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Día 9 (15-08-24): Templo Haeinsa y Daegu (Duryu Park y Seomun Market)
Un día más en Corea y nos levantamos temprano para visitar el famoso templo Haeinsa, fácilmente accesible en transporte público desde Daegu. Le dimos dos noches a esta ciudad para visitar el templo tranquilamente y ver alguna cosa más que estuviera cerca, pero se puede hacer perfectamente dándole una noche y marchando hacia el siguiente destino (normalmente Gyeongju) tras visitar Haeinsa.
Cómo llegar al templo Haeinsa desde Daegu: hay autobuses que van desde la Seobu Bus Terminal hasta el templo. Estos buses únicamente se pueden pagar en efectivo, no aceptan pago con tarjeta (al menos cuando fuimos nosotros) y no sirve la T-money. Los billetes se compran directamente en la ventanilla de la estación de autobús a la ida, y en la misma parada del templo a la vuelta (no hay posibilidad de adquirir ticket combinado ida y vuelta).
Trayecto en bus: 1 h 20 min hasta Haeinsa. Hay salidas desde las 6:40h. Horarios:
De Daegu al Templo Haeinsa: 6:40h – 8h – 8:40h – 10h – 11h – 12h – 12:40h – 14h – 14:40h – 16h – 16:40h – 18h -18:40h – 20h Del Templo Haeinsa a Daegu: 6:40h -8h – 8:40h – 10h – 10:40h – 12h – 13h – 14h – 14:40h -16h – 16:40h – 18h -18:40h – 20hLa parada de bus final en Haeinsa se encuentra a unos 1.2 km del templo, pero en unos 10 minutos recorriendo un sendero muy agradable en plena naturaleza se llega hasta allí.
Cómo llegar hasta la Seobu Bus Terminal desde la zona de DongDaegu: se puede tomar el metro línea 1 roja hasta la parada Seongdongmot y saliendo por la salida 3 estaremos justo enfrente de la estación de autobuses de Seobu.
Así que después de desayunar, eso hicimos, tomar el metro línea 1 desde nuestra parada Jungang-no hasta Seongdongmot, nos llevó unos 15 minutos.
No había cola para comprar los tickets y llegamos a tiempo para el autobús de las 8, que sobre las 9:20 nos dejaba en la parada del templo Haeinsa. Este templo se encuentra dentro del Parque Nacional Gayasan, por tanto desde esta zona también se pueden hacer algunas excursiones de senderismo (de hecho, muchos senderistas venían en el bus y bajaron en algunas de las paradas anteriores al templo). Una de las rutas más típicas es la subida al pico Sangwangbong, inicialmente nos planteamos pasar todo el día por esta zona haciendo trekking además de ver el templo, pero con las temperaturas y humedad que nos encontramos al llegar al país acabamos descartándolo.
Desde la parada de bus se pasa primero por una zona de puestecitos donde venden principalmente ginseng y plantas medicinales, y luego se toma un sendero que lleva hasta el templo.
El templo Haeinsa, fundado en el año 802 por dos monjes budistas en el monte Kaya y Patrimonio Mundial por la Unesco, es uno de los más importantes y hermosos de Corea, en parte debido a su privilegiada ubicación en este entorno natural de bosques y arroyos del parque nacional.
Otro de los motivos para visitarlo es que este lugar atesora la famosa Tripitaka Koreana: un conjunto de 81.258 textos sagrados grabados en planchas xilográficas de madera que componen una de las mayores bibliotecas budistas de su clase. Esta es una ilustración que hay en el templo (si os hacéis una foto delante, da el pego
):
Estas tablillas budistas se guardan en cuatro edificios en la parte alta del templo, que suelen estar cerrados, pero aun así el rudimentario sistema de ventilación permite ver las planchas a través de los listones.
Aparte de la Tripitaka, el templo cuenta con otros lugares interesantes, como el pabellón principal Daejeokkwangjeon, o Gran Sala de la Luz Tranquila y su pagoda de piedra de tres niveles en el jardín, así como su techo profusamente labrado y decorado.
Y hay otros edificios más pequeñitos pero también muy pintorescos:
Comentar que la zona del templo alberga otros templos más pequeños y menos conocidos, si hay tiempo no está de más dar una vuelta y ver alguno más de estos, estaréis solos o prácticamente solos. Éste es uno de los que vimos, muy cercano a Haeinsa:
Y éste es otro, ya en el camino de bajada hacia la parada del autobús:
Volvimos en el bus de las 12, estábamos esperando en la parada un rato antes y vino un señor en coche que nos vendió los billetes (solo efectivo). Un poco raro todo, pero funciona así
.De vuelta a Daegu, lo que os comentaba, se puede organizar para trasladarse ya al siguiente punto de la ruta sin necesidad de pasar una segunda noche en la ciudad, pero nosotros lo teníamos montado así porque inicialmente pensábamos hacer algo de senderismo en Kayasan y volver tarde a la ciudad.
Daegu es la cuarta ciudad más grande de Corea del Sur y es conocida como ciudad universitaria y también por su mercado de hierbas medicinales y medicina tradicional. Yo llevaba anotados lo siguientes lugares que visitar en Daegu si teníamos tiempo:
• Mercado de Seomun
• Museo de Medicina Oriental y mercado de hierbas medicinales
• Iglesia presbiteriana Daegu Jeil
• Iglesia Católica Daegu Gyesan
• Parque Gyeongsanggamyeong: antes conocido como Parque Central, recinto que albergó la oficina de Gobernación de la región desde 1601, cuando gobernaba la dinastía Joseon. Se pueden visitar algunos edificios y pabellones.
• Dongseong-ro: barrio comercial muy animado sobre todo por la tarde-noche. Hay un centro comercial de siete plantas con un parque de atracciones en la terraza (incluyendo una noria).
• Hyanggyo Confucian School: escuela confuciana que preserva tablas ancestrales con las enseñanzas de Confucio, lugar de peregrinación para muchos coreanos. Abierto de 9 a 17h.
• Casas de Lee Sang-hwa y Seo Sang-don: dos pequeñas casas históricas preservadas porque vivían en ellas dos coreanos que ayudaron a formar la resistencia contra la invasión japonesa del siglo pasado.
• Duryu park: parque muy extenso, que incluye la torre Daegu 83.
Al final, por ubicación y por tiempo acabamos visitando el Duryu Park (que está cerca de la terminal Seobu donde nos dejó el bus), mercado de Seomun y las dos iglesias que nos venían de paso.
Llegamos a Seobu Terminal sobre las 13:30 y decidimos encaminarnos al cercano Duryu Park, pero antes decidimos parar en algún sitio a comer. Nos metimos en un sitio de los que había donde por supuesto solo se hablaba en coreano, pero conseguimos con el Lens aclararnos para pedir bibimbap vegetal y un guiso de ternera y fideos (que no recuerdo el nombre):
Luego fuimos al Duryu Park, es un parque donde vienen los locales a pasar el rato, sobre todo jubilados. Aquí no encontraréis ningún guiri, probablemente seréis los únicos porque no es turístico. Este parque es enorme, que incluye un pequeño lago:
Y también hay un parque de atracciones, parque acuático, teleférico y la torre Daegu 83:
También había zonas de gimnasio al aire libre, estábamos a más de 35 grados con sensación de 40 y yo apenas podía caminar de sombra en sombra, mientras los jubilados coreanos, totalmente tapados con manga y pantalón largo, lo daban todo a pleno sol (esta gente son muy duros de pelar). No hay fotos por respeto a ellos y porque es demasiado humillante para el común de los mortales (o sea para mí) tener que aceptar eso
.A esas alturas eran casi las 16:30 h y ya veía que nos íbamos a quedar de nuevo sin ver el mercado y eso era impensable porque soy muy fan de ver mercados y no pensaba perdérmelo, así que atravesando el parque fuimos hasta la parada de metro Duryu Park y tomamos línea 2 hasta Cheowan Hill (o algo así), que quedaba muy cerquita del Seomun Market.
El mercado de Seomun es el más grande de Daegu, hay paraditas dentro del mercado propiamente dicho y también por las calles de fuera. Se encuentra de todo: fruta, pescado, ropa, cosas de casa y paradas de comida (para llevar o con sitio para tomar allí).
A partir de las 17h vimos que algunos puestos ya iban cerrando, y las de comida para llevar cierran cuando se les acaba el género. Había una parada que tenía un éxito impresionante, vendían un bizcocho descomunal en porciones y tal cual lo sacaban, distribuían los cachos entre la gente que ya estaba esperando haciendo cola y se acababa:
Nosotros compramos una especie de buñuelos rellenos de crema en forma de pez, estaban buenísimos. Esto para merendar, pero también nos llevamos una especie de tortitas de calabaza y otras de queso que solo habíamos visto en esa zona, y decidimos que ya que teníamos mini-cocina nos lo cenaríamos más tarde en el hotel, porque en caso contrario saldríamos rodando de ese mercado
.Cuando el mercado ya iba de capa caída volvimos paseando hacia el hotel, de camino paramos a hacer alguna foto a las dos iglesias, la presbiteriana (de ladrillos rojizos) y la católica:
Paramos en un combini a comprar cervezas y postre para completar la cena, y aprovechamos ese día que nos retiramos no muy tarde para poner lavadora (ya que teníamos también el armario secador y había que aprovecharlo).
Y a dormir temprano, que al día siguiente volvíamos a cambiar de zona: nos íbamos a Gyeongju, la antigua capital del reino Silla y uno de los sitios que más nos gustó de nuestro itinerario.
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