De crucero por tierras mediterráneas de la antigüedad y más allá ✏️ Blogs de Mediterráneo

En años anteriores estuve mirando opciones para retomar la cuestión pero por pitos o por flautas surgieron otras alternativas y el asunto se fue dejando para ocasiones posteriores. En esta ocasión nos propusimos fijar objetivos y plantearnos el viaje sí o sí para el siguiente verano.

Tomada la decisión, ¡¡¡¡adelante con los faroles!!!!

Postdata: No se me olvide comentar que he querido hacer en el título del diario un pequeño homenaje a Dº José María Toquero, un youtuber divulgador que nos dejó hace unos meses. Con su canal “De Crucero con Toquero” nos dio mucha información y muy amena de todo lo relacionado con los viajes de este tipo. Muchas gracias ahí dónde esté….
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Con esta nueva perspectiva se hizo una nueva selección y el crucero que cumplía los requisitos buscados era el Voyager of the Seas de la naviera Royal Caribbean, que salía de Atenas, por lo que se podría volar unos días antes para visitar la capital griega y desembarcaba en la ciudad italiana de Rávena, siendo los puertos de escala Mykonos, Chania, Zakhyntos (cambiado con posterioridad a Argostoli) en Grecia, Kotor en Montenegro y Split en Croacia. Otro aliciente era quedarse en Rávena el día del desembarque para visitar sus mosaicos bizantinos y viajar al día siguiente al aeropuerto más cercano, Bolonia, lo cual daría también la oportunidad de visitar durante unas horas esta afamada ciudad transalpina. Si a ello le sumamos que nuestras experiencias recientes con esta naviera son positivas todo nos hizo inclinarnos por esta opción, desechando otras de otras compañías.

Siguiendo el consejo de nuestro agente de viajes, en la medida en que los precios de los cruceros están sufriendo unas subidas exponenciales, si teníamos claro que queríamos hacer éste, reservamos faltando 11 meses para el viaje lo que ha significado la reserva con más antelación que hemos hecho nunca. Haciendo posteriormente alguna simulación para ver por dónde iban los tiros no lo he visto más barato de al precio que se reservó por lo que fue una buena idea, a priori, haberlo contratado con tanto tiempo.




Elegido barco e itinerario toca elegir fechas del viaje. Nuestra tendencia en los últimos años es elegir septiembre como fecha vacacional dado que la climatología aún es buena y los precios son algo menores que en plena temporada alta.

A continuación, el tipo de camarote. Lo ideal en este tipo de itinerario sería escoger cabina con balcón para poder disfrutar, por ejemplo, de las bien ponderadas puestas de sol griegas. Sin embargo, su coste se pone bastante prohibitivo y si a eso le sumamos los días extra de extensión del viaje pues obliga a recortar por lo que la opción de camarote interior garantizado, lo más económico que había, era lo que tocaba. Siempre se puede subir a cubierta para recrearse en las vistas….



Una vez reservado el crucero le toca el turno a todo lo que rodea al mismo con un coste significativo: vuelos y pernoctaciones. Lo veremos en la siguiente etapa.[/align]

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En lo referente a Rávena la idea era coger un hotel próximo a la estación de ferrocarril, también con las 3 bes, para minimizar la distancia con el equipaje a cuestas al venir del desembarque a la ida y luego a la vuelta para coger el tren con destino a Bolonia. Analizando el tema nos cuadró el hotel Italia en Viale Giorgio Pallavicini nº 4.



Aparte quedarían pequeños desplazamientos en transporte público local pero mejor me referiré a ellos cuando llegue la ocasión con el fin de hacer un todo con el propio relato y que sea más didáctico.[/align]

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