Normalmente, al terminar un viaje, cuelgo el diario que he ido realizando día a día y el vídeo con lo mejor que he podido sacar de la cámara. Lo dejo por aquí para que os hagáis una idea de lo que relato en el diario.
Colombia es uno de los países que he visitado dentro de un gran viaje que finalmente duró seis meses por América Latina en solitario, recorriendo Ecuador, Centroamérica, Brasil y Colombia. El viaje lo inicié en Ecuador, continué por Centroamérica, salté a Brasil y finalmente llegué a Colombia, donde también pude visitar el pequeño país de Curazao. En esta etapa del viaje, las últimas tres semanas las hice acompañado por mi pareja que se unió para finalizar la aventura conmigo. Este diario es continuación del de Brasil:
DIARIO DE BRASIL
Colombia es un país que cada vez se está convirtiendo en un destino turístico más popular. Con el doble de extensión que España, tiene una cantidad impresionante de atractivos turísticos, algunos de ellos imposibles de visitar antes del cese de la guerra con las FARC en 2016. A la hora de decidir qué visitar, teniendo en cuenta que estaría un mes en el país, hay que seleccionar porque no se puede ver todo. Finalmente, me decanté por pasar unos 10 días en el eje cafetero, dedicando varios días exclusivamente a la observación de aves, la selva del Amazonas en Leticia, Medellín y Cartagena de Indias. Para la parte del Caribe, me decidí por saltar a Curazao. Descarté el Caribe colombiano ya que solo leía información sobre masificación, suciedad y acoso a los turistas. Leyendo en Losviajeros, encontré este diario de la compañera @tere28, que me solucionó el problema totalmente: Diario Colombia y Curazao
Nunca había contemplado Curazao y, al ver que los vuelos directos desde Bogotá están bien de precio y cuadran perfectamente, ni me lo pensé. 5 día en Curazao. La mejor decisión que pude tomar ya que Curazao es un Caribe limpio, ordenado, sin timos, sin masificaciones, con impacto cultural y con unas playas y paisajes de escándalo. Suena y es casi perfecto, casi por lo caro que es.
De las cosas que descarté en este viaje y con las que me quedé con ganas están la zona del Meta y la del Orinoco, así como un trekking de varios días por los nevados o por la Sierra de Santa Marta. Son zonas más inaccesibles y bastante más caras de visitar, pero deben ser algo bien bonito. Se quedaría un viaje muy chulo solo con esas tres cosas. Viaje pendiente para el futuro.
Pajarear por Colombia
Colombia es un paraíso para el avistamiento de aves. Es el país con más número de especies de aves registradas, con 1900 especies. Para ponerlo en contexto, España es el país de Europa con mayor diversidad de aves y cuenta con unas 630 especies, Colombia cuenta con el triple de aves que España. En este viaje a Colombia vendría mi pareja para recorrer el país, pero aproveché una semana antes de que llegara para pajarear a saco, ya que a ella tampoco le apasiona dedicar los días exclusivamente a ello. Hay muchos puntos para pajarear, pero uno de los más top es la zona de Caldas y Risaralda, parte de lo que conforma el eje cafetero. Solo en esta región se han registrado unas 850 especies, una barbaridad. Muchas más especies que en toda España en una porción de tamaño inferior al 3% de España.
En esta región se está empezando a desarrollar una infraestructura turística dedicada a la observación de aves muy buena. Hay muchos sitios para ello, la gran mayoría dedicados a la fotografía. Entre los más famosos se encuentran la reserva Río Blanco, Hacienda El Bosque, El Color de mi Reves, Demostrativa Don Miguel, Termales del Ruiz, etc. Hay muchos donde elegir. Yo, dejándome asesorar por un amigo mío muy pajarero, me decidí por la Demostrativa Don Miguel, Reserva Río Blanco y Termales del Ruiz. Además, pude contactar con la asociación de ornitología de Caldas y hacer un día con ellos una excursión de observación de aves por los nevados, muy productiva y una gran experiencia.
Respecto al desarrollo del turismo de observación de aves, está aún algo verde. Esto es bueno ya que no es excesivamente caro, pero por otro lado es algo precario aún. Yo lo veo perfecto en este momento, el futuro pinta que se irá haciendo cada vez más exclusivo porque ya se empiezan a ver haciendas que se están subiendo a la parra con los precios.
Si te gustan el pajareo puro y duro, no dudes en dedicar unos días específicamente al turismo de aves ya que es uno de los sitios más top del mundo.
Moverse por el país
Moverse por Colombia tiene su forma tortuosa y su forma cómoda. La tortuosa es con buses. Hay muchas líneas, bien de precios, pero con trayectos eternos. Se atraviesan constantemente montañas, lo que hace que los recorridos, aunque sobre el mapa sean de pocos kilómetros, en la realidad sean muy largos. Es una buena opción para conocer pueblos que de otra manera ni te plantearías si uno va bien de tiempo.
La opción más cómoda es el avión. Todas las ciudades están muy bien conectadas con precios relativamente económicos, teniendo en cuenta el tiempo ahorrado. Otra cosa muy buena que tienen los vuelos es que hay tanta frecuencia que puedes cogerlos a primera hora y volver a última hora, aprovechando totalmente el día de desplazamiento. Puedes visitar el Parque de los Nevados por la mañana tan ricamente, comer en las termas, volver a Bogotá por la tarde y al día siguiente estar en el Amazonas a las 10 de la mañana y comer en Puerto Nariño. Lo malo, o lo bueno, es que da la sensación de que se queda un viaje formado por varios mini viajes ya que son cambios de registros bastante grandes de un punto a otro. Con el bus esto es más paulatino.
Por mi parte, hice los siguientes vuelos:
- Medellín – Pereira (23€)
- Pereira – Bogotá (51€)
- Bogotá – Leticia (156€ ida y vuelta)
- Leticia – Bogotá
- Bogotá – Curazao (125€ ida y vuelta)
- Curazao – Bogotá
- Bogotá – Cartagena de Indias (70€)
- Santa Marta – Bogotá (65€)
Como veis, se usa Bogotá como centro neurálgico, por lo que es importante contar con un alojamiento de confianza para poder dejar mochilas con cosas que no hagan falta y que te recoja y te deje en el aeropuerto. Yo me quedé siempre en “Casa Hotel Luna de Paso”. Muy cerca del aeropuerto, económico y su dueño es un crack que no tiene problema en recogerte o llevarte al aeropuerto a la hora que sea. Muy bien de precio.
Dinero
El país me parece bastante barato. En Cartagena de Indias, que tiene más tradición turística, es más frecuente que te intenten timar o que las cosas sean más caras, pero aún así sigue siendo barato.
Yo sacaba dinero con la Revolut, sin comisión alguna en el banco “Caja Social”. En el mismo aeropuerto de Bogotá hay un cajero que viene de lujo.
No recomiendo usar Bnext. Me ha dado problemas en casi todos los viajes a los que he ido y luego el servicio de atención al cliente es nefasto. Evitad Bnext, porque ante un problema estás vendido.
Seguridad
Negar la inseguridad en Colombia sería negar la realidad. Existe inseguridad en Colombia, sobre todo en las ciudades. Hablando con gente local, también comentan que existe aún inseguridad en forma de extorsión, robos con motos y, a veces, asaltos en autobuses. La firma de la Paz en 2016 ha creado una falsa sensación de seguridad en los europeos que no es compartida por los locales en Colombia. Es cierto que no hay zonas del país controladas por la guerrilla tan extensas como en su día, pero aún siguen existiendo zonas bastante delicadas por lo que hay que ser cauto. Basta hablar con cualquier local para que te cuente algún suceso reciente relacionado con la inseguridad.
Yo me moví sin problemas, manteniendo siempre un perfil muy bajo. En el diario de Ecuador explico más detalladamente las medidas de seguridad que tomé en general para todo el viaje de seis meses: AQUÍ.
Visitar Curazao
Curazao es un pequeño país que pertenece al Reino de los Países Bajos. Es un país independiente desde 2010, pero para temas de seguridad, defensa y asuntos exteriores depende de los Países Bajos. Fue antigua colonia holandesa y la cultura holandesa está muy presente en el país. La herencia cultural es una mezcla de influencias africanas, europeas y amerindias. El idioma principal es el papiamento, una lengua criolla que combina elementos de español, portugués, holandés, inglés y lenguas africanas. También se hablan holandés, inglés y español. La población es principalmente negra, de descendencia holandesa, hispanos y chinos, lo que hace una macedonia cultural brutal. Uno se puede manejar en español en casi todos los sitios. Con quien más difícil es hablar en español es con los de origen holandés. Con los hispanos, sin problema, y con la población negra, aunque cuesta, entre español e inglés te entiendes, ya que el papiamento comparte muchas palabras en español.
Para moverse, por narices hay que alquilar coche, no queda otra. Yo contraté coche con AutoHeuren y bastante bien.
Es un país caro, al nivel de Belice o Costa Rica. Hay varios supermercados por lo que, si alquilas apartamento con cocina, puedes ahorrar mucho. Para algunas playas hay que pagar entrada, no muy cara y suelen incluir uso de tumbonas. Las playas me parecieron preciosas, totalmente limpias, sin agobios de gente y sin absolutamente nadie que te intente vender algo o timar. Buen snorkel. Mención especial para Klein Curazao como ya describiré en el diario. Además de las playas, Curazao tiene un par de trekkings muy chulos por un paisaje desértico que llega a recordar a Fuerteventura.
La seguridad en Curazao es bastante buena. Quizá algo más insegura la capital, pero no vi nada especial. La capital es Patrimonio de la Humanidad y visitarla es como transportarse a otro mundo totalmente diferente. Es una paranoia porque parece que estés en Holanda, pero a la vez estás en el Caribe. Muy chulo.
Voy poniendo las etapas y las iré subiendo poco a poco, ya que lleva trabajo. Tened en cuenta que el diario lo he ido escribiendo día a día durante el viaje.