El desayuno que nos prepara Donatella es un lujo: casero, abundante, variado, está riquísimo. Antes de despedirnos de ella le preguntamos si tendría sitio para volver a alojarnos en el viaje de vuelta, desafortunada pero comprensiblemente el hotel está completo.
Hoy nuestro destino es Ljubljana a 300km y hacemos todo el trayecto por autopista (peaje 13,6€). Antes de la frontera paramos en una gasolinera de Italia y compramos la viñeta que te permite circular por las autopistas de Eslovenia durante una semana (15€) Hay que pegarla en el parabrisas. Para mí es imprescindible comprarla por varias razones: desde los peajes (sobre todo los fronterizos) controlan los coches uno a uno con una cámara para ver quien la lleva y quien no, una vez que estás en la autopista no hay muchos lugares donde la puedas comprar, las autopistas están muy muy bien señalizas pero las carreteras secundarias no lo están tanto por lo que es fácil que quieras ir por una nacional o comarcal para evitar el peaje y acabes desembocando de pleno en la autopista y no tienes vuelta atrás y por último si te pillan sin la viñeta la multa es un auténtico dineral. Yo no me arriesgaría, desde luego.
Nada más pasar la frontera, directos a la primera gasolinera a llenar el depósito (1,32€/l). La diferencia del precio del diésel con respecto a Italia es abismal, unos 0,5€/l, donde por suerte no tuvimos que repostar. Aún así el precio del diésel en Eslovenia se incrementó 0,1€/l desde el año pasado
Llegamos temprano al cámping Laguna Resort, a 6km del centro. Es un cámping grande, con buenas instalaciones, pistas de tenis, baloncesto, zona de juego para niños, restaurante, etc. Además está pegado a un centro deportivo en el que te hacen descuento si lo quieres utilizar. Como es el único cámping de Ljubljana está hasta arriba de gente y esto es lo único malo que tiene, que se está un poco apiñado y no tienes mucha intimidad. Aquí nos quedamos 3 noches. (20,60€/noche).
Un año después y armamos la tienda a la primera, estamos llenos de orgullo y satisfacción de nosotros mismos. Después de comer vamos a la recepción para que nos indiquen como llegar hasta el centro en transporte público. Se coge un autobús delante del cámping y te deja en el centro, tiene buena frecuencia. Para poder utilizarlo tienes que tener una especie de tarjeta ciudadana que se recarga con el número de viajes que quieras, la venden en los kioskos o también en el cámping (2€ la tarjeta + 1,25€ cada viaje). La misma tarjeta nos sirve para los dos. Nos bajamos en la parada que nos indican y caminamos hasta la plaza principal, junto al puente triple. Desde allí cruzando por el puente triple empezamos a recorrer las calles peatonales del centro.
Ljubljana encontramos que es una capital muy pequeña que se visita enseguida, pero que tiene muchísimo encanto. Nos llama la atención el aspecto austriaco de sus edificios, el barroco, el inconfundible estilo imprimido por las obras de Jože Plečnik, la limpieza de sus calles y el animado ambiente que nos encontramos en cada plaza. Dedicamos el resto de la tarde a visitar la ciudad y hacer un montón de fotos. Volvemos al cámping para cenar, damos una vuelta después y nos acostamos pronto
Hoy nuestro destino es Ljubljana a 300km y hacemos todo el trayecto por autopista (peaje 13,6€). Antes de la frontera paramos en una gasolinera de Italia y compramos la viñeta que te permite circular por las autopistas de Eslovenia durante una semana (15€) Hay que pegarla en el parabrisas. Para mí es imprescindible comprarla por varias razones: desde los peajes (sobre todo los fronterizos) controlan los coches uno a uno con una cámara para ver quien la lleva y quien no, una vez que estás en la autopista no hay muchos lugares donde la puedas comprar, las autopistas están muy muy bien señalizas pero las carreteras secundarias no lo están tanto por lo que es fácil que quieras ir por una nacional o comarcal para evitar el peaje y acabes desembocando de pleno en la autopista y no tienes vuelta atrás y por último si te pillan sin la viñeta la multa es un auténtico dineral. Yo no me arriesgaría, desde luego.
Nada más pasar la frontera, directos a la primera gasolinera a llenar el depósito (1,32€/l). La diferencia del precio del diésel con respecto a Italia es abismal, unos 0,5€/l, donde por suerte no tuvimos que repostar. Aún así el precio del diésel en Eslovenia se incrementó 0,1€/l desde el año pasado
Llegamos temprano al cámping Laguna Resort, a 6km del centro. Es un cámping grande, con buenas instalaciones, pistas de tenis, baloncesto, zona de juego para niños, restaurante, etc. Además está pegado a un centro deportivo en el que te hacen descuento si lo quieres utilizar. Como es el único cámping de Ljubljana está hasta arriba de gente y esto es lo único malo que tiene, que se está un poco apiñado y no tienes mucha intimidad. Aquí nos quedamos 3 noches. (20,60€/noche).
Un año después y armamos la tienda a la primera, estamos llenos de orgullo y satisfacción de nosotros mismos. Después de comer vamos a la recepción para que nos indiquen como llegar hasta el centro en transporte público. Se coge un autobús delante del cámping y te deja en el centro, tiene buena frecuencia. Para poder utilizarlo tienes que tener una especie de tarjeta ciudadana que se recarga con el número de viajes que quieras, la venden en los kioskos o también en el cámping (2€ la tarjeta + 1,25€ cada viaje). La misma tarjeta nos sirve para los dos. Nos bajamos en la parada que nos indican y caminamos hasta la plaza principal, junto al puente triple. Desde allí cruzando por el puente triple empezamos a recorrer las calles peatonales del centro.
Ljubljana encontramos que es una capital muy pequeña que se visita enseguida, pero que tiene muchísimo encanto. Nos llama la atención el aspecto austriaco de sus edificios, el barroco, el inconfundible estilo imprimido por las obras de Jože Plečnik, la limpieza de sus calles y el animado ambiente que nos encontramos en cada plaza. Dedicamos el resto de la tarde a visitar la ciudad y hacer un montón de fotos. Volvemos al cámping para cenar, damos una vuelta después y nos acostamos pronto