Hoy probamos nuestro primer desayuno en el hotel Hideaway y podemos comprobar que es todavía mejor que el anterior! Subimos a la terraza con sus maravillosas vistas Y enseguida nos ofrecen zumo de naranja recién exprimido y huevos que nos hace la cocinera sobre la marcha. En el buffet hay muchísimas cosas: Crepes, pan tostado, mermeladas de varios sabores, bizcocho, etcétera. Creo que fueron los mejores desayunos de los siete hoteles en los que estuvimos.
Antes de salir de ruta, nos vamos a visitar el teatro romano que tenemos al lado, que aunque está muy reconstruido tiene unas vistas preciosas al mar.
Los empleados del hotel nos asesoran sobre las mejores opciones para la ruta de hoy, ya que el personal es muy amable y están muy pendientes de todo. También ellos nos han reservado otro día de barco, porque tras la experiencia tan buena del anterior querríamos repetir para visitar la bahía de Kas, pero eso será al día siguiente.
Hoy empezamos las visitas en las ruinas de Xanthos, a unos 45 minutos en coche desde Kas. Cuando bajamos del coche, estamos a punto de morir de calor, pero sacamos fuerzas y tras pagar las entradas nos vamos a visitar el teatro romano.
Intentamos continuar la visita, pero una vez recorrida la calzada romana, y a punto de achicharrarnos vivos, vemos que para subir a la necrópolis quedan unos 500 metros, así que como no queremos morirnos de momento, los únicos que se deciden a subir son mi marido y mi cuñado y los demás les esperamos sentados en la sombra.
Al cabo de un buen rato, por fin aparecen y nos cuentan lo que han visto, pero llegan completamente asfixiados y congestionados, así que nos metemos en el coche con el aire acondicionado a tope y nos vamos rumbo a la playa de Patara.
En unos 20 minutos llegamos al sitio arqueológico de Patara donde también se encuentra su playa. Para acceder a esta playa hay que pagar la entrada correspondiente y pasas con el coche hasta el parking que está junto a ella. Por la carretera de acceso vamos viendo a la derecha las ruinas, pero después del calor que hemos pasado en Xanthos decidimos ir directos a la playa y visitar las ruinas por la tarde. La playa es preciosa y hay muy poca gente así que disfrutamos de un día tranquilo y relajado para reponernos de lo que hemos sufrido por la mañana.
A la hora de comer decidimos ir al chiringuito que hemos visto a la entrada, porque hoy no tenemos bocatas ni nada preparado. La verdad es que comer en el chiringuito nos da un respiro porque estamos a la sombra, y podemos tomar una cerveza fría y unos helados de postre.
Después de comer nos vamos otro rato a descansar en la playa y algunos hasta se echan la siesta en la orilla.
Una vez repuestos y descansados, sobre las cinco de la tarde nos vamos a visitar las ruinas. Había leído en algún diario que había muy poco que ver y que no eran muy interesantes, pero la verdad es que a nosotros nos sorprendieron y nos gustaron mucho. Además descubrimos que esta hora era mucho mejor que la mañana para visitar las ruinas.
A la salida encontramos a una señora que vendía higos chumbos que te pelaba allí mismo, así que nos paramos a merendarlos y nos fuimos de nuevo a Kas. La idea en un principio era haber parado en la playa de Kaputas, que también es muy bonita, pero al final se nos hizo tarde y decidimos no parar.
Después de un baño en la piscina y una buena ducha salimos de nuevo a Kas a cenar. Tiene gracia porque como nos veían un grupo muy numeroso en los restaurantes se tiraban a por nosotros. Algunos nos ofrecían descuentos y al final nos sentamos en uno que nos ofrecía mezze (entrantes turcos) gratis, y la verdad es que nos trajeron dos platos impresionantes y recuerdo que me cené una brocheta de pez espada que estaba riquísima. Tras dar un paseo por el pueblo, nos fuimos a dormir ya que al día siguiente teníamos otra excursión de día completo en barco.