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DÍA 30/07/2023
Me costó dormirme anoche. Tengo buen olfato y con tantas fogatas alrededor se creó una humareda importante en el campamento que me resultó molesta hasta cerca de las 1. Además, en la parcela de al lado se tiraron hablando también hasta esa hora. No es que armaran jaleo ni nada por el estilo, pero se oía como reían y conversaban. Eso sí, pasó un guarda forestal y les dijo que a dormir, que las horas de silencio empezaban a las 23 horas y eso hicieron.
Antes de las 7 ya estábamos de pie desayunando. Nos pusimos en marcha y fuimos al Park and Ride para dejar el coche en el aparcamiento gigantesco que tienen y coger el autobús que nos lleva al lago Louise. Tras presentar las reservas nos dan unos tickets. Tenemos mala suerte y acaba de marcharse uno de los autobuses, así que somos los primeros en subirnos al siguiente. Esperamos un cuarto de hora allí a que entre más gente. Como hay wifi la aprovechamos para hablar con la familia. Mientras gozamos de los primeros rayos solares incidiendo sobre Mt Temple y Victoria.
La excursión de hoy la tenía en la recámara desde hace mucho, en el más que probable caso de que no pudiéramos ir a la zona de Lake O’Hara. Lo que pasa es que casi todos los años, a mitad de verano, suelen restringir el acceso a grupos de 4 excursionistas o más, por la actividad osera. Por suerte, aunque te lo recomendaban, aún no era obligatorio.
El plan es coger el autobús al lago Moraine y partir de ahí hasta Sentinel Pass por Larch Valley y bajar por el otro lado hasta Paradise Valley. Desde allí iríamos a Sheol Valley, subiríamos hasta Saddleback y desde ahí descenderíamos al lago Louise donde cogeríamos el autobús de vuelta al parking.
Y eso es lo que hicimos. Tras bajar del autobús en el lago Louise, fuimos directos a la parada que nos llevaría a Moraine. En el trayecto nos dimos cuenta de que nos habíamos dejado los bastones de senderismo en el coche (: Moraine tenía gente, pero a estas horas todavía no era una romería.
Aprovechamos para subir al mirador de Moraine y hacernos unas fotos, pero no os aconsejo estas horas si queréis ver el azul intenso del lago ya que el sol no incidía sobre él en buena parte. De todas formas, le tuve que dar en algún momento al autofocus de la cámara porque no salió ni una foto enfocada.
Y ya nos pusimos en marcha. Empiezas a bordear el lago, pero a unos 200 metros ya hay una señal que indica Larch Valley y Sentinel Pass. Esto empieza a subir sin descanso, haciendo múltiples zigzags por la ladera de la montaña en un bosque de cedros y abetos que no deja vistas. A los 2.5 kms hay otro desvío para los que quieren ir al lago Eiffel y nosotros entramos inmediatamente en las primeras praderas de Larch Valley, que se pone hasta los topes de gente a finales de septiembre por los amarillentos alerces y el fondo de los Diez Picos. De estos destaca la cumbre helada de Mt. Fay.
Larch Valley. La foto no está enfocada, no me di cuenta hasta después de que el enfoque estaba en manual y no en auto
Aunque el desnivel ha bajado temporalmente seguimos subiendo hasta que nos ponemos por encima de la línea arbórea. Así tenemos ya vistas de los dos lagos Minnestima y de Sentinel Pass.
Directos a Sentinel Pass, el pase entre Pinnacle Mt (3070 metros) y Mt. Temple (3544 metros)
La subida desde Upper Minnestima Lake es un kilómetro haciendo zigzags, duro pero llevadero, más con las vistas que vas teniendo procedentes del camino hecho. En ese kilómetro oímos un ruido proveniente de arriba: una roca del tamaño de una pelota de fútbol cayendo ladera abajo. Tras gritar ¡¡Rock!! ya que hay más gente subiendo, vemos al culpable, una marmota asesina.
Vistas dirección a los Diez Picos con el Lower Minnestima Lake. Sendero con Pinnacle Mt de fondo.
Y llegamos al pase en sí mismo a 2600 metros. El paso debe su nombre al mayor obelisco de la cara norte de la montaña Pinnacle, Grand Sentinel. La vista a ambos lados es majestuosa. Allí nos tiramos unos 20 minutos descansando, tomando unas chocolatinas, hablando con la gente que va llegando al pase y con una ardilla con unas confianzas que no veas.
Vistas dirección Norte: el obelisco Grand Sentinel, con Paradise Valley al final del canchal y rodeado de montañas como Mt. Lefroy The Mitre. Vistas dirección a los Diez Picos con los Minnestima Lakes y lo que sería Larch Valley. Ardilla sin miedo a los humanos.
A pesar de que creíamos que íbamos a ser los únicos que bajáramos por el canchal, dirección Paradise Valley, no lo fuimos. Lo iniciaron unos trailrunners que iban a una velocidad asombrosa por el tipo de terreno y la pendiente, le seguimos nosotros y, luego, otros tres grupos.
El sendero es extremadamente empinado y desciende por las escarpadas laderas de talud durante algo más de dos kilómetros. El principio es lo más complicado, con algún uso de las manos, pero durante todo el trayecto hay que tener cuidado con las rocas movedizas. De todas formas, está más o menos bien señalizado con mojones de piedras el camino a seguir, hasta que está claro el mismo. Y desde mi punto de vista es mucho más fácil bajarlo que subirlo, aunque vimos algunos que lo hacían.
Empezamos el descenso: los trailrunners ya se van perdiendo por ahí abajo. Esto no se acaba
Cuando al final llegamos a un sendero de tierra y no de piedras nos tomamos un descanso. También es verdad que tenemos las primeras vistas del circo glaciar que conforman Mt. Lefroy, Glacier Peak, Ringrose Peak, Hungabee Mt. todas de más de 3275 metros y de Horseshoe glacier a sus pies.
Tomamos ya lo que es el Sendero de Paradise Valley, pero como nos sentimos con fuerzas decidimos desviarnos para Giant Steps, que son caídas de agua en escalones, a ver qué tal son.
No sé si merecen la pena, la verdad es que esperaba más. Entre ida y vuelta son 3 kms, pero hay que bajar más para ver la caída y luego, claro, hay que subir de nuevo. El camino fue casi más interesante que los Giant Steps, que están al lado del Backcountry Camp de Paradise Valley.
Cruzando el arroyo Paradise. Vistas desde lo alto de Giant Steps. Los Giant Steps
De vuelta al sendero principal de Paradise Valley nos dirigimos a Lake Annette. El camino, al pie de Mt. Temple, es al principio muy plano, con algo de descenso, entre pequeñas praderas repletas de flores y algún que otro tramo arbolado por aquí y por allá. También cruzamos pequeños canchales y finalmente nos introducimos en un bosque que en un descenso ya más pronunciado nos deja en el lago, tras otros 2.5 kms desde que conectamos de nuevo con el sendero principal del valle.
El lago es el lugar adecuado para comer. El lago Annette es realmente bonito, con un azul típico de lagos alpinos, pero con un fondo extraordinario: la cara norte del Mt. Temple, la cara que posee su glaciar. Aprovechamos incluso para mojar los pies en sus aguas heladas, para relajarlos.
Continuamos. Tras otro kilómetro y medio descendiendo hay un cartel que dice Saddleback a la izquierda. Según mi aplicación el sendero a Saddleback Pass es más adelante, como a un kilómetro, pero entre un cartel oficial del parque y la tecnología, elijo el cartel. Y, bueno, que hay un claro sendero, más estrecho eso sí.
Volvemos a sudar la gota gorda. El sendero tira para arriba como un campeón por la ladera de la montaña. Es un kilómetro hasta que el desnivel se diluye. Estamos llegando a Sheol Valley. Un valle muy pequeñito, mucho más de lo que esperaba. Eso sí, rodeado de montañas y muy solitario.
De nuevo toca subir. El cielo se está encapotando y tememos que nos pueda caer una tormenta. Los siguientes kilómetros son de continua subida por la ladera de la montaña. Menos mal que zigzaguea el camino.
Hay que subir toda la ladera de la montaña por la que caminamos haciendo eses. A mitad de la subida, con el pequeño Sheol Valley abajo
Al final llegamos al pase. Desde aquí mucha gente sube a Fairview Mt, que tenemos a nuestra izquierda en algo más de un kilómetro. O a Saddleback Mt a nuestra derecha. Nosotros ya hemos tenido suficiente subida por hoy, por lo que con una foto con Mt. Temple de fondo y luego mirando dirección a la zona de Bow River nos contentamos.
Desde aquí hubo ya 3.5 kms hasta el Lago Louise en un fuerte descenso (casi 600 metros) el cual realizamos a tramos corriendo. Las vistas casi nulas todo el tramo por estar inmersos en el bosque, por lo que sabiendo lo que sé hoy, toda la subida a Saddleback Pass me la hubiera ahorrado y hubiéramos finalizado por Paradise Valley y la carretera de Moraine a Louise (no estoy seguro si paralelamente hay un sendero)
De las pocas vistas en la bajada
Ya en el Lago Louise, con cientos y cientos de personas, nos acercamos al lago para hacer la foto de rigor. No merecía mucho la pena. El cielo cada vez estaba más oscuro y las aguas no ofrecían bonitos colores.
En la parada de autobús nos chispeó ya que estuvimos haciendo cola una media hora. Truenos también escuchábamos, por lo que por alguna zona cercana tenía que estar cayendo una buena. Una vez en el autobús comenzó a caer agua en serio, pero cuando nos dejaron en el Park and Ride ya apenas llovía.
Cogimos el coche y para el campamento. Mi sobrino tiene bastante dolorido uno de los pies. Le duele la planta del pie en un punto. Cada vez que da un paso es como si se le estuviera clavando una piedrecita, aunque no hay alguna en la zapatilla. Veremos mañana.
En el campamento tras la ducha nos dirigimos para Field, ya que toca hacer colada y sé que en Truffle Pigs Bistro & Lodge tienen lavandería porque en 2019 fue donde la hicimos. Efectivamente sigue en el mismo sitio. Como hay que esperar entre lavadora y secadora más de una hora, nos compramos allí mismo un helado que nos supo a gloria y estuvimos por los alrededores dando vueltas esperando. Tras la lavandería para el campamento para cenar y sobar Otros 24 kms a la saca.
Ruta
Antes de las 7 ya estábamos de pie desayunando. Nos pusimos en marcha y fuimos al Park and Ride para dejar el coche en el aparcamiento gigantesco que tienen y coger el autobús que nos lleva al lago Louise. Tras presentar las reservas nos dan unos tickets. Tenemos mala suerte y acaba de marcharse uno de los autobuses, así que somos los primeros en subirnos al siguiente. Esperamos un cuarto de hora allí a que entre más gente. Como hay wifi la aprovechamos para hablar con la familia. Mientras gozamos de los primeros rayos solares incidiendo sobre Mt Temple y Victoria.
La excursión de hoy la tenía en la recámara desde hace mucho, en el más que probable caso de que no pudiéramos ir a la zona de Lake O’Hara. Lo que pasa es que casi todos los años, a mitad de verano, suelen restringir el acceso a grupos de 4 excursionistas o más, por la actividad osera. Por suerte, aunque te lo recomendaban, aún no era obligatorio.
El plan es coger el autobús al lago Moraine y partir de ahí hasta Sentinel Pass por Larch Valley y bajar por el otro lado hasta Paradise Valley. Desde allí iríamos a Sheol Valley, subiríamos hasta Saddleback y desde ahí descenderíamos al lago Louise donde cogeríamos el autobús de vuelta al parking.
Y eso es lo que hicimos. Tras bajar del autobús en el lago Louise, fuimos directos a la parada que nos llevaría a Moraine. En el trayecto nos dimos cuenta de que nos habíamos dejado los bastones de senderismo en el coche (: Moraine tenía gente, pero a estas horas todavía no era una romería.
Aprovechamos para subir al mirador de Moraine y hacernos unas fotos, pero no os aconsejo estas horas si queréis ver el azul intenso del lago ya que el sol no incidía sobre él en buena parte. De todas formas, le tuve que dar en algún momento al autofocus de la cámara porque no salió ni una foto enfocada.
Y ya nos pusimos en marcha. Empiezas a bordear el lago, pero a unos 200 metros ya hay una señal que indica Larch Valley y Sentinel Pass. Esto empieza a subir sin descanso, haciendo múltiples zigzags por la ladera de la montaña en un bosque de cedros y abetos que no deja vistas. A los 2.5 kms hay otro desvío para los que quieren ir al lago Eiffel y nosotros entramos inmediatamente en las primeras praderas de Larch Valley, que se pone hasta los topes de gente a finales de septiembre por los amarillentos alerces y el fondo de los Diez Picos. De estos destaca la cumbre helada de Mt. Fay.
Larch Valley. La foto no está enfocada, no me di cuenta hasta después de que el enfoque estaba en manual y no en auto
Aunque el desnivel ha bajado temporalmente seguimos subiendo hasta que nos ponemos por encima de la línea arbórea. Así tenemos ya vistas de los dos lagos Minnestima y de Sentinel Pass.
Directos a Sentinel Pass, el pase entre Pinnacle Mt (3070 metros) y Mt. Temple (3544 metros)
La subida desde Upper Minnestima Lake es un kilómetro haciendo zigzags, duro pero llevadero, más con las vistas que vas teniendo procedentes del camino hecho. En ese kilómetro oímos un ruido proveniente de arriba: una roca del tamaño de una pelota de fútbol cayendo ladera abajo. Tras gritar ¡¡Rock!! ya que hay más gente subiendo, vemos al culpable, una marmota asesina.
Vistas dirección a los Diez Picos con el Lower Minnestima Lake. Sendero con Pinnacle Mt de fondo.
Y llegamos al pase en sí mismo a 2600 metros. El paso debe su nombre al mayor obelisco de la cara norte de la montaña Pinnacle, Grand Sentinel. La vista a ambos lados es majestuosa. Allí nos tiramos unos 20 minutos descansando, tomando unas chocolatinas, hablando con la gente que va llegando al pase y con una ardilla con unas confianzas que no veas.
Vistas dirección Norte: el obelisco Grand Sentinel, con Paradise Valley al final del canchal y rodeado de montañas como Mt. Lefroy The Mitre. Vistas dirección a los Diez Picos con los Minnestima Lakes y lo que sería Larch Valley. Ardilla sin miedo a los humanos.
A pesar de que creíamos que íbamos a ser los únicos que bajáramos por el canchal, dirección Paradise Valley, no lo fuimos. Lo iniciaron unos trailrunners que iban a una velocidad asombrosa por el tipo de terreno y la pendiente, le seguimos nosotros y, luego, otros tres grupos.
El sendero es extremadamente empinado y desciende por las escarpadas laderas de talud durante algo más de dos kilómetros. El principio es lo más complicado, con algún uso de las manos, pero durante todo el trayecto hay que tener cuidado con las rocas movedizas. De todas formas, está más o menos bien señalizado con mojones de piedras el camino a seguir, hasta que está claro el mismo. Y desde mi punto de vista es mucho más fácil bajarlo que subirlo, aunque vimos algunos que lo hacían.
Empezamos el descenso: los trailrunners ya se van perdiendo por ahí abajo. Esto no se acaba
Cuando al final llegamos a un sendero de tierra y no de piedras nos tomamos un descanso. También es verdad que tenemos las primeras vistas del circo glaciar que conforman Mt. Lefroy, Glacier Peak, Ringrose Peak, Hungabee Mt. todas de más de 3275 metros y de Horseshoe glacier a sus pies.
Tomamos ya lo que es el Sendero de Paradise Valley, pero como nos sentimos con fuerzas decidimos desviarnos para Giant Steps, que son caídas de agua en escalones, a ver qué tal son.
No sé si merecen la pena, la verdad es que esperaba más. Entre ida y vuelta son 3 kms, pero hay que bajar más para ver la caída y luego, claro, hay que subir de nuevo. El camino fue casi más interesante que los Giant Steps, que están al lado del Backcountry Camp de Paradise Valley.
Cruzando el arroyo Paradise. Vistas desde lo alto de Giant Steps. Los Giant Steps
De vuelta al sendero principal de Paradise Valley nos dirigimos a Lake Annette. El camino, al pie de Mt. Temple, es al principio muy plano, con algo de descenso, entre pequeñas praderas repletas de flores y algún que otro tramo arbolado por aquí y por allá. También cruzamos pequeños canchales y finalmente nos introducimos en un bosque que en un descenso ya más pronunciado nos deja en el lago, tras otros 2.5 kms desde que conectamos de nuevo con el sendero principal del valle.
El lago es el lugar adecuado para comer. El lago Annette es realmente bonito, con un azul típico de lagos alpinos, pero con un fondo extraordinario: la cara norte del Mt. Temple, la cara que posee su glaciar. Aprovechamos incluso para mojar los pies en sus aguas heladas, para relajarlos.
Continuamos. Tras otro kilómetro y medio descendiendo hay un cartel que dice Saddleback a la izquierda. Según mi aplicación el sendero a Saddleback Pass es más adelante, como a un kilómetro, pero entre un cartel oficial del parque y la tecnología, elijo el cartel. Y, bueno, que hay un claro sendero, más estrecho eso sí.
Volvemos a sudar la gota gorda. El sendero tira para arriba como un campeón por la ladera de la montaña. Es un kilómetro hasta que el desnivel se diluye. Estamos llegando a Sheol Valley. Un valle muy pequeñito, mucho más de lo que esperaba. Eso sí, rodeado de montañas y muy solitario.
De nuevo toca subir. El cielo se está encapotando y tememos que nos pueda caer una tormenta. Los siguientes kilómetros son de continua subida por la ladera de la montaña. Menos mal que zigzaguea el camino.
Hay que subir toda la ladera de la montaña por la que caminamos haciendo eses. A mitad de la subida, con el pequeño Sheol Valley abajo
Al final llegamos al pase. Desde aquí mucha gente sube a Fairview Mt, que tenemos a nuestra izquierda en algo más de un kilómetro. O a Saddleback Mt a nuestra derecha. Nosotros ya hemos tenido suficiente subida por hoy, por lo que con una foto con Mt. Temple de fondo y luego mirando dirección a la zona de Bow River nos contentamos.
Desde aquí hubo ya 3.5 kms hasta el Lago Louise en un fuerte descenso (casi 600 metros) el cual realizamos a tramos corriendo. Las vistas casi nulas todo el tramo por estar inmersos en el bosque, por lo que sabiendo lo que sé hoy, toda la subida a Saddleback Pass me la hubiera ahorrado y hubiéramos finalizado por Paradise Valley y la carretera de Moraine a Louise (no estoy seguro si paralelamente hay un sendero)
De las pocas vistas en la bajada
Ya en el Lago Louise, con cientos y cientos de personas, nos acercamos al lago para hacer la foto de rigor. No merecía mucho la pena. El cielo cada vez estaba más oscuro y las aguas no ofrecían bonitos colores.
En la parada de autobús nos chispeó ya que estuvimos haciendo cola una media hora. Truenos también escuchábamos, por lo que por alguna zona cercana tenía que estar cayendo una buena. Una vez en el autobús comenzó a caer agua en serio, pero cuando nos dejaron en el Park and Ride ya apenas llovía.
Cogimos el coche y para el campamento. Mi sobrino tiene bastante dolorido uno de los pies. Le duele la planta del pie en un punto. Cada vez que da un paso es como si se le estuviera clavando una piedrecita, aunque no hay alguna en la zapatilla. Veremos mañana.
En el campamento tras la ducha nos dirigimos para Field, ya que toca hacer colada y sé que en Truffle Pigs Bistro & Lodge tienen lavandería porque en 2019 fue donde la hicimos. Efectivamente sigue en el mismo sitio. Como hay que esperar entre lavadora y secadora más de una hora, nos compramos allí mismo un helado que nos supo a gloria y estuvimos por los alrededores dando vueltas esperando. Tras la lavandería para el campamento para cenar y sobar Otros 24 kms a la saca.
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