DESCUBRIENDO LA BAHÍA DE AVACHY . 1 parte.
Hoy tenemos que madrugar. A las 6’15 suena el despertador. Cerramos maletas y nos vamos a desayunar. El buffet es bastante completo: salchichas, tortillas, embutidos, quesos y un café bastante decente. La mayoría de rusos toman unas gachas de color blanco, que nos parece recordar que lo llaman “kassa” y que nos cuentan que la comen todos los niños antes de ir al colegio. A las 7’15 nos recogen en el hotel para llevarnos al puerto. Aunque caen cuatro gotas, nada que ver con la tormenta de ayer así que la visibilidad es, por ahora, mucho mayor. A ver si el tiempo aguanta..

Se incorporan a nuestro grupo tres personas más. Una pareja de San Petesburgo y una chica que viaja sola, de nombre Jana y a priori, muy rara.
Llegamos al embarcadero en 20 minutos. Subimos a la barca. En la cubierta hay una caja entera de cangrejos, no son King Crab ( aunque a nosotros nos da la impresión que son enormes ). Sin duda, será la estrella de nuestra comida ya que los cangrejos de la bahía son muy famosos en todo el país.


El capitán nos hace un tour por el barco, nos muestra las zonas de descanso y sobre todo, como funciona la descarga de agua en el baño. Y nos explica cosas de la navegación y la ruta ( en ruso y alguna palabra en inglés ). En la proa y en la popa hay una parte descubierta para unas 15 personas, y en el interior, asientos suficientes para todos. Salimos puntuales a las 8. Los momentos iniciales los pasamos haciendo fotos de la bahía, charlando animadamente y esta vez hablando más porque la pareja de San Petesburgo habla inglés y un poco de italiano así que todo fluye mejor porque nos ayudan a traducir. Nos reimos mucho con Sergei que hace muchas bromas y aunque no entendemos, se nos contagia la risa.

La bahia de Avacha se conoce como Avacha Bay es una de las más grandes del mundo. Aquí se encuentra la base permanente de los submarinos de la marina rusa y fue precisamente por eso que Kamchatka estuvo cerrada al turismo (ni los rusos podían acceder) hasta finales de los 90. Nos contaron que junto con la pesca, la otra actividad principal en la actualidad, era todo lo relacionado con la marina y que era habitual ver los submarinos militares durante las excursiones e incluso, dependiendo del tipo de maniobra que tengan que hacer, cierran la bahía durante unas horas y ni las embarcaciones de pesca o turísticas pueden salir. Menos mal…

