Navidad y Fin de Año en Cuba 2021 ✏️ Blogs de Cuba

A las 8:00 nos venía a recoger un taxi, que nos llevaría hasta La Habana, luego allí, haríamos cambio de taxista, que nos acercaría hasta nuestra casa en Playa Larga.
Aún retumbaban en mi cabeza las palabras del taxista de La Habana que encontramos a fuera de nuestra casa de Viñales, pensaba que con Aniel, seguro que hubiéramos conseguido mejor precio, pero a lo hecho pecho.
El desplazamiento de Viñales a Playa Larga, nos costaba 160€ del ala, no habíamos conseguido autobús, la verdad es que hasta que haya mas turismo, los servicios que encontramos en Viñales, estaban bajo mínimos, todo estaba arrancando después de casi 2 años cerrados a cal y canto.
Decir que después del trayecto de Viñales a Playa Larga, pienso que no son tan caros los 160€, son 5 horas de trayecto, en España lo mismo, seguro que cuesta mucho mas.
Pero claro, si hubiera alquilado el coche en su momento, nos salía por 65€ diarios, seguro incluido. Lo habríamos alquilado por 13 días, que el total salía por 845€.
Como no consiguiera mejores precios con los taxis, la broma nos saldría cara.
Al final del viaje, decir que lo que nos gastamos en taxis, mas el único autobús que pillamos de La Habana-Viñales, nos salió todo por 854€, sin tener que pagar gasolina, ni parqueos varios, que hubiéramos tenido que pagar con nuestro coche de alquiler.
Podríamos decir que fue un empate técnico, pero eso si, hubo días en que no usamos taxi (Cayo Coco en el todo incluido) otros que tuvimos suerte de encontrar buenos precios y otros días que no quisimos ir a según que desplazamiento para no tener que pagar mucho.
Aunque me ha gustado mucho conocer taxistas , que te ayudan y explican algunas cosas, me hubiera gustado mas tener mi coche de alquiler, te da mucha mas libertad y tal vez habría ido a según que sitios mas, que sin tener coche no quisimos ir, para no salirnos del presupuesto.


Salimos a las 8:00 de Viñales y sobre las 13:00 estábamos en Casa Frank.
Esta casa la encontré en la web alojamientosencuba.com por 25€ la noche los 4.


La primera impresión no fue muy buena, no por la casa, si no por donde estaba. Cuando vi las fotos en la web, pensé que la casa estaba a primera línea del mar, pero el sitio donde nos dejó el taxi, eran como 4 o 5 calles sin asfaltar, con casa muchas de ellas bastante destartaladas.
Nos presentamos a Wislay, la mujer de Frank, que muy amable nos explicó todo, enseñó desde la terraza, como llegar a la Playa.
Desde la terraza se veía un poco el mar, allí también tenían una pequeña barra de bar, un "jacuzzi", bueno mas bien una bañera preparada para que hiciera burbujas, desde luego de lo que era nuestro barrio por decir algo, Casa Frank, junto con otra, que también tenía bar y habitaciones, eran lo mejor que había por allí.
Después de instalarnos, decidimos ir hasta la playa, de camino vimos el tanque que según ellos disparó Fidel para hundir un barco de las fuerzas invasoras que Estados Unidos apoyaba. En otros sitios, dicen que el tanque es el está delante de Museo de La Revolución en La Habana.
Encontramos la playa y su entorno casi vacío, éramos nosotros y otra familia de cubanos que se hospedaban en el hotel que está a primera línea de la playa, también parecía un hotel fantasma, piscina sin agua, ninguna habitación hacía pensar que tenía clientes, otra vez los turistas escaseaban y ambiente cero.
Era la hora de comer y fuimos al único sitio abierto que había en la playa, que era el bar-restaurante del hotel fantasma, por suerte estaba abierto, con 2 o 3 mesas ocupadas, justo en la entrada tenían una pizarra con los platos que tenían y sus precios.
Vaya sorpresa, todo era baratísimo, los tragos :mojitos, piña colada, cuba libre etc.. a 75 cups (menos de 1€) platos de pescado, pollo, cerdo etc.. a no llegaban a 300cups.


Nos quedamos a comer y la cuenta subió a 800 y pico cups, un regalo para nosotros, poco mas de 10€.
Resulta que el Hotel Horizontes Playa Larga, es del estado y su restaurante también, por eso tenía estos precios tan baratos.
Esta vez si, el servicio no fue muy lento y todo estaba rico.

Preguntamos si por la noche estaba abierto, pero nos contestaron que no.
Al llegar a la casa, reservamos la cena para la noche.
Resultó un poco mas caro que un restaurante, unos 700 y pico pesos por plato, pero también entraba una sopa de primero y postre incluido, la bebida no estaba incluida.
Antes de arreglarnos para cenar, las niñas estrenaron el "jacuzzi" que no había manera de llenar del todo de agua, es muy grande y tardas un montón en llenarlo, luego, los chorros que en teoría tenían que hacer burbujas no funcionaron, pero bueno ellas se lo pasaron en grande.
Mientras ellas jugaban con el agua, apareció un chico para empezar a preparar lo que era el bar de la casa. Le pedí precio de los mojitos, me comentó que salían por 2€ o 160cups, buen precio pensé.
No teníamos mucho que hacer, así que pedí un mojito, resultó que los mojitos que nos preparó esos días el Pulga en Casa Frank, fueron los mejores de todo el viaje.
Muchos de los mojitos que habíamos probado en La Habana (Incluido el de la Bodeguita) y Viñales, no habían sido muy buenos, en Menorca los hemos probado mucho mejores, pero por fin en Playa Larga, encontramos a nuestro mejor Barman.
El Pulga tiene a su madre que vive en Oviedo y en mayo 2022 tiene previsto venir a vivir a España con ella.
Es un empleado de Frank y está digamos que cansado ya de vivir en Cuba. Es un fuera de serie y seguro que en España le irá bien.
Como no, después de cenar charlamos con el, éramos los únicos clientes y le pregunté si la gente del pueblo venía al bar de la casa o no, el respondió que normalmente no, pero que si no nos importaba podía avisar a un primo y su novia, para que vinieran, a lo que accedimos, las 2 noches que estuvimos en Casa Frank, nos lo pasamos muy bien y fue donde mas bebimos, sus mojitos fueron insuperables.

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La tarde anterior, habíamos acordado con Frank, tener un taxista para nosotros todo el día por 4000cups, de las 8:30 a las 17:00.
Resultó que el taxista era su hijo Francis.
También vimos que la otra casa de la misma calle, en que había un bar y habitaciones, también estaba al cuidado de Frank, así que Frank tenía casi todo el negocio para los turistas controlado. Mas tarde supimos, que la otra casa era de su hermano que vive en Miami, parece que el hermano tiene varios negocios en Estados Unidos y Frank cuida de su negocio en Cuba.
Después de un desayuno que aquí también, nos dieron por 10€/día los 4. La verdad muy completo. Nos pusimos en marcha.
La primera visita del día, fue visitar una casa, que en su día plantaron un árbol, donde los Zunzuncitos (el ave mas pequeño del mundo) colibrís y otros pájaros van a alimentarse.
Ahora el hijo del señor que plantó el árbol, cuida de que a los pájaros no les falta de nada, les pone bebedoras con agua y azúcar, nidos etc... para que los animales no se vayan muy lejos de su casa. No cobra entrada, se da la voluntad, nosotros le dimos 200cups, estuvimos casi una hora, ya que es curioso como los pájaros vienen a alimentarse y llama la atención lo pequeñitos que son.
Después nos dirigimos al criadero de cocodrilos, que está junto al embarcadero, donde las barcas te transportan a la aldea taína que hay en una zona de la Ciénaga de Zapata.
Se nota, que es un lugar bastante turístico, tiene un buen parking para autobuses y capacidad para bastantes coches, la entrada está presidida con un restaurante enorme, con 2 tiendas de souvenirs, pero el parking está prácticamente vacío, tan solo hay un autobús de Transtur y tal vez 4 coches, no sé si era por la hora o que, eran las 10:00, pero como nos ha pasado en general durante todo el viaje en Cuba, hay muy pocos turistas.


Fuimos directos al embarcadero, costaba 300cups por barba, cada barca tiene capacidad para 8 personas y si no está llena, no sale o tienes que pagar el resto que falta si quieres salir. Como no venía nadie, nos fuimos al criadero, ya volveríamos después al embarcadero.
Nos hacía ilusión visitar la Aldea Taína, por que la noche anterior el primo del Pulga y su novia, nos dijeron que eran ingenieros y que trabajan en la obra de la reconstrucción de la Aldea.
Entramos al criadero, 150 cups por barba.
Dentro del criadero, se nota que es bastante turístico, los precios de las tiendas de souvenirs, artesanía, ropa etc... está en euros y bastante caro todo.
Vimos que tenían cocodrilos pequeñitos, si querías, pagando podías hacerte una foto con una cría en las manos, no preguntamos precio, no quisimos hacernos la foto, tenían a la pobre cría con un sombrerito de mimbre en su cabeza
El camino te va llevando hasta una gran zona húmeda, que la tienen rodeada con una pared y rejas, donde tienen a unos 40 o 50 cocodrilos grandes.


Allí también, el que quiera, pagando, tiene una caña de pescar, donde tienen puesto un buen trozo de pescado, para así poder dar de comer a los cocodrilos. Delante de nosotros una familia de cubanos que estaban de vacaciones, las usaron, haciendo saltar los cocodrilos para poder pillar el cacho de comida.
Los cocodrilos cuando cierran la boca y no se llevan nada a la boca, hacen un ruido hueco muy peculiar.

Nos dirigimos al embarcadero, pero allí no había nadie esperando y tampoco se veía previsión que llegara alguien, no quisimos esperar y otra cosa que dejamos en el tintero, para un próximo viaje a Cuba tendrá que ser el ver la Aldea Taína.
Dirección a la Cueva de los Peces, al lado de la carretera, vimos bastantes tumbas de los combatientes que fallecieron en la contienda del desembarco de Bahía Cochinos, las tienen bastante cuidadas, supongo que deben ser héroes nacionales.
Durante el recorrido, había una entrada hacía el mar a la que no se puede acceder, Francis me comentó que por allí se iba al Cayo de Fidel. Era zona militar, por ahí nadie podía pasar, aquel camino se dirigía a un embarcadero, donde siempre había un barco, para llevar a Fidel si aparecía por allí, ahora llevan a quien sea que pueda ir hasta Cayo Piedra, un cayo en una punta de las afueras de la bahía.
También por la existencia de ese cayo, están prohibidas todas las embarcaciones a motor, la única embarcación a motor de la zona, es la que te lleva hasta Cayo Piedra.
No recuerdo bien, si era antes de la pandemia (hace unos 2 años) o durante la pandemia, me comentó Francis, que un día, aquello se llenó de militares por todos sitios, desde Playa Larga a Caleta Buena, había un gran despliegue militar y se dice que es por que hubo una reunión "secreta" en Cayo Piedra entre Putin y Maduro. Los presidentes de los dos países, políticamente mas afines a los dirigentes cubanos.
Llegamos a La Cueva de los Peces, un lugar que no nos entusiasmó mucho, las niñas no se quisieron bañar en sus aguas un poco oscuras, así que, cruzamos la carretera, para bañarnos en el mar, justo delante de la entrada al camino que te lleva a la cueva.

Hicimos snorkel, que tampoco fue nada del otro mundo, al menos nos refrescamos con el baño.
Continuamos camino, siguiente destino Girón, no quisimos ir a Punta Perdiz.
Un restaurante buffet, en el que te puedes bañar en la zona del restaurante, creo que con barra libre, en su parking vimos que había 3 autobuses de Transtur.
En Girón visitamos el Museo de la Revolución, que no se si era por la hora, sobre las 13:00 o que no hay mucho turismo, encontramos cerrado. Desde fuera se pueden ver 3 tanques y un avión que actuaron en la contienda del desembarco.
Visitamos fugazmente Playa Coco, en Girón, pero no nos apetecía quedar allí, había un poco de oleaje, aunque la playa no estaba mal.


Tan solo quedaba llegar hasta Caleta Buena, otro restaurante buffet todo incluido, donde se puede bañar en una zona de rocas, donde dicen se puede ver un buen snorkel.
Aquí si paramos, pero el precio que nos pidieron era el de 1200cups adultos y 800cups niños.
Creo que antes de la pandemia, ya costaba 15cucs, así que ellos aquí si, han hecho ellos mismos el cambio de 80cupsx€ y cuesta lo mismo que antes. Al ser ya la 13:30, pensamos que poco aprovecharíamos la barra libre y el snorkel, en caso de ir a uno de estos sitios, pienso que se tiene que ir a primera hora, para así tirarte el día allí, comiendo y bebiendo como un cosaco
Le dijimos a Francis que nos llevara a un buen restaurante de las 3B.
Nos llevó al restaurante Girón Especial, no tengo fotos, pero comimos un pescado enorme, langosta, arroz como siempre te ponen un bol que no hay quien se lo acabe, todo por unos 1600 cups los 4.
Para acabar la tarde, fuimos a la playa de los Trailers, una playa que los residentes de la zona suelen ir bastante, lo curioso es que se llama así, por que las casas que hay, están hechas de contenedores (Trailers) de mercancías, restos de barco también, algunas casas están bastante bien cuidadas y otras bastante deterioradas, como en general las casas que hay en el resto de Cuba.
Esa noche, no tocaba beber ni un mojito o bueno como mucho uno, la noche anterior, con el Pulga y su primo, habíamos bebido mas de la cuenta.
Pero una cosa lleva a la otra y otra vez sucumbimos a sus mojitos, en serio, los mejores que probamos en todo el viaje, El Pulga también es una persona muy agradable, volvimos a coincidir con el primo y su novia, otra velada muy buena, hablando un poco de todo, su nueva vida en España, la vida que allí tienen etc..
Nos dimos los número de teléfono, instagram etc.. veremos si algún día volvemos a coincidir en algún lugar.

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Nos despedíamos de Casa Frank y el Entronque de Playa Larga.
El Pulga vino a despedirse y nos prometimos que algún día nos volveríamos a ver, el destino dirá si se cumple la promesa.
Toda la zona de Playa Larga en si, no es que fuera de lo mejor del viaje, pero si que disfrutamos mucho de las personas que conocimos.
Tal vez, sea mas un sitio al que ir a bucear, dicen que es buena zona y hay empresas para ello, nosotros no buceamos. También debe ser un espectáculo ver cuando los cangrejos que viven en la ciénaga, cerca de la Cueva de los Peces, salen en manada, cruzando la carretera para ir a desovar al mar, esto se produce entre abril y junio, nosotros de cangrejo no vimos ni uno

La tarde anterior, pedí a Frank precio para taxi a Cienfuegos y me dijo que 70€ era lo que costaba.
Le protesté, por que el día anterior, habíamos tenido su hijo con el taxi de 8:30 a 17:00 horas y nos había cobrado 4000cups (al cambio unos 50€) como podía ser que ahora por unas 2 horas de viaje, me cobraba mas, que estar todo el día con nosotros.
Se defendió, en que si hay muchos kilómetros, que si todo el mundo cobra esto, que si esto y lo otro.
Le dije, que habíamos estado en su casa, desayunado, cenado , consumiendo en su bar, cenamos la otra noche, pizzas de la casa de su hermano, me había pedido euros y le iba a cambiar 150€ a cups (por supuesto a 80cupsx€), ellos les hacen falta los euros, nos hacemos un favor mutuo, le pedí que por favor me hiciera rebaja a 50€.
Tu mucho business me decía riendo, siempre business.
Al final lo dejamos en 55€ pero en euros . A lo que accedí.



A las 9:00 salimos con Francis dirección nuestro nuevo destino, la ciudad de Cienfuegos.
Teníamos reserva con la casa de Ania y José.
Por el camino, nos encontramos en que durante 3 o 4 kilómetros de la carretera, un carril estaba ocupado por arroz. Lo tiran en la carretera, para que se seque con el sol , lo que hace que en caso de tener que adelantar, como hicimos nosotros a un carro con caballos, medio coche, con sus correspondientes ruedas, pase por encima del arroz supongo que deben perder algunos kilos al cabo del día, por que lo que hicimos nosotros, se debe repetir unas cuantas veces a lo largo del día, lo bueno de Cuba, es que las carreteras no tienen tránsito, son muy tranquilas.

La casa de Ania y José, está ubicada en primera línea de la bahía de Cienfuegos, al lado del Club Cienfuegos, una especie de club náutico, con piscina, pistas de tenis, restaurante, bar etc.. Es una zona un poco exclusiva, que viene después del malecón, donde hay bastantes casas muy chulas, queda un poco lejos del centro, pero con un paseo o los tuctuc que hay en la ciudad, por 100 pesos te llevan hasta donde empieza el boulevard.
También muy cerca está el Palacio de Valle, que ahora mirando las fotos, parece que no le hicimos ninguna, cuando es uno de los edificios mas emblemáticos de Cienfuegos

La casa de Ania y Jose, fue la casa que por primera vez no hubo mucho feeling.
No es que fuera nada malo, pero no hubo mucha comunicación. Desde que la reservé a través de Airbnb por 34€ la noche, solo me contestaron un mail. Justo al salir de España, les avisé que si querían, para comunicarse mejor hablar por watsaap, ya que es mas cómodo, pero ni me contestaron y en todo el viaje, tampoco nunca me preguntaron al menos a que hora llegaríamos, cosa que si hicieron todas las otras casas.
También, les comenté que de 2 desayunos comeríamos 4, a lo que no lo entendían muy bien, que pensaban que desayunaríamos los 4 , que las niñas no se qué, le comenté a José, que no se preocupara, que hiciera 2 platos de fruta, 2 zumos, 1 café (soy el único que lo tomo) 2 huevos o lo que entrase en el desayuno, que hiciera tan solo 2 de cada, que nosotros ya nos lo repartiríamos. Entiendo que ellos, donde ganan dinero es en los desayunos y cenas, pero encuentro caro pagar 20€ de desayuno para los cuatro, cuando las casas la noche suele costar 25 o 30€, en porción sale mas caro el desayuno que la estancia, además, realmente a nosotros no nos hace falta tanto desayuno, no comemos tanto y es una lástima que sobre tanta cosa.


Después de instalarnos, no teníamos ningún plan en concreto y caminando, no nos dimos cuenta, que llegamos al centro, paseamos un poco por lo que es el boulevard, Paseo del Prado y de vuelta al malecón, sobre las 14:00, ya habíamos visitado lo que parecían la mayoría de sitios importantes de la ciudad, así que pillamos un tuctuc dirección la casa, nos pondríamos los bañadores y nos iríamos a la piscina del Club Cienfuegos.
Pero para poder entrar, con todo el tema Covid, se tiene que reservar la visita un día antes, así que no pudimos entrar, nos dirigimos al Hotel Jagua, que está muy cerca y tampoco se pudo, también se tenía que reservar un día antes.
Un guardia de seguridad del hotel, nos recomendó ir a la playa Rancho Luna, que está a unos 17 kilómetros, por 10€ ir y otros 10€ volver, fuimos en taxi.
Pasamos la tarde allí, pero el plan no nos gustó mucho, una playa sin mas.
Por la noche, volvimos al centro, en busca de algo que cenar y dar un paseo, aquí sin darnos cuenta, sufrimos un medio timo o digamos que nos dejamos aconsejar un restaurante, que al final era para turistas.
En el Paseo del Prado, a la altura de la estatua de Beni Moré (un cantante cubano muy famoso, que nosotros no conocíamos ) sin venir a cuento, un señor nos dice que no vayamos a esa pizzeria, que las mejores están en otra, en una calle cerca, que aquella que él dice, siempre está llena.
Nosotros le dijimos, que no mirábamos la pizzeria, que estábamos paseando.
¿Son españoles? o yo estuve en las olimpiadas de Barcelona 92,me llamo Julio González,
era boxeador, ahora tengo un gimnasio aquí al lado bla, bla, bla,
Seguimos paseando sin ton ni son, al cabo de 1 hora, nos propusimos ir a cenar a algún sitio, así que recordamos las palabras del boxeador y nos fuimos a la pizzeria que nos había recomendado.
Cuando llegamos, estaba el sentado en una mesa cenando con una chica, nos sonrió y nosotros también le sonreímos, nos sentamos y nos trajeron la carta.
Cuando vimos los precios, nos dimos cuenta que los precios eran altos, no habíamos mirado antes de entrar los precios, confiando con aquel hombre y ahora estábamos sentados allí sin saber que hacer, no supimos levantarnos y decir que no nos interesaba, para quedar bien, pedimos una pizza, que estaba a 500 cups la margarita, algunos platos principales rondaban los 1000cups o 800cups, también ponían el precio al lado en dólares, claramente aquel lugar, era para turistas, las 2 mesas que había con gente, también eran extranjeros.
Lo que valía la pizza 500cups, son unos 6 euros, en España es barato, pero en Cuba es carísima.
Salimos de allí pitando, no sin antes despedirme de Julio, al que le dije: aquí no hacen las mejores pizzas, las pizzas son malas y a precio de turista, hasta luego, me miró con una sonrisa en la cara.
Luego en el mismo paseo del prado, había un restaurante con la carta fuera, miré el precio de las pizzas y estaban a partir de 180cups, hasta llegar a 200 y pico. Por tanto, antes de sentarse en según que lugar, siempre, si se puede consultar la carta menú.
Por cierto, he mirado internet y Julio González, si fue un boxeador Cienfueguero que fue a Barcelona 92, pero viendo sus fotos, puedo asegurar que no es el señor que nos engañó.


Digamos que en Cienfuegos no pasamos nuestro mejor día, ni la ciudad, ni la casa, ni la playa Rancho Luna, ni el restaurante por la noche, fue del todo de nuestro agrado.
Al día siguiente en Trinidad, conocimos a David y Daniela, una pareja de colombianos, que se hospedaron en nuestra casa de Trinidad, que en cambio les encantó Cienfuegos.
Ellos después de recorrer la ciudad, acabaron el día en un bar-restaurante junto al mar, muy chulo, que también tenía piscina, del cual no recuerdo el nombre, pero era tan solo cruzar la calle al otro lado, del Hotel Jagua, donde estuvimos nosotros, pero que no supimos ver o encontrar.
Así que todo depende de la suerte o de lo que encuentres, para que un sitio sea bonito, espectacular o un desastre, a veces no siempre todo va bien.


Para nosotros, lo mejor de Cienfuegos, fue el taxista que conseguimos para el día siguiente llevarnos hasta el Nicho. Se quedó con nosotros el tiempo que fuera necesario, para luego llevarnos a Trinidad.
Llegamos a un acuerdo de 3000cups , para recogernos a las 9:00 para dejarnos en Trinidad, sobre las 16:30, por horas y kilometraje realizado, el taxi mas barato de todo el viaje.
Además, el coche era un Hunday Tucson de unos 10 años como mucho, uno de los coches mas nuevos en los que viajamos en Cuba.
El taxista se llama Rafael, no es el jefe, parece que el jefe y el, se turnan en llevar el coche.
Dejo aquí su teléfono, por si ha alguien le interesa +53 58728697

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