![]() ![]() 21 DIAS DE MOCHILEROS EN TAILANDIA ✏️ Blogs de Tailandia
Precios, recorrido y diario del viaje que este año nos ha llevado 21 días por tierras TailandesasAutor: Edward32 Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.7 (18 Votos) Índice del Diario: 21 DIAS DE MOCHILEROS EN TAILANDIA
01: 3 AGO 2011 MADRID - DUBAI
02: 4 AGO 2011 DUBAI - BANGKOK
03: 5 AGO 2011 BANGKOK
04: 6 AGO 2011 BANGKOK - AYUTTHAYA - BANGKOK
05: 7 AGO 2011 BANGKOK
06: 8 AGO 2011 BANGKOK - LOPBURI - PHITSANULOK
07: 9 AGO PHITSANULOK - SUKHOTAI
08: 10 AGO SUKHOTAI - CHIANG MAI
09: 11 AGO EXCURSION DOI INTHANON
10: 12 AGO VISITA DOI SHUTEP
11: 13 AGO TRIANGULO DE ORO
12: 14 AGO CHIANG MAI - PHUKET
13: 15 AGO VISITANDO LA ISLA DE PHUKET
14: 16 AGO EXCURSION JAMES BOND ISLAND
15: 17 AGO PHI-PHI ISLAND
16: 18 AGO PHUKET - KOH SAMUI
17: 19 AGO RECORRIENDO KOH SAMUI
18: 20 AGO PLAYA EN KOH SAMUI
19: 21 AGO KOH SAMUI - BANGKOK
20: 22 AGO BANGKOK
21: 23 AGO BANGKOK - DUBAI - ESPAÑA
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Etapas 16 a 18, total 21
Un día más la jornada comienza a primera hora de la mañana, en esta ocasión para cruzar a la costa Este de Tailandia, la isla de Koh Samui. El viaje que contratamos hace dos días es un combinado que incluye bus y barco y que en principio nos debería dejar en la isla alrededor de las cinco de la tarde. A eso de las 6:30 de la mañana estamos en la recepción del hotel esperando nuestro transporte. En breve aparece una furgoneta similar a la que días anteriores nos ha llevado a las excursiones que nos recoge a nosotros y que recorre varios hoteles más hasta completar las plazas para tomar rumbo por las carreteras Tailandesas. Poco nos imaginábamos a esas horas la cantidad de transportes que nos quedaban por probar en el viaje más singular de los que hicimos por Tailandia. El viaje transcurre tranquilo, abandonamos la isla de Phuket, cruzamos por las cercanias de la bahía de Phang Nga y unos kms más adelante paramos en un bar de carretera. Suponemos que es una parada normal para ir al baño y bajamos tranquilamente a estirar las piernas. Al volver a la furgoneta el conductor nos dice que no, que ya no es esa furgoneta, que hay que cambiar ¿Cómo? Pero que nosotros vamos a Koh Samui… el hombre no habla ni papa de ingles y solo repite Koh Samui, Koh Samui… mientras nos indica otra furgoneta que se encuentra allí parada. Bueno pensamos que será un transfer para reunir a todos los que vamos en una dirección así que un poco extrañados pero convencidos nos cambiamos. La nueva furgoneta va abarrotada, sólo quedan nuestros dos asientos libres y las mochilas entran a duras penas en el escaso maletero. Vamos en los asientos traseros y algunas mochilas nos pegan en la cabeza. Aquello va realmente lleno, mochilas en el suelo, gente… es lógico no hay hueco para tanta mochila porque han intentado llenar la furgoneta a tope de su capacidad con gente. Aunque un poco más incómodos continuamos viaje comiendo unas galletillas que nos hemos comprado en la parada. Un par de horas más tarde la furgoneta para. No sabemos donde estamos pero desde luego aquello no es ningún muelle para coger el barco. Nos encontramos en alguna ciudad de la que no tenemos ni idea su nombre en una especie de local abierto hacia la calle donde al fondo hay unas puertas que acceden a unas oficinas. En las paredes algún cartel de la compañía de barcos y un par de sillas es todo lo que hay en aquel sitio. Varias furgonetas más con turistas van apareciendo. Todos bajan con la misma cara de asombro pues evidentemente esperábamos llegar todos al puerto donde hay que coger el barco para llegar a la isla.
Como si fuera un consultorio médico desde la oficina empiezan a llamar a la gente en parejas, trios o individual, según tus acompañantes. Nos preguntamos a qué viene tanta parafernalia, llevamos allí casi tres cuartos de hora y aquello va lentísimo. Aunque preguntamos nos dicen que en breve nos vamos. Al final nos toca el “turno” de entrada a la oficina. Nos preguntan a donde vamos, nos ponen unas pegatinas muy chulas que ponen “Koh Samui” y nos dan los tickets del barco. A continuación empiezo a entenderlo todo. El hombre empieza a preguntar que si tenemos hotel en la isla que si tenemos transporte… Nosotros para no perder tiempo en la llegada hemos reservado un hotel en la playa de Chaweng para dos días durante el tiempo de estancia en Patong, lo cual le hacemos saber. El hombre pone cara de lamento al no poder vendernos el hotel… Nos pregunta como vamos a llegar a nuestro hotel desde el puerto, dice que la playa de Chaweng queda al otro lado de la isla y que nos van a pedir una burrada los taxis para llegar hasta allí. Nos ofrece un transporte “comodísimo” según él por sólo 200 baths/persona que nos estará esperando en la llegada y que nos llevará directamente al hotel. Según dice los taxis nos van a pedir no menos de 600 baths por persona así qué… es un chollo. En aquellos momentos me cabreaba un huevo el que me hubieran hecho madrugar más de lo normal para estar en aquella oficina negociando con un paisano un taxi en Koh Samui. Ahora entendía el hecho de hacernos esa parada y estar cerca de dos horas allí esperando así que directamente le dije que no quería su taxi y que yo había pagado por un transporte directo a Koh Samui así que a ver cuando marchábamos. Con una sonrisa nos dice que en breve continuamos y que no nos enfademos… Un rato más en aquel lugar esperando a que ofrezcan a todos el taxi (porque aquella parada simplemente era para intentar venderte un hotel o un taxi eso me quedó claro) y en breve empiezan a aparecer varios tuk-tuks. Nos quedamos todos mirándolos ¿pero vamos a ir ahí hasta el puerto…???. Nos empiezan a subir en los tuk-tuks aprovechando al máximo su capacidad. Las mochilas por encima, por debajo, la gente con una pierna fuera, con su mochila encima o como podían… todo un espectáculo. Cuando nos toca nos intentan meter a seis en un tuk-tuk mochilas incluidas. No cabemos con todo el equipaje y el tío empuja las mochilas para que entremos. Me cabreo con él y le digo que si no entramos, no entramos, que busque más tuk-tuks pero que no es mi problema. Al final baja a uno y el resto arrancamos en el tuk-tuk. Hacemos escasos 500 ms, un tramo de calle giro a izquierda y a parar. Nos dicen que abajo otra vez. Estamos en el medio de otra calle. Ya me estoy cabreando de lo lindo ¿¿¿pero que cachondeo es este??? Ahora hay que subirse a un autobús que así a primeras debe tener unos 50 ó 60 años. Hace tiempo que no veía un trasto tan viejo. Empiezan a meter las mochilas en la parte de abajo, llena de porquería hasta la saciedad, nosotros nos colamos y vamos con las mochilas para arriba. Nos dicen que las mochilas tienen que ir abajo y le digo que ni de coña, que mi mochila no toca allí hasta que no lo limpien. Debía ser tanto mi cabreo con tanto cambio de bus que mi respuesta fue muy convincente porque no puso más reparos en que subiéramos con las mochilas. Ya montados en el bus de los años 50 hacemos otros 20 min de trayecto preguntándonos todo el camino si sería este el último bus o habría algún transfer más. Al fin llegamos a algo que si parece un puerto, menos mal, al fin. Son las tres de la tarde nos canjean el billete que nos han dado y nos dicen que en media hora sale el barco. En un puesto de bocadillos que hay allí aprovechamos para comer algo mientras esperamos y sobre la hora que nos han dicho nos avisan para embarcar. Al fin estamos en el barco, el viaje hasta allí ha sido pesado y queda como anécdota todos los transferes que nos ha tocado hacer. A media travesía un hombre que yo convine en llamar “el pirata” porque llevaba un pañuelo en la cabeza llega hasta nuestros asientos tras haber ido hablando uno a uno con todos. Nos pide los tickets, nos explica a qué hora llegamos, qué hay que ver en Koh Samui y nos pregunta de nuevo si tenemos hotel y taxi. Nos ofrece transporte hasta el hotel que hemos elegido por 150 baths. No nos parece mal precio, 50 baths menos que el de la oficina y además el hombre está allí y vamos a bajar con él por lo que al final aceptamos. Nos coloca otra pegatina con lo cual ya parece que vamos a una fiesta todos decorados de etiquetas. Poco antes de llegar el cielo se empieza a poner muy negro. La tormenta está a punto de estallar cuando llegamos al puerto. Con prisa cogemos las mochilas y salimos pitando porque va a empezar a llover fuerte de un momento a otro. Al final de la pasarela del puerto encontramos al pirata que está reuniendo a toda su gente para llevarlos en su furgoneta. En cuanto estamos todos nos sube a la furgoneta mientras empiezan a caer las primeras gotas. Vemos a varías personas que han cogido el taxi en la oficina buscando su taxi desesperados. No sé que sería de ellos pero desde luego eso de que el transporte nos estaría esperando como nos quería vender el tipejo aquel no era verdad, allí no había, a priori nadie. Nosotros nos alegramos de nuestra suerte porque ya estamos circulando hacía el hotel al cual llegamos en unos 30 – 40 min después. Son casi las siete de la tarde, comienza a oscurecer y además está lloviendo así que nos refugiamos en el hotel a tomar una ducha y descansar un poco. Cerca de las ocho y media salimos a dar una vuelta. Ha parado de llover y hace el mismo calor de siempre. Hay un largo trecho entre el hotel y el centro pero se ve amenizado por todos los chiringuitos y restaurantes que se encuentran a ambos lados de la calle. De camino paramos a cenar y luego continuamos hasta llegar a la zona de marcha. La zona de bares y discotecas nos decepciona un poco, después de ver Patong aquello es mucho peor y aunque está bien, es mucho más pequeño y para nada la espectacularidad del otro lado. De todas formas hay pubs, discotecas, bares de chicas, lo mismo que en Patong pero a mucha menor escala y más simple. Nos tomamos un cocktail en uno de los bares y después regresamos al hotel bajo la lluvia que empieza a caer de nuevo. ====== GASTOS DEL DIA Viaje Koh Samui 1200 THB Galletillas viaje 35 THB Comida 150 THB Taxi a hotel 300 THB Patatillas en barco 90 THB Botella agua 13 THB Hotel 990 THB Cena 650 THB Cocktails 260 THB ====== Etapas 16 a 18, total 21
Tras la lluvia de anoche el día amanece radiante. Nos disponemos a pasar nuestros últimos dos días de vacaciones en la isla antes de regresar primeramente a Bangkok y posteriormente a España. Tras irnos a desayunar a un restaurante cercano al hotel tenemos una tarea importante que hacer antes de nada. Hay que buscar transporte para el próximo domingo para llegar a Bangkok. Nuestra idea inicial es coger un barco para salir de la isla y luego llegar a Bangkok en tren ya que nos parece un transporte más cómodo que el bus. Preguntamos en varios sitios pero en todos nos confirman que la opción del tren no es posible porque está completo. Creemos en el primer sitio que nos lo dicen que nos están liando pero después tras recibir la misma respuesta en otros tres o cuatro sitios nos convencemos de que no hay posibilidad de ir en tren. La opción que nos ofrecen todos y que más nos convence es una a 1500 baths con barco cruzando a Koh Phangan y Koh Tao y tras llegar a tierra bus a Bangkok. Las otras opciones aunque más baratas parecen peores sobre todo por los horarios y porque en vez de atravesar por las islas nos llevan a tierra directamente aumentando considerablemente el desplazamiento por tierra. Aunque el billete de 1500 baths nos parece un poco caro es la mejor opción y además tras el viaje del día anterior no tenemos ganas de volver a estar cambiando de bus cada dos por tres. No perdemos más tiempo en esta búsqueda porque todos ofrecen lo mismo así que finalmente cogemos los billetes en una agencia al lado del hotel y nos olvidamos del tema.
Nuestra idea para el día de hoy es alquilarnos un coche para recorrer un poco la isla. Nos recorremos un poco las calles alrededor del hotel buscando algún local de alquiler de coches y conseguimos encontrar un par de ellos. En el primero nos piden 1500 baths por 24 hs, explicamos que solo queremos el coche medio día y que a última hora de la tarde lo devolveremos. Tras negociar un rato llegamos a un acuerdo de 1000 baths. El trato está cerrado, comenzamos a hacer los papeles y es cuando la mujer nos dice que hay que dejar los pasaportes como aval…. ¿cómo???? ¿¿¿mi pasaporte???? Ni de coña vamos. José el director del hotel de Patong ya nos contó la historia de unos turistas que dejaron el pasaporte como aval y después, a causa de que según el dueño del coche había unos golpes nuevos en el coche no se los quería devolver. La mujer intenta explicarnos que es normal, que no pasa nada e incluso nos enseña varios pasaportes de otros turistas, pero no nos convence, a cuatro días de tener que abandonar Tailandia no nos arriesgamos a dejar nuestros pasaportes a cualquiera. Negociamos en el otro lugar de al lado pero aunque conseguimos un buen precio nos encontramos con el mismo problema. Un poco desilusionados empezamos a pensar en alquilar un taxi como hicimos en Patong pero se nos ocurre preguntar en el hotel. Igual como ya tienen nuestros datos no nos piden el pasaporte. Preguntamos allí y negociamos duro, que si somos clientes del hotel, que si sólo son 12 horas… al fin llegamos a un buen precio 800 baths por una furgoneta con cambio automático y lo mejor, sin tener que dejar el pasaporte. Genial, en la furgoneta entran otras cinco o seis personas y bromeamos si no irnos al puerto a buscar turistas y llenar la furgoneta a 200 baths por cabeza… jajaja unos cuantos viajes y nos pagamos las vacaciones. Felices con el negocio que acabamos de hacer nos cogemos todo lo necesario y nos vamos de excursión por la isla en nuestra furgo. Nuestra idea es bajarnos hacia el sur en primer lugar para visitar el “gran father” y “grand mother” dos rocas naturales con forma de los órganos sexuales del hombre y la mujer y que es una de las cosas más turísticas de la isla. Nos empezamos a dar cuenta a medida que circulamos que muchos carteles están escritos en Tai con lo cual damos bastantes vueltas y tenemos que preguntar varias veces para encontrar la zona. De todas formas es divertido porque hemos ido parando en pequeños miradores desde donde se observa una bonita vista del mar y de la isla. Al final creemos que hemos llegado al lugar indicado así que aparcamos nuestro vehículo y nos disponemos a visitar el lugar. Hay carteles que indican donde quedan las rocas, atravesamos una playa y posteriormente el camino transcurre por un bosque. Nadie por los alrededores, nos preguntamos si es posible tanta soledad en un sitio tan turistico. El camino se acaba ante unas rocas que descienden para otra playa. Hay una escalera hecha de palos y una cuerda donde agarrarse para poder descender. No llevamos el calzado más adecuado para andar haciendo alpinismo pero no nos apetece deshacer todo el camino hecho y al fin y al cabo los carteles indican que vamos por buena dirección. Tras el descenso, complicado en algún tramo, llegamos a una pequeña cala prácticamente virgen en donde tres personas se bañan en el agua. Nos paramos unos minutos a mirar aquel sitio tan singular y nos sigue extrañando un huevo no ver a nadie ¿pero seguro que este es el camino? Nos entran unas ganas horribles de quedarnos en la playa, aquel agua azul cristalina, sol espléndido y el hecho de tener toda la playa para nosotros hacen que sea el paraíso perfecto. Venciendo al diablillo que nos está pidiendo quedarnos en la playa continuamos camino subiendo por una cabaña hecha con palos y que es un chiringuito a lo más puro estilo hippy situado justo sobre la arena. Sobre un árbol cercano hay otra cabaña, a priori habitada, nos parece que nos hemos trasladado en el tiempo y estamos en algún decorado de Robinson Crusoe. Siguiendo el camino llegamos al otro lado de las rocas que hacían de frontera natural con la playa y es cuando vemos el Gran Father. Al fin hemos llegado. Vemos ahora que todos los turistas acceden por otro camino, nosotros por nuestro desconocimiento, hemos hecho un rodeo que nos ha valido para conocer ese pequeño paraiso por el que no pasa nadie porque no es fácil encontrarlo. Nos entretenemos un rato viendo las rocas y haciendo fotos y luego volvemos por el camino normal. Nos damos cuenta que evidentemente este nuevo camino es mucho más fácil y al final nos lleva a la carretera general unos 500 ms delante de donde hemos dejado el coche y hemos descendido a la playa. Ahora entendemos todo. Hemos ido por un camino secundario pero que al final llega al mismo sitio. Aprovechando que es la hora de comer paramos en un restaurante que fue el más cutre y propio de todo el viaje. Realmente no era restaurante sino los bajos de una casa. Al lado de las mesas entre los sacos de arena y los carretillos el dueño veía la televisión tumbado en una hamaca en lo que podía ser el salón de casa. La cocina que poco se parecía a la de un restaurante estaba completamente llena de trastos, botes y utensilios de cocina. La mujer nos prepara dos geniales Pad Thai deliciosos. Cocina Thai al más puro estilo. El precio también de risa, dos Pad Thai y dos aguas 120 baths, o sea poco menos de tres euros. Tras la comida no podemos más con el gusanillo y nos vamos a la playita que acabamos de descubrir. En total somos dos parejas en toda la playa, dos alemanes y nosotros maravilla de las maravillas poder disfrutar de un lugar tan paradisiaco casi para ti solo. Tras el baño y disfrute de la playa durante más de una hora volvemos a nuestro transporte. Son casi las cuatro de la tarde y vamos a provechar para ver la zona norte de la isla. Media hora de camino y estamos en la zona norte de la isla en donde nos dedicamos a ver varios budas y templos que hay por la zona. Después de la borrachera de los primeros días no hemos vuelto a ver ninguno desde que llegamos a las playas y estos nos llaman la atención. Cerca de las seis de la tarde, ya cerca de oscurecer intentamos llegar a la punta norte de la isla, nos gustaría ver la puesta de sol viendo la isla de Koh Phangan al fondo que según hemos leído se puede ver perfectamente. Nos volvemos locos buscando la zona entre las carreteras y caminos pero al final no la encontramos así que decidimos, ya con la noche encima, regresar hacia el hotel pasando por una zona de resorts que es sinceramente espectacular. Nos llama tanto la atención que paramos en uno de ellos y nos damos un paseo para verlo, mesas para cenar sobre la playa, salida directa del hotel a las hamacas, piscina viendo el mar… está genial para unos días de relax pero no es el plan en que hemos venido en este viaje así que habrá que dejar la idea para otra ocasión. Con la noche encima una nueva tormenta llega y empieza a llover así que nos dirigimos ya hacía el hotel para devolver la furgoneta y descansar un rato en la habitación. Salimos un rato más tarde para cenar y aprovechamos para tomarnos unos cócteles pensando ya con nostalgía que nuestros días de vacaciones empiezan a tocar a su fin. ====== GASTOS DEL DIA Desayuno 240 THB Alquiler coche 800 THB Gasolina 400 THB Postales 50 THB Comida 120 THB Cafe 90 THB Cena 418 THB Cocteles 240 THB Hotel 990 THB ====== Etapas 16 a 18, total 21
Ultimo día de estancia en Koh Samui y último día que disfrutaremos en las playas de Tailandia. Por ello hemos decidido tomarnos un día de relax total después de tantas emociones en este viaje. Nos dedicaremos el día entero a disfrutar de la playa de Chaweng que tenemos delante del hotel y a chapotear en las calientes aguas tailandesas que tanto nos han enamorado. Hoy no toca madrugar así que nos levantamos tranquilamente, desayunamos y a algo más de las 11 de la mañana nos vamos a la playa. Como tenemos pensado estar todo el día alquilamos un “kit playero” que dimos en llamar: Dos hamacas, la sombrilla y una mesa, todo ello por 100 baths el día entero, así que con todo ello comenzamos a disfrutar nuestro día de playa. Al poco de llegar el cielo comienza a nublarse y a ponerse negro. En breve las primeras gotas comienzan a caer. Nos enfadamos de lo lindo con el dichoso monzón, aún nos va a fastidiar nuestro día de playa. La gente comienza a abandonar el lugar porque lo que en un principio eran unas gotas se empieza a convertir en una lluvia fuerte. Nosotros como acabamos de llegar no nos vamos y nos refugiamos bajo la sombrilla. La tormenta arrecia y empieza a diluviar más que a llover. Pensamos que si no nos hemos ido antes ahora no lo vamos a hacer. Nos calaríamos de pies a cabeza en cuestión de minutos aunque al fin y al cabo con el calor que hace… Esperamos pacientemente pero el diluvio continúa aunque se empieza a ver clarear al fondo. Observo como dos o tres personas se bañan mientras el agua cae a mares y me empieza a picar el gusanillo ¿Cuántas veces en la vida me voy a poder bañar con semejante lluvia encima? Salgo corriendo y me voy a bañar. El agua está de lujo como siempre y allí metido casí no me entero de que está lloviendo. Espero unos 15 min y empieza a parar de llover. En unos minutos más el sol vuelve a hacer acto de presencia y para cuando salgo del agua volvemos a tener un día esplendido de playa y la gente empieza a cubrir de nuevo la arena. Increíble como ha cambiado el tiempo en media hora. Con todo ya es cerca de la una de la tarde y la playa se empieza a llenar de típicos vendedores de comida que la preparan sobre la misma playa. Pollo frito, muslos, chuletas… teníamos pensado irnos a comer a algún restaurante pero estamos tan bien en la playa en ese momento que para nada nos apetece recoger todo e irnos así que decidimos comprar comida a estos vendedores y comer allí. La idea se convierte en un maravilloso picnic playero. En el chiringuito de las sombrillas compramos agua y ello unido a la comida que compramos y la mesa que tenemos en nuestra sombrilla hacen que comamos maravillosamente bajo un sol explendido. Ha sido una idea genial comer allí. Pasamos la tarde entre el agua y la sombrilla, mezclado con paseos por la orilla del agua sesión de fotos incluido, genial día de playa para llevarnos un recuerdo inmejorable de estas lejanas tierras. A las seis de la tarde decidimos recoger para disponernos a pasar la última noche en la isla.
Salimos pronto para cenar del hotel y aprovechamos para ver un mercadillo que encontramos. Venden todo tipo de comidas, entre ellas las cucarachas y saltamontes fritos que ya hemos visto en otros lugares. Cenamos tranquilamente y después nos tomamos nuestro último coctail playero, algo que sin duda echaremos de menos y recordaremos con agrado como recuerdo de nuestros días de playa en Tailandia. ====== GASTOS DEL DIA Hotel 990 THB Desayuno 240 THB Hamacas en la playa 100 THB Comida 200 THB Helados en la playa 130 THB Panckake en mercadillo 95 THB Cena 180 THB Coctails 294 THB ====== Etapas 16 a 18, total 21
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