Al despertar no pensamos en lo que íbamos a disfrutar ese día en Morraine Lake. Tras madrugar un poco más de lo normal y desayunar nuestras american pancakes, nos pusimos en marcha, ya que teníamos unos 68 km aproximadamente hasta el lago.
Encontramos aparcamiento rápido, la zona empezaba a estar bastante llena de coches. Estuvimos haciendo algunas fotos al lago y a los 10 picos que lo rodean.
Encontramos aparcamiento rápido, la zona empezaba a estar bastante llena de coches. Estuvimos haciendo algunas fotos al lago y a los 10 picos que lo rodean.
Nada más llegar al lago nos habíamos mentalizado que nuestra visita solo iba a consistir en dar la vuelta al lago y poco más, cosa que nos decepcionó ya que teníamos muchas expectativas en este lago. La razón era porque habíamos leído en la guía de los parques que para hacer las excursiones por esta área estabas obligado a ir en grupo de 4 personas como mínimo. Veíamos con tristeza como los grupos de gente iban saliendo para hacer los trails que sin duda alguna eran los que más alto tenían el porcentaje de ver un oso.
Decidimos dar la vuelta al lago con un poco de resignación al ver que esta era nuestra única opción. A pocos metros del inicio del trail del lago podías coger un desvío que te llevaba al camino del Larch Valley . Allí nos detuvimos para cerciorarnos de que lo que habíamos leído era cierto y fue entonces cuando un guarda forestal muy amable se nos acercó y nos empezó a explicar las normas para poder hacer los trails.
Decidimos dar la vuelta al lago con un poco de resignación al ver que esta era nuestra única opción. A pocos metros del inicio del trail del lago podías coger un desvío que te llevaba al camino del Larch Valley . Allí nos detuvimos para cerciorarnos de que lo que habíamos leído era cierto y fue entonces cuando un guarda forestal muy amable se nos acercó y nos empezó a explicar las normas para poder hacer los trails.
La más importante era que no podíamos ir en pareja sino en un grupo mínimo de cuatro personas. Al poco rato de estar allí de pie con el guarda se acercaron 2 parejas de turistas y les comentó lo mismo que a nosotros, y que si queríamos podíamos formar un grupo los 6 con la condición que el único punto donde nos podíamos separar era la intersección de los trails Eiffel Lake y Larch Valley en la que debíamos esperar para unirnos a otro grupo.
Comenzamos la ascensión. Íbamos una pareja de holandeses, otra pareja de Calgary y nosotros. En el primer tramo hasta la intersección parecía las ramblas de Barcelona de lo transitado que estaba. Cuando llegamos a la intersección decidimos cual de los trails íbamos a hacer. La pareja de Calgary comentó que en Eiffel Lake lo quería ver porque los padres de uno de ellos eran franceses y habían llevado una figurita de la torre Eiffel para hacer la foto en el lago. A los holandeses les daba igual y a nosotros también porque nuestra intención era hacer los dos trails.
El camino era estrecho y pedregoso. Llevamos todos cascabeles y por lo tanto era poco probable que nos encontrásemos con osos. Al llegar al lago cada uno se desperdigó para hacer sus respectivas fotos.
Comenzamos la ascensión. Íbamos una pareja de holandeses, otra pareja de Calgary y nosotros. En el primer tramo hasta la intersección parecía las ramblas de Barcelona de lo transitado que estaba. Cuando llegamos a la intersección decidimos cual de los trails íbamos a hacer. La pareja de Calgary comentó que en Eiffel Lake lo quería ver porque los padres de uno de ellos eran franceses y habían llevado una figurita de la torre Eiffel para hacer la foto en el lago. A los holandeses les daba igual y a nosotros también porque nuestra intención era hacer los dos trails.
El camino era estrecho y pedregoso. Llevamos todos cascabeles y por lo tanto era poco probable que nos encontrásemos con osos. Al llegar al lago cada uno se desperdigó para hacer sus respectivas fotos.
Tras reposar unos minutos admirando el paisaje y conversando con el resto del grupo volvimos al cruce en el cual decidimos subir hacia el Sentinel Pass. Las otras 2 parejas volvieron al Morraine Lake.
Justo en el momento que nos estábamos despidiendo pasaron un grupo de canadienses con niños que querían hacer el mismo trail que nosotros y sin preguntar nos unimos a ellos. A pocos metros del cruce nos dijeron que podíamos adelantarlos porque iban más lentos a causa de los niños y fue entonces cuando les comentamos que íbamos con ellos porque por esos parajes solo se podía caminar en grupo, vimos en la cara de una de sus miembros que no le pareció muy buena idea y después de caminar unos metros más, nos dijeron que paraban a darles de comer a los niños.
Volvimos al cruce a esperar a otro grupo, pocos minutos después apareció una pareja de alemanes y otra de Alicante. Nos acoplamos a ellos. Nos hicieron esconder el cascabel porque querían ver osos y por culpa del nuestro sería imposible cruzarnos con uno. Sabían que uno estaba rondando ese camino.
De repente se pararon en seco, sacaron los prismáticos, desenfundaron las cámaras de fotos, de video y allí estaba un Grizzly bajando por la llanura olisqueando todo por su paso. Estuvimos en silencio observando su graciosos y lentos andares hasta que se perdió entre los arbustos.
Justo en el momento que nos estábamos despidiendo pasaron un grupo de canadienses con niños que querían hacer el mismo trail que nosotros y sin preguntar nos unimos a ellos. A pocos metros del cruce nos dijeron que podíamos adelantarlos porque iban más lentos a causa de los niños y fue entonces cuando les comentamos que íbamos con ellos porque por esos parajes solo se podía caminar en grupo, vimos en la cara de una de sus miembros que no le pareció muy buena idea y después de caminar unos metros más, nos dijeron que paraban a darles de comer a los niños.
Volvimos al cruce a esperar a otro grupo, pocos minutos después apareció una pareja de alemanes y otra de Alicante. Nos acoplamos a ellos. Nos hicieron esconder el cascabel porque querían ver osos y por culpa del nuestro sería imposible cruzarnos con uno. Sabían que uno estaba rondando ese camino.
De repente se pararon en seco, sacaron los prismáticos, desenfundaron las cámaras de fotos, de video y allí estaba un Grizzly bajando por la llanura olisqueando todo por su paso. Estuvimos en silencio observando su graciosos y lentos andares hasta que se perdió entre los arbustos.
Contentos de que por fin habíamos visto un Grizzly proseguimos el trail. Ascendimos por el sendero del Larch Valley hasta llegar a otro lago el Minnestimma Lake. No hicimos algunas fotos con el grupo para el recuerdo y los alicantinos decidieron volver. Nos quedamos con los alemanes los cuales estuvieron de acuerdo en subir hasta el Sentinel Pass. Fue uno de los trails que más nos gustó por la dureza de su ascensión con un desnivel de 725 m desde el Morraine Lake y por las vistas que ofrece del Larch Valley y del Paradise Valley.
En la cumbre recuperamos el aliento y estuvimos un buen rato conversando con los alemanes y admirando el paisaje. Mientras veíamos a otros montañeros que iban cargados hasta los topes que seguían su ascensión hasta el Mount Temple para hacer noche. Nos quedamos alucinados de la carga que llevaban, era digno de admiración.
En la cumbre recuperamos el aliento y estuvimos un buen rato conversando con los alemanes y admirando el paisaje. Mientras veíamos a otros montañeros que iban cargados hasta los topes que seguían su ascensión hasta el Mount Temple para hacer noche. Nos quedamos alucinados de la carga que llevaban, era digno de admiración.
Una vez recuperados del esfuerzo y con esa bella imagen grabada en nuestras mentes comenzamos el descenso. Bajando íbamos intercambiando opiniones sobre las experiencias vividas en el viaje. Una vez llegado al punto de partida nos despedimos de nuestros compañeros de ruta y permanecimos en el lago haciéndonos las últimas fotos y picoteando algo con nuestras amigas las ardillas después de nuestra travesía de unos 18 Kms.