Navidad y Fin de Año en Cuba 2021 ✏️ Blogs de Cuba

Nuestro primer día completo en La Habana, empezó muy temprano.

Pese que el día anterior nos fuimos a la cama, sobre las 01:15 am, gracias a que una de nuestras maletas no llegó a destino, sobre las 5:30 o 6:00 nos despertamos.
Pensaba que el sol salía pronto como en Costa Rica, que sobre las 5:30 se hacía de día, pero no, en Cuba sale el sol sobre las 7:00.
Así que hicimos un poco de tiempo en la habitación, ya que estaba todo oscuro y esperaríamos hasta que saliera el sol.
Sobre las 7:15 nos presentamos y conocimos un poco mejor a Vicky, ya que el saludo de la noche anterior, como es lógico por la hora en que nos vimos, fue breve y conciso.
Como aún no tenía el desayuno preparado, nos fuimos a pasear La Habana a primera hora y quedamos en que volveríamos sobre las 8:00 o 8:30.
Casi todas las fotos del exterior de La Habana, que hasta ahora he puesto en el diario, son de ese día y sobre esta hora, entre las 7:30 y 8:30 de la mañana. La ciudad empezaba a despertarse.

Lo primero después de desayunar, era conseguir Cups (Pesos Cubanos) tan solo llevábamos euros en efectivo, lo cual recomiendo llevar en suficiente cantidad, ya que casi en ningún sitio está disponible poder pagar con tarjeta.
El taxi del aeropuerto a la casa, lo habíamos pagado en euros (25€), el desplazamiento lo reservamos también con alojamientosencuba.com.
Sabíamos que en las Cadecas (casas de cambio) o en cualquier banco, el cambio que te daban por euro es a 27 o 30 cups, mientras que en la calle se puede conseguir 80 cups por euro.
Aquí nuestra casera Vicky nos falló un poco y comentó que ella tan solo nos podía cambiar a 65 cups x euro, así que tan solo cambié 50€ con ella.
No recomiendan cambiar en la calle, con cualquiera que se ofrezca, ya que circulan bastantes billetes de 500 pesos falsos y es fácil colar alguno falso, en un fajo de billetes buenos.
Por mi experiencia allí, si algún casero tampoco les ofrece buen cambio, yo lo cambiaría con algún taxista o restaurante con el que vas a ser cliente, así si tienes algún problema, sabes donde puedes ir a buscarlos.
En varios restaurantes se me ofrecieron para cambiar y también el chófer del coche clásico descapotable que alquilamos por 1 hora, le interesaba cambiar, es más no es que les interese cambiar, es que les hace mucha falta cambiar, ya que tan solo pueden comprar en euros según que tipos de artículos, que solo se venden en las tiendas que ellos llaman MLC(moneda libre convertible) estos productos, generalmente son ; electrodomésticos, jabón de cualquier tipo (para el cuerpo,lavadora,lavavajillas) ruedas para los coches y recambios etc... todo lo que se tiene que importar en general.
La verdad es que los pobres cubanos, con la desaparición del Cuc (el peso que tenían que usar los turistas) que el dólar también está prohibido y que todo ha subido de precio con la pandemia, tienen un cacao mental, les pasa como nosotros, cuando nos quitaron la peseta y empezamos a funcionar con el euro. Para ellos la desaparición del chavito (el Cuc ) les ha supuesto una pérdida de poder adquisitivo enorme y a nosotros como turistas, si obtenemos el cambio de 80cupsx€ nos ha beneficiado, sobre todo en la comida en restaurantes, bebidas, entradas a ciertos sitios etc... Hemos pagado algunas cosas, que al cambio, solo en Asia ha sido igual de barato. Hemos comido por 10 , 12 y 20€ los cuatro, con platos principales, sin postres, tomando 1 cerveza o mojito, a mi entender calidad-precio baratísimo.





Antes de viajar, todo esto lo veía un lío y tenía miedo de no poder conseguir buen cambio, pero no he tenido ningún problema, en todas las casas he podido tener buen cambio, menos en La Habana.
Cuando estás allí, todo se entiende mucho mas, pero hay que ir informado, si no consigues el cambio callejero, todo resultaría carísimo, ni en Suiza sería tan caro, así que, en el tema del dinero es muy importante no despistarse.
En Trinidad, tuve que dejar 200€ en efectivo a una pareja de Colombianos, que estaban sin efectivo y sacar por cajero les era una sangría, a traves de la tarjeta revolut, me lo devolvieron por transfrencia.
Por suerte, a las 17:00 había quedado delante del Capitolio con Pedro, que es el hermano de una amiga de mi mujer que es cubana y vive en Menorca.
Cuando Josefina se enteró que íbamos a Cuba, le pidió a mi mujer por favor, si podía darnos ropa y medicinas para su hermano, a lo que accedimos.
Esa tarde teníamos que hacer la entrega de lo que habíamos traído desde Menorca para Pedro, de paso, él nos había conseguido 12000 cups, que son 150€ para cambiar al cambio de 80pesos x € así que con los 50€ que habíamos cambiado con Vicky, tan solo teníamos que pasar la mañana.

Después de desayunar, salimos otra vez a la calle y justo en una calle detrás de nuestra casa, había una oficina de Etecsa, aprovechando que no hacía mucho que habían abierto y tan solo había 2 personas en la cola, nos pusimos en la fila, tenía que comprar tarjetas para conectarnos a internet. Ese día tuve suerte y casi no había cola en esa tienda de Etecsa, en general en Cuba, las colas en sitios como Etecsa, bancos, tiendas MLC y alguna tienda que no sé bien que se vendía, son enormes, colas de mas de 1 hora, así que no cometáis el error que cometí ese día, que tan solo compré 2 tarjetas de 1 hora de duración, no te das cuenta y se gasta el tiempo enseguida.
Nos pasó que hasta que llegamos a Trinidad, no pudimos comprar tarjetas en Etecsa y pagamos en las casas el doble de lo que realmente cuestan, por que de las colas que había en los otros pueblos era perder media mañana allí parado.
Por cierto, 1 tarjeta de una hora de Etecsa, cuesta 25 pesos, con el cambio oficial, sería mas o menos 1€, lo que antes venía a costar 1 Cuc, ahora con el cambio callejero de 80cupsx€ nos viene a costar 0.31 céntimos, con cosas así, es lo que decía, el turista ha salido ganando, si consigue buen cambio.



Empezamos a recorrer la ciudad, por el Paseo del Prado hacía abajo, hacía el mar, hasta el principio del Malecón con el Castillo de San Salvador de la Punta, a lo lejos la Fortaleza del Morro protege la entrada a la bahía.
Desde allí vimos un edificio que nos llamó la atención y resultó ser la embajada de España, muy cerca del Museo de La Revolución, por cierto a un lado de la embajada, como no, una cola enorme, supongo que para trámites varios.


Visita desde afuera del Museo de La Revolución, donde se ven algunos vehículos usados en la contienda, incluido un avión, con el barco Granma en el interior, que se deja ver un poco por una gran cristalera.
Nos dirijimos hacía el interior de las calles mas estrechas, empezamos a conocer La Habana vieja y sin darnos cuenta estamos en la Plaza de La Catedral.
Son las 10:30 y ya nos empiezan a ofrecer algunos tragos o sentarnos en su restaurante, rechazamos el ofrecimiento amablemente...
-¿De donde son ustedes?
-Españoles
-Españoles, ahh De La Madre Patria, que bien, sean bienvenidos a Cuba ¿ Barça o Madrid? ¿ quieren cambio? Tengo buen cambio 80pesosx€, ¿quieren Habanos? Hoy es el día internacional del Habano y les hacemos un descuento especial.
Estos fueron los ofrecimientos mas habituales que nos hicieron, que amablemente rechazamos y normalmente la gente no insistía mas.
En general vimos muy pocos turistas, de lo que en parte nos alegramos, pero por otra parte, nos pareció que faltaba esa chispa de alegría o ambiente cubano que la gente decía que había en La Habana, se nota que la pandemía ha hecho mucho daño, no sé como explicarlo, todo estaba como muy tranquilo, menos en las colas que vimos para comprar alimentos etc... donde veías a la gente bastante crispada, enfadada etc...
No quisiera imaginarme estarme todo el día en una cola para poder obtener algo de comida, tiene que ser bastante frustrante.

Como decía, todo muy tranquilo.
No sé como era antes, pero en ningún sitio había aglomeraciones, tal vez era pronto, no lo sé.
La Bodeguita del Medio, estaba vacía, aún era pronto, sobre las 11.00 de la mañana, pero como comprobamos al día siguiente, que estuvimos casi hasta las 14:00 allí, éramos pocos los turistas que paseábamos por la ciudad.
Seguimos caminando sin rumbo fijo, visitando la Plaza de Armas, el Castillo de la Real Fuerza, viendo calles y fachadas que nos llamaban la atención, como las esquinas del Hotel Ambos Mundos y el edificio de al lado.
Algunos edificios caen a trozos y otros son espectaculares, la verdad es que La Habana para nosotros fue de lo mejor del viaje, bien se merece una visita esta ciudad.


Como decía, no hubo aglomeraciones en ningún sitio turístico y no había muchos turistas en general.
Sobre las 12:30 sin darnos cuenta y sin buscarlo estábamos delante del Floridita, así que entramos a probar nuestro primer trago en Cuba. Aún no habíamos probado ni el mojito, ni cerveza, ni cuba libre, lo primero fue el Daiquirí del Floridita, que por 180cups cada uno disfrutamos mucho.
El local está muy bien y casi bien era para nosotros solos, a parte de nosotros que nos sentamos en la barra, había como 4 mesas con gente y 4 personas mas en la barra.
Justo en la entrada, había 4 chicos tocando en directo.


Fotos de rigor con la estatua de Hemingway y salimos en busca de la Plaza Vieja, que todavía no la habíamos encontrado.
Al salir del Floridita, nos contactó un chico muy simpático por si nos interesaba alquilar el coche clásico descapotable, que había allí fuera aparcados, señalándome uno de color rosa con los asientos blancos.
Antes de viajar, ya les había enseñado lo de los coches a las niñas y ellas querían subir precisamente en uno de color rosa si o si, así que al ser rosa el coche que nos ofrecía, empezamos a hablar.
En teoría la hora de alquiler la tienen por 50 o 60€, pero rápidamente nos bajó a 30€, yo sabía que los precios rondaban por ahí, entre 25 y 30€ la hora, también el chico me comentó que lo podía pagar en pesos, que por 1500cups también nos llevaba, así que cerramos el trato por 1500cups.
Con nuestro cambio callejero (80cupsx€) la hora a 1500cups nos salía por 18€, era un buen descuento.
Quedamos para el día siguiente a las 10:00 allí mismo, delante del Floridita, ya que ahora aún nos tocaba acabar de visitar la zona de La Habana Vieja.
Visitamos la Plaza Vieja, muy bonita y a esas horas las 14:00 mas o menos, con muy poco ambiente, tan solo la Casa de la Cerveza y el restaurante de la esquina de al lado, tenían un poco de gente.
En la calle de al lado, encontramos el restaurante Mojito-Mojito, que había visto recomendado en el foro, en una pizarra tenía los precios y tenían unos platos del día, con un mojito incluido por tan solo 450cups, que vienen a ser 6€ siempre teniendo en cuenta el cambio callejero como digo yo
Así que entramos, local muy nuevo, música en directo y tan solo 3 mesas con clientes, incluida la nuestra.
Aquí probamos nuestros primeros mojitos en Cuba.


Aunque tan solo había 3 mesas con clientes y había por lo menos 4 camareros/as, fueron bastante lentos a la hora de sacar la comida, aquí empezamos a conocer el ritmo cubano de los restaurantes en general, durante todo el viaje, el servicio ha sido muy lento y eso que nunca hemos ido a un restaurante que estuviera lleno hasta los topes, ya que turistas en todos sitios éramos pocos. No sé como era el servicio antes de la pandemia, pero por el poco trabajo que parecía que tenían, el servicio no es como el que tenemos por España. El que vaya con prisas, que se mentalice



Después de comer, nos fuimos hacía el Capitolio, habíamos quedado con Pedro a las 17.00, mientras hacíamos tiempo, intentamos conectarnos a internet en alguna plaza, aún no habíamos contactado con familia para avisar que estábamos sanos y salvos. En el Parque de la Fraternidad al lado del Capitolio, no funcionó, en el Parque el Curita, justo donde está el principio del barrio chino, tampoco hubo manera de conectarnos a internet, al final, en la plaza donde está el Floridita, nos pudimos conectar al wifi mismo del bar, dimos señales de vida a la familia y nos dispusimos a quedar con Pedro.

---

Primera noche en La Habana.
Nuestra casera, nos recomienda ir a cenar a Los Nardos, restaurante que está justo delante del Capitolio, por tanto muy cerca de nuestra casa.
Vicky nos dice, que el restaurante no es barato(su opinión) pero que las raciones son muy grandes, que al final vale la pena ir, nos recomienda que pidamos un plato a medias para las niñas, así no sobrará comida.

Por la tarde ya hemos conocido a Pedro, que con lo que le hemos traído desde Menorca, de parte de su hermana, está mas contento que unas castañuelas y nosotros también, con nuestros pesos recién adquiridos.

Nos vamos a cenar a Los Nardos, ya que también es uno de los restaurantes recomendados en el foro.


En el mismo edificio de Los Nardos, están 4 restaurantes, esa noche Los Nardos, El Trofeo, D'Lirios estaban cerrados, tan solo estaba abierto El Asturianito, situado en el último piso.
Esperamos unos 10 minutos afuera, hasta que pudimos subir.
Según Vicky, los precios eran caros, pero para nosotros no lo fue para nada.
Los platos principales, siempre vienen acompañados de arroz, ensalada, patata o yuca, las raciones son muy completas, vienen a costar :
Ropa Vieja a 450cups, pollo a 400cups , pescado 500cups, pizzas a 300 cups, esto traducido en euros, son platos muy completos por 5 o 6 euros.
Mi intención era probar la Ropa Vieja, pero ese día no tenían, así que tuve que pedir escalope de cerdo.

Aquí la foto, no hace mucha justicia, solo decir, que estos escalopes eran enormes y había 3 unidades.
La cerveza, si que mas o menos en todos sitios, solía costar como 160 cups (2€) normalmente salía mas barato pedir un mojito, que solía estar en 120 cups en muchos sitios.
Mi mujer y mi hija mayor compartieron plato de pollo.


A parte de estos 2 platos, también pedimos una pizza para nuestra hija pequeña de la cual sobró la mitad. Nos la pusieron en una cajita, para que nos la lleváramos a casa, casi todas las mesas les sobraba comida y se lo llevaban con su taper correspondiente
La clientela que había, en su gran mayoría eran cubanos, no sé si de los que estaban de vacaciones y de visita a su país por las vacaciones o de los que viven en Cuba y se pueden permitir ir a cenar a un restaurante.

No tomamos postre, si que pedí café, con 2 cervezas y una botella de agua. Siempre me hace ilusión probar la cerveza del país al que visito, pero no nos sirvieron ni Cristal, ni Bucanero, de cerveza nos trajeron unas Victoria, cerveza que es de Nicaragua Así que, me quedé con las ganas de probar la Ropa Vieja y la Cristal o Bucanero.
No recuerdo bien que costó la cena, pero me suena que unos 1400 o 1500 cups para los 4, unos 18€, para nosotros una absoluta ganga.

---

Segundo día completo en La Habana, señalado en rojo o mas bien en color rosa para nuestras hijas.
En casa, ya les había enseñado que cuando fuéramos a Cuba, iríamos a dar una vuelta con uno de esos coches tan chulos que aún circulan por la ciudad, ellas enseguida les entusiasmó la idea y como no, el color del coche tenía que ser rosa.



Por suerte, el día anterior, casi el primero que nos ofreció el paseo, era en un coche de color de rosa, nos cayó muy bien, nos agradó como nos explicó en que consistía todo y llegamos a un acuerdo, en el que le podíamos pagar en cups.
Pagamos 1500cups, que al cambio nos salía a 18€.

Habíamos quedado a las 10:00 delante del Floridita, con los nervios estábamos allí a las 9:45 y no había ningún coche descapotable, nos temimos lo peor, que el coche no se presentaría, pero sobre las 10:05 apareció el chico con el que habíamos cerrado el trato, el no sería nuestro conductor, diríamos que era el que captaba clientes para los 4 o 5 coches clásicos descapotables que aparcan delante del Floridita.
A parte de en esta plaza, también aparcan otros coches como estos, delante del Hotel Inglaterra y el Hotel Plaza Central, son muy fáciles de localizar, en caso de que nuestro coche no se hubiera presentado, tan solo tendríamos que haber ido a uno de estos lugares, que hubiéramos conseguido coche rosa seguro.


Al final nuestro chofer y propietario del carro fue Yurisver, muy simpático también.
Acordamos que nuestro recorrido, teníamos que ir a la Plaza de la Revolución, pasar por el bosque que hay en el Parque Almendares y que acabara en el Callejón de Hamel, sitios que estaban lejos de nuestro alojamiento.



Yurisver, así como íbamos pasando por ciertos sitios, nos iba explicando cosas.
En la Parada de La Plaza de La Revolución, me dejó sentarme al volante del coche y nos hizo a toda la familia unas fotos chulísimas.
Nos comentó, que hacía casi 2 años que no trabajaba, ya que no había habido casi turistas con la pandemia. Para obtener dinero, tuvo que vender el volante original del coche y algunas piezas de recambio que tenía guardadas por si acaso. Su coche aún conserva el motor original y eso tiene mucho valor, ya que hay muchos coches clásicos, en que básicamente lo único original que queda, es la carrocería.
Nos pidió si nos interesaba cambiar cups por euros, que le hacían falta para tener según que cosas para su coche, rechacé su oferta, tenía suficientes pesos por el momento, ya que quería ir cambiando, según fuera necesitando y en lugares diferentes, para así quedar bien con las casas o personas que encontráramos por el camino.
Eso me hizo sentir un poco mal con él, el acuerdo era que le iba a pagar con pesos, pero para nosotros el trato nos era muy favorable y no podíamos dejar pasar la oportunidad.
Desde luego, si no hubiera obtenido el cambio favorable el día anterior, me pareció una persona de total confianza, para poder realizar el cambio con él.



Pasamos sin pararnos, por el cementerio de La Habana, creo que nos comentó Yurisver, que era el mas grande de Latino América y que había enterrado o había habido los restos de Cristóbal Colón en ese cementerio.
Nos adentramos por el bosque que hay en el centro de la ciudad, que atraviesa el rio Almendares, una zona muy bonita, con unos árboles preciosos, pasamos por el barrio de Miramar, enseñándonos una de las casas mas bonitas de la ciudad, de la que nos explicó que era de una señora sin descendencia y cuando se murió, el estado se quedó la casa.



Atravesamos un poco del final del Malecón, para al fin llegar al Callejón de Hamel, que era el final del trayecto.
Miré el reloj y el recorrido había sido 1 hora clavada.


Ahora tocaba visitar un sitio, que estaba reflejado como un lugar singular, que solía gustar a mucha gente.
No sé si fue la hora (11:15am) que aún no hay turismo, que no era domingo, pero el famoso Callejón de Hamel, estaba desangelado, había como una tienda o bar o no se que comercio, que parecía que estaban empezando abrir, con una persona adentro que nos miró como diciendo ¿estos que hacen por aquí? ¿se habrán perdido? fue entrar al callejón, ir hasta el final del lugar, volver e irnos a pie de allí, una visita fugaz de 5 minutos, la visita no dio mas de si.
Nos marchamos hacía el malecón que nos caía cerca.

---