Etapa 5. Parte B. Suwon - Seoul- GangMan District ✏️ Diarios de Viajes de Corea Sur

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Etapa 5. Parte B. Suwon - Seoul - GangMan District





Después de esa opípara comida y puesto que está relativamente cerca ( unos 30 minutos en bus ) nos acercamos al centro comercial Starfield donde está la famosa Suwon Library, una biblioteca-bar que tiktok e instagrams se ha encargado de masificar. Es curiosa y digna de mil fotos, sobre todo la inmensa estantería de 22 metros de altura. Está totalmente integrada en el centro comercial, puedes leer, descansar, escuchar música en los tocadiscos del bar y tomar muchas fotos. Si vas a tomar fotos es perfecto. Si quieres estudiar allí y buscar algo de silencio, mejor quédate en casa. Eso sí, aprovechamos para buscar tarjetas de memoria para mi cámara y oh, sorpresa, en el país de la tecnología, no encontramos ni una en un centro comercial con mas de 400 tiendas. Menos mal que encontraremos en las tiendas de fotografía cerca del mercado de



Desde Suwon, 30 paradas de metro después, regresamos a Seoul. Más de una hora en metro para llegar al Gangman District y sí, famosa por aquella canción de PSY y la coreografía con la que nos taladraron en 2012. El distrito de GangMan es por una parte, la Milla de Oro en la calle Apgujeong-ro ( en cada tienda de lujo hay por lo menos un Ferrari aparcado ) y por otra, una zona de moda para los jóvenes, entre los que están triunfando las correas de móvil y bolsos customizadas con bordados y sobre todo, los fotomatonesr. En pocos metros, hemos visto una docena. Hacerse fotos con una polaroid está causando furor.



Ah, y si no os acordais como es la canción del GangMan Style no os preocupeis. El Coex Center es un enorme centro de negocios, ahora en obras y centros comerciales , donde hay unas monumentales manos de bronce imitando el gesto de la canción y que puedes escuchar en bucle gracias a YouTube.



Y como la noche es joven cerca del COEX está el Santuario de Bongeunsa, un templo budista del siglo VIII dC a pesar que fue destruido durante la guerra con los japoneses.




Encontrarte rodeado de esas moles de rascacielos, tráfico y ruido y la paz del templo, es especial. Aprovechando las últimas luces del día nos tomamos un buen tiempo para la visita de los 8 pabellones. Acaban de hacer una celebración y huele todo a incienso. Mágico.





Un día largo pero intenso, agotador y sobre todo muy variado. Un chapuzón en la piscina y una cena ligera comprada en el CU.


Y mañana más.

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