Jaipur es más grande que Barcelona y Madrid juntas, pero aquí en India es una ciudad pequeña. En el viaje hasta Puskhar, Ranvir, (ahora me he enterado de que se escribe así )nos demostró que se pasaría el Mario Karst en una hora…es una locura : autopista con 3 carriles con cinco coches en paralelo, personas, vacas sentadas en el asfalto, cerditos, carros, bicis y algún que otro coche en sentido contrario….de lujo.

En apenas 3 horas hemos llegado a Ajmer nuestra carretera estaba cortada sin más explicación, tiramos de MapsMe para encontrar la carretera. Ranvir prefiere preguntar, como no se fía, pregunta veinte veces y al final nos guiamos por nuestro Maps me! ahora sí hay una carretera regular, un solo carril y la mitad barro…. Ya me dormí y no vi más.
Llegamos a Puskhar, unos hombres sentados en una sillas tiran de una cuerda que abre y cierra la barrera de la ciudad más santa de la India y te cobran 10 INR por entrar a la ciudad, bueno eso es lo que pagó Ranvir por nosotros con un mosqueo importante, se puso a gritarles y todo. Cuando le preguntamos por qué pagaba dijo: Puskhar! ( Yo creo que estaba enfadado y no le gusta nada esta ciudad)
Encontramos fácilmente el hotel White House Hotel, el color, esto blanco. Son muy amables, nos enseñan todo el hotel, nos registramos 10 minutos rellenando papeles…que si queremos comer, que si queremos masajes, que cuidado con la gente que te regala algo en la calle, que cuidado con los bolsos, que no des besos ni la mano en la calle es ciudad santa,….
A mí el hotel me recuerda a los Riad de Marruecos, pocas habitaciones alrededor de un patio central y en la azotea alfombras y cojines y mesas para comer. El cocinero está muy muy loco, hace yoga, pesas, nos enseña su cocina y baila. Mi madre dice que nos ha costado 40 e a los cuatro las dos noches, así que no se protesta. De todos modos a mí me gusta, las habitaciones tienen flores pintadas en la pared y hay niños. Yo estuve dibujando mandalas con una niña un rato. Además el callejón donde está el hotel está lleno de vacas y por la noche muchas duermen en esta calle y en una plaza que hay al lado y que siempre está lleno de niños. Me gusta
Después de descansar fuimos a comer con un calor impresionante, nos metimos donde mejor nos parece pero vaya fiasco, la peor, peor comida no sólo de la India sino del mundo y eso que en las paredes tenía colgados carteles escritos a mano por la gente en todos los idiomas diciendo: Best Thali in India. ¡Anda ya! Es lo que pasa en ciudades como esta, que tienen mucha fama entre mochileros y todos los vendedores te dicen :Español: hola cocacola, bueno , bonito, barato…. . He viajado lo suficiente como para saber que de estos sitios hay que irse pronto, porque suelen ser los peores. Mis padres para eso tienen un instinto infalible.
Además es verdad que por la calle hay muchos extranjeros haciendo el “guiri”, van sucios, plan hippy, descalzos pisando mierdas de vaca…en fin…y con pinta de que ellos lo saben todo sobre la India.
Encontramos un sitio, el Funny Monkey y nos gustó porque los dueños son budistas tibetanos, así que allí tomamos crepes de nutela y lassi y están de escándalo. Los dueños son muy atentos, nos dieron la clave wiffi sin ni pedírsela y cuando nos fuimos: please come tomorrow for breakfast.
Cuando volvimos al hotel a ducharnos y descansar yo me fui con la nieta de la dueña a jugar.

Foto. Niños jugando a criquet, deporte nacional, no hemos visto en todo el país a nadie jugando a futbol…

Foto. Niñas jugando al corro (la vaca de detras preguntando si habia habitación en el hostel)

Por la calle vamos clasificando las vacas en guapas y feas, un nuevo juego.
Al final del día fuimos a la zona del sunset, a las 7:00 está anocheciendo y las vistas son impresionante, un hombre quiere que arrojemos flores al lago sagrado (Pushkar Lake) porque da buena suerte en este lago están esparcidas las cenizas de Gandhi (Place of Yagna), le decimos que no y al rato se va, entonces nos viene un hindú q lo había escuchado todo y nos dice que muy bien, que el otro no era nadie para bendecirnos, nosotros le decimos que respetamos todas las religiones y que al no ser la nuestra no tiene sentido que te bendigan, vamos como si va un chino a que lo bendigan en una iglesia en España y le cobramos. El hombre se hartó de reír. Por cierto vimos unos murciélagos tamaño gaviotas.
Este lago está lleno se Ghats, lugares donde queman a las personas cuando se mueren y arrojan las cenizas al lago, como es lógico, depende de las clases, quien más dinero tiene, se quema con maderas más caras y si no pues con maderas más baratas, se queda a medio quemar y al río.
Los Ghats están porque es una ciudad muy sagrada, porque Brahma tiró una flor de loto y se formó un lago, y por eso el lago es sagrado.


Foto. Puesta de Sol del Lago, con Ghats.
Como estoy mal de la garganta, por el aire acondicionado, fuimos a una farmacia y mi madre me compró unas pastillas para chupar con antibiótico que saben a limón por 20 INR, el hombre muy educado y atento. La verdad que me he tomado tres y ya no me dule.
Esa noche cenamos en el hotel, el hijo del dueño “Frank de la India”, nos hizo una cena estupenda en la azotea del hotel con música de Bollywood .
Estuvimos con dos españoles de Sevilla que han estado un mes de voluntarios en Calcuta, muy majos.

Comida: 17 e/4 personas
Hotel Jaipur (Ocean Park) 2 noches 100e (a 25 e la habitacion/dia)
Resto gastos 1 e.