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DÍA 31/07/2023
Hoy he dormido como un bebé. Casi todo nuestro círculo de parcelas ha sido ocupado por un gran grupo de viaje guiado.
Para el día de hoy tenemos otra vez reserva para el autobús de los lagos Louise y Moraine. Esta vez en el tramo de 8 a 9 de la mañana. El plan de hoy es realizar la archiconocida excursión de Plain of the Six Glaciers, pero metiéndole algo de pimienta con la subida a Big Beehive y Devil’s Thumb.
Durante el desayuno ya decidimos no realizarla. El pie de mi sobrino sigue regular, así que mejor algo light para que se recupere algo para mañana, que tenemos excursión de 30 kms.
Por supuesto vamos a aprovechar la reserva, que está pagada, por lo que nos dirigimos de nuevo al Park and Ride a dejar el coche y montarnos en el autobús. Se nota la hora más tardía, el parking tiene muchísimos más coches.
Llegamos a Lake Louise y aunque hay gente, no es la romería de ayer por la tarde. Aunque las vistas son mejores que ayer, al tener el cielo despejado, sigue sin incidir el sol en las aguas, por lo que no hay color turquesa. De todas formas, me sigue pareciendo un lago sobrevalorado.
Tras pasar un rato por ahí, cogemos el autobús al lago Moraine y una vez allí vamos de nuevo al mirador y ahora sí, ahora sí da el sol en las aguas. Moraine siempre me ha parecido mucho más bonito.
Volvemos al Park and Ride y cogemos el coche para realizar parte de la Icefield Hwy. La primera parada la realizamos en el mirador de Hector Lake con Mt. Balfour atrás y Waputik Glacier.
Luego paramos en el mirador de Crowfoot Glacier.
Y ya directos al aparcamiento de Peyto Lake. Aquí sí que hay bastante gente. Eso sí, casi todo el mundo va a la plataforma que creo que es bastante más grande que en 2019. O eso me ha parecido. Nosotros seguimos hasta la zona que fuimos ese año en el que nos encontramos solos. Esta vez no lo estamos, pero sí que hay mucha menos gente y se disfrutan las vistas al lago Peyto y a su glaciar.
Y después de Peyto tenemos un tramo largo hasta Athabasca Glacier, que además se acentúa por una pequeña parada por obras en la carretera.
Ya en el aparcamiento de Athabasca vamos hasta donde se nos permite ir andando. La lengua del glaciar me sigue pareciendo feílla y muy machacada con tanto camión-turista pululando por el hielo. Eso sí, muchos carteles del retroceso y el impacto del hombre…
Son las 14:30 y decidimos volver. La parada por obras a la ida fue de 5 minutos, ahora nos tiramos unos 40. Un tostón. Cuando son las 4 de la tarde paramos en un apartadero para comer cualquier cosa.
Decidimos ir hasta Minnewanka Lake. Para ello vamos por la Bow Valley Parkway para ver si tenemos suerte y vemos algún animal. La hacemos despacio, pero no tenemos suerte.
Llegamos al lago Minnewanka, dejamos el coche en uno de sus grandes aparcamientos y nos ponemos andar bordeando el lago. Solo está permitido hasta el cañón Stewart, a partir de ahí se debe ir en grupos de 4 o más personas.
El sendero está bastante bien con algunas vistas al lago y las montañas de enfrente y llegamos al “cañón” sin apenas esfuerzo. El cañón se supera con un puente.
En ese momento estaba haciéndole una foto a mi sobrino, que se encontraba en el puente, cuando me dijo que mirara atrás. Un grupo de carneros de las Rocosas, hembras y crías, venía hacia nosotros. Retrocedimos por el puente, diciendo que no lo cruzarían. Mentira, lo cruzaron y nos estuvieron siguiendo todo el camino de vuelta prácticamente. Una situación simpática, sin dudas.
Tras volver al coche nos dirigimos al pueblo de Banff. Allí nos fuimos a un super a comprar viandas para la cena de mañana por la noche y estuvimos en unas cuántas tiendas de recuerdos para comprar alguna cosilla para la familia.
Después decidimos cenar. Acabamos en The Eddie Burger. Nos gustó mucho el lugar y la hamburguesa que lleva su nombre y la de bisonte estaban buenísimas. No tanto el poutine, que no valía ni un duro. Eso sí, podías rellenar los refrescos todas las veces que quisieras.
Tras la buena cena, nos fuimos para el campamento. A la salida de Banff vimos una elk hembra al lado de la carretera y por la Bow Valley Parkway un zorro, pero la luz era escasa en ambos sitios para hacer una foto decente. Llegamos de noche al campamento.
Para el día de hoy tenemos otra vez reserva para el autobús de los lagos Louise y Moraine. Esta vez en el tramo de 8 a 9 de la mañana. El plan de hoy es realizar la archiconocida excursión de Plain of the Six Glaciers, pero metiéndole algo de pimienta con la subida a Big Beehive y Devil’s Thumb.
Durante el desayuno ya decidimos no realizarla. El pie de mi sobrino sigue regular, así que mejor algo light para que se recupere algo para mañana, que tenemos excursión de 30 kms.
Por supuesto vamos a aprovechar la reserva, que está pagada, por lo que nos dirigimos de nuevo al Park and Ride a dejar el coche y montarnos en el autobús. Se nota la hora más tardía, el parking tiene muchísimos más coches.
Llegamos a Lake Louise y aunque hay gente, no es la romería de ayer por la tarde. Aunque las vistas son mejores que ayer, al tener el cielo despejado, sigue sin incidir el sol en las aguas, por lo que no hay color turquesa. De todas formas, me sigue pareciendo un lago sobrevalorado.
Tras pasar un rato por ahí, cogemos el autobús al lago Moraine y una vez allí vamos de nuevo al mirador y ahora sí, ahora sí da el sol en las aguas. Moraine siempre me ha parecido mucho más bonito.
Volvemos al Park and Ride y cogemos el coche para realizar parte de la Icefield Hwy. La primera parada la realizamos en el mirador de Hector Lake con Mt. Balfour atrás y Waputik Glacier.
Luego paramos en el mirador de Crowfoot Glacier.
Y ya directos al aparcamiento de Peyto Lake. Aquí sí que hay bastante gente. Eso sí, casi todo el mundo va a la plataforma que creo que es bastante más grande que en 2019. O eso me ha parecido. Nosotros seguimos hasta la zona que fuimos ese año en el que nos encontramos solos. Esta vez no lo estamos, pero sí que hay mucha menos gente y se disfrutan las vistas al lago Peyto y a su glaciar.
Y después de Peyto tenemos un tramo largo hasta Athabasca Glacier, que además se acentúa por una pequeña parada por obras en la carretera.
Ya en el aparcamiento de Athabasca vamos hasta donde se nos permite ir andando. La lengua del glaciar me sigue pareciendo feílla y muy machacada con tanto camión-turista pululando por el hielo. Eso sí, muchos carteles del retroceso y el impacto del hombre…
Son las 14:30 y decidimos volver. La parada por obras a la ida fue de 5 minutos, ahora nos tiramos unos 40. Un tostón. Cuando son las 4 de la tarde paramos en un apartadero para comer cualquier cosa.
Decidimos ir hasta Minnewanka Lake. Para ello vamos por la Bow Valley Parkway para ver si tenemos suerte y vemos algún animal. La hacemos despacio, pero no tenemos suerte.
Llegamos al lago Minnewanka, dejamos el coche en uno de sus grandes aparcamientos y nos ponemos andar bordeando el lago. Solo está permitido hasta el cañón Stewart, a partir de ahí se debe ir en grupos de 4 o más personas.
El sendero está bastante bien con algunas vistas al lago y las montañas de enfrente y llegamos al “cañón” sin apenas esfuerzo. El cañón se supera con un puente.
En ese momento estaba haciéndole una foto a mi sobrino, que se encontraba en el puente, cuando me dijo que mirara atrás. Un grupo de carneros de las Rocosas, hembras y crías, venía hacia nosotros. Retrocedimos por el puente, diciendo que no lo cruzarían. Mentira, lo cruzaron y nos estuvieron siguiendo todo el camino de vuelta prácticamente. Una situación simpática, sin dudas.
Tras volver al coche nos dirigimos al pueblo de Banff. Allí nos fuimos a un super a comprar viandas para la cena de mañana por la noche y estuvimos en unas cuántas tiendas de recuerdos para comprar alguna cosilla para la familia.
Después decidimos cenar. Acabamos en The Eddie Burger. Nos gustó mucho el lugar y la hamburguesa que lleva su nombre y la de bisonte estaban buenísimas. No tanto el poutine, que no valía ni un duro. Eso sí, podías rellenar los refrescos todas las veces que quisieras.
Tras la buena cena, nos fuimos para el campamento. A la salida de Banff vimos una elk hembra al lado de la carretera y por la Bow Valley Parkway un zorro, pero la luz era escasa en ambos sitios para hacer una foto decente. Llegamos de noche al campamento.
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