A las 4:00 tras tomar un café en el barco, subimos al autocar dirección a Abu Simbel. Son unas 3 horas y media de carretera, y la visita a Abu Simbel por 2 horas. Colas para acceder al recinto, fue un lugar donde sentimos por primera vez un agobio de personas en el interior del templo. Como dicen por allí, quién no va a Abu Simbel es que no ha estado en Egipto.


El calor en Abu Simbel es intenso, recomendable crema solar, sombrero gorro o algo que cubra la cabeza. Tanto al entrar al recinto como al salir se pasa por un montón de tiendecitas, donde se encuentra lo de siempre: postales, pañuelos, gorros, libros, imanes, figuritas de los templos o de faraones.
Nosotros esperamos al grupo sentados en la terraza del parquing tomando una Cola Light. Esa terraza estaba en mal estado, muy cutre, extraño que en un lugar como ese con tanta afluencia de público no tengan algo más arreglado. Y tampoco es que regalen los refrescos. Cola unas 60 libras. Y retornamos al barco.
Por cierto, muy vigilada la presa antigua de Aswan por la que debes pasar. También advertir que están asfaltando la calle principal que da a los muelles. Las obras no es que vayan a todo trapo.
Embarcamos sobre las 14:00 y a comer el bufete. Al poco el barco zarpaba en dirección a Kom Ombo, llegamos de noche, a las 18 ya era plena noche.El templo iluminado y el guía explicando, este es un templo ptolomeneico construido sobre el año 180 AC.

Allí nos enseñaron una Nilometro, pozo que usaban los antiguos egipcios para verificar las crecidas del Nilo. Por cierto nos contó el guía que si la crecida era alta, los impuestos se subían.



Anexo al Templo hay un Museo de cocodrilos embalsamados, no dejan entrar cámaras fotográficas, solo móviles. Allí era obligatorio entrar con mascarilla.
En el mismo muelle ya hay persecución de vendedores, mayoritariamente niños con pulseras (5 a 1€). Vigilada los cierres de las susodichas.
Allí tuvimos una negociación dura por dos botellas de 1,5 litros de agua, que si 2 a 20 liras o a un €. Un regateo por poco menos de 0,20€. Si es que al final ya entras en ese juego


Esa noche se celebró la fiesta de las chilabas.