Nuevamente despertamos cerca de las 5:00 de la mañana. Intentamos dormir un poco más, pero lo dejamos por el intento. Nos levantamos, duchamos y no desayunamos lo que teníamos en la habitación. Teníamos que comer de verdad aunque no tuviéramos ganas. Pues al 7eleven otra vez, y otra vez comimos un parte de tostadas, bebemos unos yogures, unas galletas y preparados para el día. Eran las 6:30 y volvimos al hotel a por unas bicis. Ya tenía el itinerario del día y los templos que quería visitar estaban algo apartados del centro. Lo mejor es alquilar una bici en el hotel por todo el día (el nuestro las tenia). Confirmad que están en buen estado, que frenan bien. Tenía programado una ruta de 5 / 6 horas, podía ser más, podía ser menos… teníamos tiempo de sobra hasta las 14:00, que era cuando pretendía seguir viaje. Nos llevamos una mochila, con las aguas, cámara fotográfica y el dinero.
Como he comentado antes, justo al lado del Hotel empezaba lo que se considera el centro histórico (Wat Ratburana), con los principales templos. Sin embargo tenía 3 locales más apartados que quería visitar. Y cuando digo apartados digo apartados del hotel y principalmente entre ellos, como veremos de seguida.
Lo primero que visitamos fue (por motivos horario de apertura) el Wat Phanan Choeng. Este es un templo budista, que se encuentra en la zona este del rio Chao Phraya, a cerca de 1,5km del centro histórico de Ayuthaya (en bici llegas en un par de minutos).
Este templo alberga un buda dorado (en posición sentado / Lotus) de 19 metros de alto. Cuando llegamos estaban preparando la fiesta de Loi Krathong (estamos a día 6 de Noviembre, justo el día de la Luna Llena). Interesante era que en este templo existe una gran influencia china, por lo que podíamos ver varios altares, construidos para este día especifico, de deidades chinas. Estaban ensayando un cortejo de dragones, que fue interesante de observar. Sin embargo el objetivo era ver la estatua gigante. El buda impresiona, es realmente precioso y como el templo tenía apenas gente, podías caminar y mirarlo todo con una calma que no había podido sentir en Bangkok.
Tras esta pequeña visita, nos dirigimos al Wat Chai Wattanaram (unos 3 km del templo anterior, en el lado opuesto de la ciudad). Se trata de un complejo precioso, a pesar de la destrucción que sufrió después de la invasión de los birmaneses, del estilo Khmer (cómo no!), compuesto por una zona central o prang de 35 metros rodeada de 8 chedis interconectados por pasadizos rectangulares. Podéis encontrar muy pocas estatuas de buda completas y otras decapitadas. El conjunto es muy bonito y a la hora que llegamos estábamos solos, por lo que por primera vez, rodeados del rio, jardines bien cuidados y el maravilloso templo, pude sentir la tranquilidad un local religioso en Tailandia. Lo he apreciado mucho, y lo veo como visita obligatoria en Ayutthaya aunque esté un poco más apartado del circuito central.
Nos dirigimos al Wat Lokaya Sutha, un poco más al norte (1km). De todo lo que he visto en Ayutthaya fue lo que menos me gusto por el stress que me causó. Se trata de unas ruinas de un templo del que me interesaba ver únicamente el buda acostado, que se encuentra al aire libre. En cuanto llegamos teníamos un grupo de mujeres esperando a los turistas. Una coge nuestras bicis y las guarda, las otras te tiran de los brazos, te ponen unas flores de Lotus en la mano y unos inciensos, además de una pequeña hojita de pan de oro. Les pagas 20 bahts por eso (no es obligatorio pero me cogieron tan desprevenido que no sabía qué hacer) te enseñan a agradecer al Buda, encender el incienso y para dar suerte pegan la hojita de pan de oro en una pequeña estatua. Luego sin más, sacan una decena de medallitas que te quieren vender por 200 bahts cada una… para dar suerte dicen. Que agobio. No te sueltan por nada de este mundo. Le compro 5 medallitas a una de las señoras, que ya me estaba sacando del estado de paz que había adquirido minutos antes, eso sí, le pagué 75 bahts por cada una y no 200. Ni loco. Al final me dejan en paz, pero cuando me doy cuenta mi compañero tiene una señora literalmente agarrada a su pierna! Que quería venderle una medallita más, que tenia la hija enferma y no sé que más… Mi compañero, sensible a eso, le dice que ok, le paga los 200 Bahts que pide por una medalla, no quiso regatear… pero le da 500 Bahts! La señora se va toda contenta y mi compañero detrás de ella pidiendo el cambio… ella intenta ignorar y hacerse la tonta… que risa me dio. Al final logró que le diera el cambio y no que le intentara dar otra medalla. Estresante el momento pero gracioso, al día de hoy me parto de la risa recordando esa escena.
Después de esta situación, única en todo el tiempo que estuve en el centro histórico, nos dirigimos al Wihaan Mongkhon Bophit que contiene un Buda de bronce de 17 metros de altos. Es un templo moderno, bonito y lleno de gente.
Al lado teníamos el Wat Phra Si Sanphet, otro templo en ruina. Lo vimos bastante rápido una vez que nuestro próximo destino principal era el Wat Mahathat, donde se encuentra el imagen más fotografiada de Ayutthaya, la cabeza del buda envuelta en las raíces de un árbol (que según cuentan) creció alrededor de la misma (hay quien diga que la cabeza fue colocada allí. Una u otra razón, no importa… el tema es que la imagen es preciosa.
A última hora me acordé de un templo que no habíamos visitado, y que para mí era obligatorio… estaba cerca del Wat Phanan Choeng, menos de 1 km, por lo que decidimos ir para una visita rápida. En este templo podéis ver una bonita “avenida” de budas sentados (estos con cabezas) y un enorme buda acostado. Me felicité por haberme acordado de esa parada y no irme sin verlo, porque es realmente bonito, y total, pierdes tan solo una media hora para darte una vuelta por el recinto.
Terminamos nuestra visita al centro histórico dando una vuelta por el Wat Ratburana, muy cerca de nuestro hotel, y finalmente devolvimos las bicis. Eran las 13:00 (justo habíamos estado “paseando” casi 6 horitas por todo el parque. Ya habíamos hecho el check out del Hotel (antes de salir con las bicis) y teníamos nuestras cosas metidas en el coche que estaba aparcado dentro del recinto del hotel. Así que estaba todo preparado para el viaje de unos 330 km que nos esperaba hasta Sukhothai.
Esa misma noche en Sukhothai se celebraría la gran fiesta de Loi Krathong en el respectivo parque histórico. En internet, un par de meses antes, me había informado de las fechas y horas de las celebraciones, así como de todos los eventos que tendrían lugar. A partir de las 18:00 empezarían cortejos de Krathongs, oraciones, dos espectáculos de Luz y sonido en uno de los templos principales, sobre la historia de Sukhothai, y la ceremonia de los Krathongs con fuegos de artificio en el final. Quise comprar las entradas para el espectáculo de luz y sonido, lo había visto en youtube y me pareció merecedor de una visita, así que compré los billetes por internet y obtuve un voucher que me permitiría cambiar por las entradas (para el espectáculo de las 21:00, una vez que el otro era a las 19:00) en el proprio parque histórico.
Estábamos ya en Sukhothai y el GPS me indica donde debo entrar (para mi hotel)… una entrada preciosa, una habitación enorme con otras tantas alrededor, muy bien cuidado. Solo tenía un sitio para meter el coche, pero lleno de barro… lo metí ahí mismo. Me llega una chica muy sonriente y la miro y pido que me indique la zona para el check in (con todas las maletas en cima), a lo que ella me contesta “no no no”… y yo “yes yes yes, check in” y ella “no… my home”. Se me heló la sangre… invasión de propiedad privada te da prisión en Tailandia??? De verdad que tenía ganas de romper el GPS! Mi compañero se mata de reír… la chica se mata de reír… el padre de la chica (digo yo que seria) se mata de reír. Yo estaba helado y no podía ni moverme. Al final pido disculpas… miro el coche y pienso… como sacaré el coche con todo este barro??!!!! Total, invasión de propiedad privada y encima los dueños me ayudan a sacar el coche, les dejo un agujero enorme en el jardín y los lleno de barro al sacar el coche… les pido un millón de disculpas, y siempre sonríen! De verdad, fue el único momento en todo el viaje en que realmente me sentí en el país de las sonrisas.
Al final el hotel era la entrada siguiente…Llegamos al nuestro hotel, Happiness Resort Sukhothai, a tan solo 1 km de la entrada del parque histórico. Eran las 17:30, las carreteras empezaban a llenarse de gente y algún tráfico. Dejamos nuestras cosas en el hotel, una vez más no era un hotel como entendemos nosotros, eran bungalós, muy bien cuidados también, ligeramente más pequeños que los de Ayutthaya pero muy cómodos también. Pagamos 20 Eur con desayuno incluido. Los jardines del hotel eran simples, pero muy bonitos y bien cuidados. El espacio exterior era un plus, y una vez más teníamos parking para el coche en el interior, y gratuito.
Le pedí a la señora, muy simpática, que me llamara un Tuk Tuk o un Taxi… pero no había disponibles porque todo el mundo estaba en la fiesta. Pedimos bicis para alquilar, pero tampoco había… Eran las 18:30, y aunque el hotel estaba muy cerca de la entrada del parque, se encontraba en una zona totalmente rural, sin luces en las carreteras secundarias, por lo que no queríamos ir andando. Este fue un error enorme y lo único que realmente corrió mal o fuera de lo planificado en nuestro viaje. Porqué? Cogimos el coche… y en cuanto nos pusimos en la carretera principal empieza el caos… el parque histórico estaba preparado con 4 parkings en el interior… sin embargo había colas enormes y en cuanto llegábamos a la entrada de uno de los parkings, lo tenían encerrado por estar lleno. Pasó una vez… más tráfico y totalmente parados… llegamos al segundo, lo mismo… encerrado, más tráfico, y parados. Así estuvimos 5 horas!!!! Encerrados en el coche, sin poder salir de la carretera, la única solución era dar la vuelta al parque… horrible, un terror. Nos perdimos la fiesta, el espectáculo la ceremonia… todo. No llegamos a aparcar nunca y al final de ese tiempo pudimos salir de la carretera, dimos una vuelta grande para llegar nuevamente a nuestro hotel.
Con el mal sabor del fracaso y pérdida de tiempo (aunque nos lo llevamos con buen humor a pesar de todo) nos fuimos a acostar, esperando a que un mejor día llegara. De esta forma terminó un día que había sido programado meticulosamente para poder asistir a un evento que al final no pudimos. Pero tranquilos! Loi Krathong no terminaba aun.
Como he comentado antes, justo al lado del Hotel empezaba lo que se considera el centro histórico (Wat Ratburana), con los principales templos. Sin embargo tenía 3 locales más apartados que quería visitar. Y cuando digo apartados digo apartados del hotel y principalmente entre ellos, como veremos de seguida.
Lo primero que visitamos fue (por motivos horario de apertura) el Wat Phanan Choeng. Este es un templo budista, que se encuentra en la zona este del rio Chao Phraya, a cerca de 1,5km del centro histórico de Ayuthaya (en bici llegas en un par de minutos).
Este templo alberga un buda dorado (en posición sentado / Lotus) de 19 metros de alto. Cuando llegamos estaban preparando la fiesta de Loi Krathong (estamos a día 6 de Noviembre, justo el día de la Luna Llena). Interesante era que en este templo existe una gran influencia china, por lo que podíamos ver varios altares, construidos para este día especifico, de deidades chinas. Estaban ensayando un cortejo de dragones, que fue interesante de observar. Sin embargo el objetivo era ver la estatua gigante. El buda impresiona, es realmente precioso y como el templo tenía apenas gente, podías caminar y mirarlo todo con una calma que no había podido sentir en Bangkok.
Tras esta pequeña visita, nos dirigimos al Wat Chai Wattanaram (unos 3 km del templo anterior, en el lado opuesto de la ciudad). Se trata de un complejo precioso, a pesar de la destrucción que sufrió después de la invasión de los birmaneses, del estilo Khmer (cómo no!), compuesto por una zona central o prang de 35 metros rodeada de 8 chedis interconectados por pasadizos rectangulares. Podéis encontrar muy pocas estatuas de buda completas y otras decapitadas. El conjunto es muy bonito y a la hora que llegamos estábamos solos, por lo que por primera vez, rodeados del rio, jardines bien cuidados y el maravilloso templo, pude sentir la tranquilidad un local religioso en Tailandia. Lo he apreciado mucho, y lo veo como visita obligatoria en Ayutthaya aunque esté un poco más apartado del circuito central.
Nos dirigimos al Wat Lokaya Sutha, un poco más al norte (1km). De todo lo que he visto en Ayutthaya fue lo que menos me gusto por el stress que me causó. Se trata de unas ruinas de un templo del que me interesaba ver únicamente el buda acostado, que se encuentra al aire libre. En cuanto llegamos teníamos un grupo de mujeres esperando a los turistas. Una coge nuestras bicis y las guarda, las otras te tiran de los brazos, te ponen unas flores de Lotus en la mano y unos inciensos, además de una pequeña hojita de pan de oro. Les pagas 20 bahts por eso (no es obligatorio pero me cogieron tan desprevenido que no sabía qué hacer) te enseñan a agradecer al Buda, encender el incienso y para dar suerte pegan la hojita de pan de oro en una pequeña estatua. Luego sin más, sacan una decena de medallitas que te quieren vender por 200 bahts cada una… para dar suerte dicen. Que agobio. No te sueltan por nada de este mundo. Le compro 5 medallitas a una de las señoras, que ya me estaba sacando del estado de paz que había adquirido minutos antes, eso sí, le pagué 75 bahts por cada una y no 200. Ni loco. Al final me dejan en paz, pero cuando me doy cuenta mi compañero tiene una señora literalmente agarrada a su pierna! Que quería venderle una medallita más, que tenia la hija enferma y no sé que más… Mi compañero, sensible a eso, le dice que ok, le paga los 200 Bahts que pide por una medalla, no quiso regatear… pero le da 500 Bahts! La señora se va toda contenta y mi compañero detrás de ella pidiendo el cambio… ella intenta ignorar y hacerse la tonta… que risa me dio. Al final logró que le diera el cambio y no que le intentara dar otra medalla. Estresante el momento pero gracioso, al día de hoy me parto de la risa recordando esa escena.
Después de esta situación, única en todo el tiempo que estuve en el centro histórico, nos dirigimos al Wihaan Mongkhon Bophit que contiene un Buda de bronce de 17 metros de altos. Es un templo moderno, bonito y lleno de gente.
Al lado teníamos el Wat Phra Si Sanphet, otro templo en ruina. Lo vimos bastante rápido una vez que nuestro próximo destino principal era el Wat Mahathat, donde se encuentra el imagen más fotografiada de Ayutthaya, la cabeza del buda envuelta en las raíces de un árbol (que según cuentan) creció alrededor de la misma (hay quien diga que la cabeza fue colocada allí. Una u otra razón, no importa… el tema es que la imagen es preciosa.
A última hora me acordé de un templo que no habíamos visitado, y que para mí era obligatorio… estaba cerca del Wat Phanan Choeng, menos de 1 km, por lo que decidimos ir para una visita rápida. En este templo podéis ver una bonita “avenida” de budas sentados (estos con cabezas) y un enorme buda acostado. Me felicité por haberme acordado de esa parada y no irme sin verlo, porque es realmente bonito, y total, pierdes tan solo una media hora para darte una vuelta por el recinto.
Terminamos nuestra visita al centro histórico dando una vuelta por el Wat Ratburana, muy cerca de nuestro hotel, y finalmente devolvimos las bicis. Eran las 13:00 (justo habíamos estado “paseando” casi 6 horitas por todo el parque. Ya habíamos hecho el check out del Hotel (antes de salir con las bicis) y teníamos nuestras cosas metidas en el coche que estaba aparcado dentro del recinto del hotel. Así que estaba todo preparado para el viaje de unos 330 km que nos esperaba hasta Sukhothai.
Esa misma noche en Sukhothai se celebraría la gran fiesta de Loi Krathong en el respectivo parque histórico. En internet, un par de meses antes, me había informado de las fechas y horas de las celebraciones, así como de todos los eventos que tendrían lugar. A partir de las 18:00 empezarían cortejos de Krathongs, oraciones, dos espectáculos de Luz y sonido en uno de los templos principales, sobre la historia de Sukhothai, y la ceremonia de los Krathongs con fuegos de artificio en el final. Quise comprar las entradas para el espectáculo de luz y sonido, lo había visto en youtube y me pareció merecedor de una visita, así que compré los billetes por internet y obtuve un voucher que me permitiría cambiar por las entradas (para el espectáculo de las 21:00, una vez que el otro era a las 19:00) en el proprio parque histórico.
Estábamos ya en Sukhothai y el GPS me indica donde debo entrar (para mi hotel)… una entrada preciosa, una habitación enorme con otras tantas alrededor, muy bien cuidado. Solo tenía un sitio para meter el coche, pero lleno de barro… lo metí ahí mismo. Me llega una chica muy sonriente y la miro y pido que me indique la zona para el check in (con todas las maletas en cima), a lo que ella me contesta “no no no”… y yo “yes yes yes, check in” y ella “no… my home”. Se me heló la sangre… invasión de propiedad privada te da prisión en Tailandia??? De verdad que tenía ganas de romper el GPS! Mi compañero se mata de reír… la chica se mata de reír… el padre de la chica (digo yo que seria) se mata de reír. Yo estaba helado y no podía ni moverme. Al final pido disculpas… miro el coche y pienso… como sacaré el coche con todo este barro??!!!! Total, invasión de propiedad privada y encima los dueños me ayudan a sacar el coche, les dejo un agujero enorme en el jardín y los lleno de barro al sacar el coche… les pido un millón de disculpas, y siempre sonríen! De verdad, fue el único momento en todo el viaje en que realmente me sentí en el país de las sonrisas.
Al final el hotel era la entrada siguiente…Llegamos al nuestro hotel, Happiness Resort Sukhothai, a tan solo 1 km de la entrada del parque histórico. Eran las 17:30, las carreteras empezaban a llenarse de gente y algún tráfico. Dejamos nuestras cosas en el hotel, una vez más no era un hotel como entendemos nosotros, eran bungalós, muy bien cuidados también, ligeramente más pequeños que los de Ayutthaya pero muy cómodos también. Pagamos 20 Eur con desayuno incluido. Los jardines del hotel eran simples, pero muy bonitos y bien cuidados. El espacio exterior era un plus, y una vez más teníamos parking para el coche en el interior, y gratuito.
Le pedí a la señora, muy simpática, que me llamara un Tuk Tuk o un Taxi… pero no había disponibles porque todo el mundo estaba en la fiesta. Pedimos bicis para alquilar, pero tampoco había… Eran las 18:30, y aunque el hotel estaba muy cerca de la entrada del parque, se encontraba en una zona totalmente rural, sin luces en las carreteras secundarias, por lo que no queríamos ir andando. Este fue un error enorme y lo único que realmente corrió mal o fuera de lo planificado en nuestro viaje. Porqué? Cogimos el coche… y en cuanto nos pusimos en la carretera principal empieza el caos… el parque histórico estaba preparado con 4 parkings en el interior… sin embargo había colas enormes y en cuanto llegábamos a la entrada de uno de los parkings, lo tenían encerrado por estar lleno. Pasó una vez… más tráfico y totalmente parados… llegamos al segundo, lo mismo… encerrado, más tráfico, y parados. Así estuvimos 5 horas!!!! Encerrados en el coche, sin poder salir de la carretera, la única solución era dar la vuelta al parque… horrible, un terror. Nos perdimos la fiesta, el espectáculo la ceremonia… todo. No llegamos a aparcar nunca y al final de ese tiempo pudimos salir de la carretera, dimos una vuelta grande para llegar nuevamente a nuestro hotel.
Con el mal sabor del fracaso y pérdida de tiempo (aunque nos lo llevamos con buen humor a pesar de todo) nos fuimos a acostar, esperando a que un mejor día llegara. De esta forma terminó un día que había sido programado meticulosamente para poder asistir a un evento que al final no pudimos. Pero tranquilos! Loi Krathong no terminaba aun.