arco que se sostiene miraculosamente al borde del abismo.
Desde el Green River Overlook se observa el río (no es verde, sino marrón

Y finalmente nos acercamos al Upheaval Dome. Este cráter (probablemente creado por un meteorito) tiene dos miradores, nos acercamos tanto al primer como al segundo mirador.
Hay más recorridos por hacer, pero nosotros ya nos damos por satisfechos, y nos quedan más de 2 horas de carretera por delante, hasta la siguiente parada donde haremos noche.
Hoy nos alojaremos (tal como lo describen en la web del hotel) “en medio de la nada”.

El pueblo más cercano es Hanksville, que tiene un par de restaurantes, una gasolinera y una tienda donde compramos la cena de hoy.
Está noche el cielo está despejado, pero será imposible ver las estrellas, porque el parking está intensamente iluminado y tampoco es plan de adentrarse en la oscuridad del campo.
