ETAPA 12. NEW ORLEANS
El día amanece lluvioso. Aparcamos en el Tremé, el barrio de pequeñas casas de colores fundado a principios del siglo XVIII por Claude Tremé, quien construyó las casas sobre una antigua antigua plantación.

Los esclavos de esas plantaciones se reunían para cantar y bailar en Congo Square, el único lugar permitido. Cuando fueron liberados se quedaron en la zona. Ese lugar cargado de historia se encuentra en el parque de Louis Amstrong, Satmo, ilustre neworleaner. Es una plaza circular y adoquinada adornado con estatuas de Amstrong y de Buddy Bolden, el primer músico de jazz del que se tiene noticia.

Paramos a tomar un café y unas pastas en el Croissant d'Or ( 617 Ursulines Av) que recomiendan en la guía. Solo abre de 6 a 15 pm. Probamos un croissant relleno, uno normal y las palmeras, y sin dudarlo, nos quedamos con las palmeras, de sabor exquisito y muy crujientes. Eso sí, hay que ir sin prisas porque el chico que atiende, tiene mil cosas que hacer antes de servirte a ti, aunque seas el único cliente.
En Jackson Square cogemos el RiverFront StreetCar, el tranvia que va paralelo al Mississipi. El trayecto es corto y se podría hacer a pie, pero llueve mucho. El Centro Comercial situado al lado del Audubon Aquarium. No hay grandes chollos y lo mejor es la terraza en la planta superior para ver la panorámica de la ciudad. Al lado está el Natchez SteamBoat, otro barco de vapor histórico que ofrece circuitos por el rio a ritmo de música dixieland. No nos planteamos visitarlo ni hacer una cena en él, pero impresionan las dimensiones que tiene. Leemos que había una treintena de barcos como este en el puerto de NOLA.

Regresamos hacia Congo Square por otras calles y con el coche, llegamos al SuperDome. Es una megaestructura gigante, que se vuelve más impresionante cuanto más te acercas. Nos vienen a la mente las imagenes de la ciudad devastada por el Katrina y como la gente utilizó el SuperDome como refugio. Tardamos más de 20 minutos en rodearlo. Como ha parado de llover y sale un poco el sol, la cúpula luce brillante.

Regresamos al Marigny para escuchar música en Frenchmen Str y escogemos el THE SPOTTED CAT MUSIC CLUB (www.spottedcatmusicclub.com). Todos las tardes suenan tres bandas. Precios correctos: cerveza 5 usd y refrescos de garrafa y mucho hielo, 4. Muy buen ambiente. Y como no, control de edad en la entrada. No nos preocupamos más por el parking. A partir de las 6 de la tarde no se paga. Y en esos días de enero hay muchas plazas en el centro.

Cenamos en la misma calle, en el 30-90 DEGREES ( 520 Frenchmen St) . Tiene música en directo y mucha variedad de platos en el menú, desde ostras al vapor a hamburguesas aunque nos inclinamos por varios platitos de comida cajún.