Hoy dormimos una chispa más, y tras desayunar en nuestro apartamentito leche y american donuts que compramos ayer (que ricos, y que calóricos, jejeje…). Salimos pronto porque queremos ir primero a ver la Casa Blanca (por fuera claro; se organizan vistas guiadas a grupos pequeños desde la embajada, pero sólo en días de diario; y nosotros esta vez hemos coincidido en domingo, así que no lo hemos podido hacer). Queremos hacer lo antes de las 10.00h que tenemos reserva hecha para subir al monumento a Washington, el gran obelisco blanco rodeado de banderas que está en el centro del Memorial. Hoy tenemos todo el día dedicado a ver el Memorial y los museos. Si os gustan los museos, Washington es vuestro lugar. Tienen la colección de museos más importante del mundo, los pertenecientes a la fundación Smithsonian. Son todos gratuitos y enormes. Eso sí, podéis dedicar 10 días por lo menos para ver única y exclusivamente museos. Al parecer, el señor o señora Smithsonian, que era inglés o inglesa, que de eso no me acuerdo, donó toda su fortuna para creación de esta fundación que se dedicara a esos museos estadounidenses, y tienen las colecciones más importantes del mundo: una pasada.
Cuando salimos a la calle esa mañana resulta que hacía un día de perros, pero por el momento no llovía y esperábamos que mejorase el día como había ocurrido en otras ocasiones. Son fuimos andandito hacia la parada de metro (unos 10min), y tras solicitarle al seños de la garita, que por cierto era más alto y grande que un día sin pan, que me sacara los billetes porque yo no era capaz de hacerme con la maquinita, pusimos rumbo a la estación más próxima a la Casa Blanca. Sacar el billete de metro en Washington es bastante lioso, no son nada fáciles las máquinas. Primero hay que indicar de qué estación sales, luego a qué estación vas, así te calcula el importe, luego tienes que poner si es sólo de ida, o de ida y vuelta, o si quieres un bono, y por último cuántos billetes quieres. Ya os digo yo, que hasta ahora no habíamos tenido ningún problema con estas cosas, y allí, después de pedirle a una chica hispana que nos lo explicara y todo, al final tuvimos que pedir ayuda al tío grandullón.
Cuando llegamos a la estación y salimos a la calle estaba callendo una lluvia torrencial tremenda, y nosotros en pantalones cortos, sin paraguas y sin nada. Allí estaba todo el mundo resguardado en la estación. Estuvimos esperando unos 20min pero la cosa no paraba y se nos hacía muy tarde, así que preguntamos a un chico si sabía dónde podíamos comprar unos paraguas y nos indicó una tienda en la esquina de la siguiente bocacalle, así que salimos corriendo hacia ella. Llegamos empapados, claro, y nos compramos unos ponchos (caros) y unos paraguas (carísimos), pero era lo que tocaba hoy, lluvia, así que si queríamos seguir adelante con nuestro día, es lo que había. Eso sí, no os recomiendo que compréis ponchos, porque como vais a estar andando mucho, lo que hacen es dar un calor terrible, mucho mejor sólo paraguas. Uniformados y tarde, ya no podíamos ir primero a ver la fachada de The White House, así que tiramos a la carrera para el Memorial, porque ya no llegábamos a nuestra hora. En Washington hay que tener cuidado con las distancias. Cuando planeamos los itinerarios todo parecía que estaba muy cerca, pero no es así, está todo lejísimos.

Llegamos justitos de hora al obelisco, y tras esperar unos 5min y pasar los controles (allí hay mucha poli y Rangers) te suben en ascensor hasta arriba del todo. La pena: que como el día estaba de aquella manera, todas las ventanas estaban con gotitas de lluvia y empañadas y se veía muy mal todo, pero aún así impresiona ver todo el memorial desde las alturas. Tanto del Capitolio, como de la Casa Blanca y del Monumento a Jefferson, con el lago que tiene delante, se ven realmente en toda su magnitud desde allí arriba. Al bajar damos una vuelta al obelisco y vemos desde allí las vistas del Capitolio y del Monumento a Jefferson con el lago también. Es todo muy bonito, muy patriótico, y muuuyyyyy grande.
Decidimos ir primero a ver la fachada de la Casa Blanca, que antes no nos había dado tiempo. No para de llover. La verdad es que es un asco andar así, pero es lo que toca. La vista desde las verjas es bastante buena, igualmente allí todo bastante vigilado. Con el zoom de la cámara tratamos de ver a Mr. Obama, pero creo que no estaba en casa, jejejeje… Después de la foto de rigor volvemos sobre nuestros pasos al Memorial. La verdad es que hibiera estado bien poder ver The White House por dentro. Para otra vez trataremos de que nuestra visita coincida entre semana (igual que en Las Vegas, que estuvimos en fin de semana, cuando entre semana son todos los hoteles la mitad de precio o más). Igualmente nos pasó con el Capitolio, que en domingo no se puede visitar, ni siquiera la biblioteca, así que nos tuvimos que conformar con su vista grandiosa desde lejos.

Pusimos rumbo al museo del Aire y el Espacio, nuestra siguiente parada, y por el camino nos comimos el sándwich de salami que nos habíamos preparado para media mañana. Íbamos a este museo por mi chico, aunque nos encantó a los dos. Es una pasada. Allí podéis ver en una parte todo lo relacionado con la NASA (cabinas de transbordadores, satélites, cohetes…) y en la otra parte del mueso todo lo relacionado con la aviación antigua y moderna. Incluso tiene secciones de aviones que se pueden visitar por dentro. Lo disfrutamos muchísimo, sobre todo mi chico, que es mecánico y le encantan todas las cosas que tienen motor, jejeje; porque yo ese día la verdad es que estaba bastante cansada, me dolían mucho los pies, y me iba sentando cada poco a esperarle mientras él visitaba todos los pabellones.

Estuvimos allí 4 horas. Incluso comimos allí en un McDonalds antes de marcharnos (este McDonalds malo malísimo como los españoles). Como siempre se nos hicieron las tantas, y ya era tan tarde que no nos daba tiempo a ver mucho más del Memorial. Vimos el Capitolio a lo lejos mientras cruzábamos hacía el lado este del memorial, y como eran las 17.20h decidimos hacer una incursión rápida en el Museo de Historia Natural, que es el otro que nos hubiera gustado ver hoy, si no nos hubiésemos pasado el día entero en el del Aire y el Espacio.

Realmente qué bien que entramos aunque fuera un rato al museo, y qué mal que no le pudiésemos dedicar más tiempo, porque es increíble. Vimos a la carrera toda la zona de los esqueletos de los dinosaurios, que son realmente impresionantes, y un poco de la zona que tienen con muchas clases de insectos vivos, y luego ya nos echaron a todos de allí, jejejeje. Son muy rigurosos con los horarios. Vamos, que tienen vida, como digo yo, y ya puede ser la capital del reino, que a las 18.00h cierran y todos los trabajadores se vana a sus casitas, porque a parte de trabajar tienen vida, no como nosotros aquí en España, que parece que no sabemos hacer otra cosa más que trabajar… En fin…

Cuando salimos ya estaba empezando a anochecer y nos fuimos andando al Monumento a Washington de nuevo, y de allí al Monumento a Jefferson. La vista del lago es preciosa. Hicimos todo el recorrido andando hasta Jefferson, y ya de noche vimos el Momorial de Korea y el de Vietnam. Impresionan bastante porque están a escala real, y de noche dan un poco de miedo. Lo curioso, que en toda esa zona hay un montón de luciérnagas.



Ya completamente exhaustos de todo el día decidimos irnos andando al hotel, porque echamos cuentas y nos salía más rentable que ir hasta la parada de metro. Un día más no nos había dado tiempo a ver el Cementerio de Arlington, así que lo tendríamos que intentar ver a la mañana siguiente antes de salir rumbo a Niágara. De camino al hotel pasamos por la zona de la universidad de Washington y vimos desde fuera algunas de las fraternidades, unas muy pijas y otras muy modernas o alternativas; en alguna había algún pobre estudiando o pasando el rato. Como es agosto estaban sin gente.
Llegamos al hotel con los pies completamente doloridos, y por primera vez en todo el viaje echamos las cuentas de cuánto es más o menos lo que hemos andado hoy. Calculamos unos 13 Km, y es que en Washington las distancias son enormes!!! Cenamos unos sándwiches y un poco de fruta y a dormir…