![]() ![]() Por el sur del mundo. CHILE ✏️ Blogs de Chile
Mis 2 viajes por Patagonia, Tierra del Fuego y Región de los Lagos. naturaleza intacta y desbordante: glaciares, lagos, montañas, ríos, bosques.....El sur del mundo, bajo el poder del agua.
Añado mi último viaje: Norte, Araucanía, Región de los Ríos y ChiloéAutor: Meha Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.9 (37 Votos) Índice del Diario: Por el sur del mundo. CHILE
01: Nos vamos al sur de Chile. Nov-2012
02: Llegada a Tierra del Fuego chilena
03: Parque Karukinka (Tierra del Fuego)
04: De Tierra del Fuego a Puerto Natales
05: El sur del Parque Nacional Bernardo O´Higgins
06: Torres del Paine (Lago Grey). Pata izquierda de W: de Lago Grey a Paine Grande
07: Torres del Paine: Valle del Francés (pata central W)
08: Torres del Paine: Mirador Las Torres (pata derecha de la W)
09: Del Paine a Puerto Natales
10: De El Chaltén a Villa O´Higgins y Glaciar O´Higgins
11: Villa O´Higgins: el fin de la Ruta Austral
12: Caleta Tortel: el pueblo de madera
13: Cochrane: siguiendo la Ruta Austral
14: De Cochrane a Puerto Guadal
15: Lago y glaciar Leones (Campo patagónico de Hielo Norte)
16: De Puerto Guadal a Chile Chico
17: Bordeando el lago General Carrera, de nuevo
18: El Valle Exploradores
19: De Puerto Tranquilo a Villa Cerro Castillo
20: Despedida patagónica. Dic-2012
21: Regreso a la Patagonia. El embrujo del calafate. Ene-2014
22: Lago de Todos los Santos, Peulla y el Volcán Osorno
23: Ruta Austral: De Puerto Varas a Hornopirén y Parque Nacional del Alerce Andino
24: Ruta Austral: De Hornopirén a Chaitén
25: Ruta Austral: De Chaitén a La Junta
26: Ruta Austral: De La Junta a Puerto Aysén
27: Laguna San Rafael. Donde el campo de hielo continental llega hasta el mar.
28: Ruta Austral: De Puerto Aysén a Puyuhuapi. Puerto Cisnes. Bosque encantado
29: Ruta Austral: Parque Nacional Queulat. Puyuhuapi
30: Ruta Austral: De Puyuhuapi a Futaulefú
31: Futaulefú y sus senderos
32: Despedida bordeando el lago Llanquihue (feb-2014)
33: Región de Arica y Parinacota: indescriptible altiplano andino (nov-2018)
34: Región de Tarapacá: entre volcanes y desierto
35: Araucanía I: Por los volcanes, lagos y araucarias de Malalcahuello, Conguillío y
36: Araucanía (II): Pucón, Lagos de Huerquehué, Volcán Villarrica, rafting
37: Las cascadas de Huilo-Huilo y el volcán Mocho Choshuenco, entre lagos y ríos
38: 4 días en Chiloé, entre verdes paisajes, leyendas y arquitectura en madera
39: Por la verde costa valdiviana y despedida en Santiago (dic-2018)
Total comentarios: 91 Visualizar todos los comentarios
Etapas 10 a 12, total 39
De nuevo en Chile, en medio de la nada. Tras el hito fronterizo Chaltén-O´Higgins, quedan 15 km de caminata hasta la aduana.
Los días anteriores los pasamos en Argentina. Ver diario: Por la Patagonia Argentina: www.losviajeros.com/ ...php?b=8657 El belga que se nos había perdido, aparece, y en su compañía seguimos caminando por paisajes absolutamente aislados. ![]() ![]() Ya en Chile, nos despedimos de la silueta del Fitz Roy, que se va volviendo más tenue en la lejanía. ![]() Los cantos de los pajarillos amenizan nuestro caminar. Alternando la sombra del bosque con paisajes más despejados, a pleno sol patagónico, ¡qué calor! ![]() Unos km antes de llegar a Candelario Mancilla, empezamos a divisar el lago O´Higgins. Las flores primaverales adornan los campos. ![]() Siempre caminamos ritmo lento. Nuestro amigo belga sufre su tendinitis. Al borde del lago se sitúa la aduana chilena. Sigue en nuestra cabeza: “Ojito con Hans, que os la puede jugar”. Pasamos aduana, y 1 km más para llegar al hospedaje del lugar, en la casa de los descendientes de un pionero que dio nombre a este asentamiento, Candelario Mancilla. ![]() ![]() Nuestra ruta para GPS: es.wikiloc.com/ ...id=3758791 (Ojo al llegar a la Laguna Larga, en la zona argentina, por donde hice un tramo incorrecto con el GPS, subiendo a una zona alta, y teniendo que bajar por unos precipicios de miedo. Lo adecuado es dejar la Laguna Larga a tu izquierda) Nos recibe Héctor, nieto del pionero, y hermano de Ricardo, el de los caballos, que no está en casa. Esto es la auténtica Patagonia profunda, un lugar a 3 horas en barco del último pueblo de la Ruta Austral, Villa O´Higgins. No hay nada más, sólo una humilde casita con algunos anexos, en la que ofrecen alojamiento a turistas en habitaciones muy modestas o en camping. La reserva que habíamos hecho con Hans…….ni caso. Una turbina hidráulica genera la electricidad. Hablamos sobre el equipaje, buscando alguna posible solución, pero a Héctor no le interesa ayudarnos. Turistas de varias nacionalidades, la mayoría de camping. Compartimos conversación con algunos. Héctor prepara la cena, acaba de matar una vaca, carne fresca. Tras la cena, todos los días tiene unos minutos de comunicación por radio, su único medio de conexión con el mundo exterior. Encontramos una solución para recuperar nuestro equipaje, aunque no será de inmediato, nos obligará a quedarnos en Villa O´Higgins más tiempo del previsto. En la Patagonia profunda, gentes de pocas palabras. Nos vamos ganando la confianza de Héctor, y empieza a contarnos sus historias, curiosas, como corresponde a la experiencia de vivir en un lugar así. Y la historia de su abuelo, Candelario Mancilla, con mezcla de sangre mapuche, el primero en llegar a estas tierras, y que ostenta el honor de dar nombre al lugar. Héctor estaba sorprendido por nuestra paciencia y tranquilidad ante estas circunstancias, pensando que esta situación pondría de los nervios a cualquiera. Al día siguiente, nos vamos a visitar el glaciar O´Higgins. Sólo un día por semana podemos realizar la navegación por el lago O´Higgins hasta el gran glaciar (hasta 3 días por semana en verano). La nave Quetru sale temprano de Villa O´Higgins , recala en Candelario Mancilla, y continúa navegación turística hacia el glaciar O´Higgins, regresando de nuevo a Villa O´Higgins en un día completo de navegación. Hemos programado nuestro mes de viaje buscando encajar este traslado en este día. Un día crítico. Estamos sin maletas, pero no podemos esperar una semana más, ni conviene dar marcha atrás. O sea que, decidimos continuar adelante con los planes, con el compromiso de disponer de nuestro equipaje en 4 días, aprovechando una navegación especial para abastecimiento de suministros a los pobladores del lago. Al organizar un viaje de este tipo, a lugares de tan difícil accesibilidad, con traslados críticos, con climatología incierta que puede obligar a suspender accesos…….ya habíamos asumido que algo podría fallar, que los planes podrían romperse en cualquier momento. Aceptar estos riesgos formaba parte de la aventura. Poner en marcha el plan B, tirando hacia atrás, sería un fracaso. Todo nuestro empeño estaba en seguir adelante, buscando la mejor solución. Tal como habíamos planeado, nos embarcamos en Candelario Mancilla, para ir hasta el frente del glaciar O´Higgins. En este mismo barco llegaba Ricardo, con quién terminamos de arreglar el transporte de nuestras maletas. Un día muy nublado, que resta vistosidad a la navegación, aunque aceptablemente bueno en estas latitudes. Necesitamos 2 horas para aproximarnos a la pared del glaciar, durante las cuales navegamos por el lago O´Higgins. ![]() Cuanto más nos adentramos hacia el Campo de Hielo Sur, más pensamos en lo lejos que estamos de todo. Resulta escalofriante pensar que las montañas que tenemos ante nuestros ojos, no han sido exploradas jamás por seres humanos, que muchos de estos lugares están absolutamente vírgenes, sin ninguna pisada humana. ![]() ![]() Desde el Campo de Hielo Sur se descuelgan varios glaciares sobre el lago. No hace mucho tiempo, la mayoría de ellos caían sobre el mismo glaciar O´Higgins, glaciar en fuerte retroceso, que en los últimos 100 años ha perdido 15 km. Sobre las paredes rocosas, observamos las huellas de la altura que ocupaba el glaciar. ![]() Más escondido queda el glaciar Chico, cubierto por cenizas del volcán Lautaro. ![]() La llegada al gran glaciar O´Higgins resulta imponente. Ver cómo va surgiendo ante nuestra vista ese gigante, con 2 lenguas cayendo desde los hielos continentales……¡tan lejano! ¡uf! ![]() ![]() Casi 4 km de frente de glaciar, con paredes de hasta 80 m de altura. Impresionan las formas caprichosas del hielo, sus colores. Unas estructuras con grandes grietas, causando desprendimientos continuos, que contemplamos, que oímos, que sentimos en forma de olas. ![]() ![]() ![]() ![]() Por ello, no resulta extraño el retroceso tan rápido del glaciar………se desmorona en continuo. Esto es tan lejano……….tan inaccesible…….¡Brutal! ![]() Turno para la gracia típica: el whisky con piedritas de glaciar Sólo nos permitimos ser visitantes por unos instantes, dejando que la naturaleza siga su ritmo, sin estorbos. Regresamos navegando, de nuevo a Candelario Mancilla. ![]() ![]() ![]() ![]() Tras el breve atraque en Candelario Mancilla para embarque/desembarque de algunos pasajeros, continuamos nuestra travesía por el lago. Chile a un lado, y Argentina al otro. Pero, más allá de fronteras políticas, un territorio común de naturaleza salvaje: la Patagonia. ![]() ![]() ![]() En dirección a Villa O´Higgins, el lago se estrecha, un brazo con laderas cubiertas de bosques, cumbres nevadas……..ningún indicio humano. ![]() Desembarcamos en Bahia Bahamóndez, el punto donde finaliza la mítica Ruta Austral . ![]() Bus a Villa O´Higgins, a 7 km. Y, nuestras maletas, en Argentina. Hans nos ofrece sus mayores disculpas. Estamos obligados a quedarnos un día más en Villa O´Higgins, en espera de maletas, por lo que no dispondremos de medio de transporte para salir del pueblo un día más tarde (bus sólo 2 veces por semana). Hans se compromete a buscarnos un transporte. Ecuador del viaje. En 2 semanas hemos caminado más de 200 km. A partir de ahora, continuaremos aventuras por la Región de Aysén, en la húmeda Patagonia chilena. Etapas 10 a 12, total 39
La Villa es el último pueblo de la Ruta Austral, asentada en la desembocadura del río Mayer hacia el lago O´Higgins. Para entender la vida en la Villa, hay que ser conocer su lejanía.
El pueblo fue fundado en el año 1966, pero se mantuvo incomunicado por cualquier tipo de carretera hasta el año 1999, año en el que se finalizó la construcción de la actual ruta, la Austral, 1239 km que unen Puerto Montt con Villa O´Higgins. Ya no hay más carretera para continuar hacia el sur de Chile, zona ocupada por el Campo de Hielo Sur. Una avioneta para 5 pasajeros a Cohyaique 2 veces por semana y un autobús también un par de veces por semana a Cochrane y otros tantos a Tortel, son las vías de comunicación y acceso de suministros a la Villa. Claro que, las condiciones meteorológicas no siempre permiten el funcionamiento de estos transportes. El pueblo chileno más Cercano, Tortel, está a 150 km por ripio, que se recorren en 5 horas, puesto que en medio hay que cruzar un fiordo en barcaza. Pero, Tortel, no es más grande que Villa O´Higgins y carece también de muchos de los servicios que solemos tener a la vuelta de la esquina. Esto significa que, algo tan simple para nosotros, como realizar una gestión en el banco, aquí requiere varios días…varias horas en bus a Cochrane, varios días de permanencia esperando bus de regreso…….. Si se trata de una gestión más compleja, que exija viajar a la capital provincial, Coyhaique, entonces ya hablamos de más de 500 km por ripio y muchas, muchas horas de viaje. ![]() Un lugar y una situación donde resulta obligado aplicar el dicho de las gentes patagónicas: “En la Patagonia, quién se apura, está perdiendo el tiempo” Aquí, esto es la auténtica realidad, ésta es realmente la Patagonia profunda. Donde nos vimos desprotegidos, pero al mismo tiempo nos sentimos arropados. Donde la Patagonia se siente de verdad. Vivir aquí, es, más que nada, una cuestión sentimental. Como la historia de Jorge, o la de Julia, que salieron de sus países, de sus casas, para recorrer mundo, y aquí se quedaron porque encontraron su lugar. Dicen que es difícil explicarlo, es la llamada de la naturaleza. Me gustó conocer a Karol y a Peter, una encantadora pareja de jubilados norteamericanos, llenos de vitalidad, que estaban viajando por Sudamérica durante varios meses, y recorriendo la Ruta Austral en bici. Está claro que cumplir años no siempre hace perder la juventud. Con ellos, coincidimos en Candelario Mancilla, donde compartimos momentos de conversación. Y en Villa O´Higgins volvemos a coincidir. Nuestros ánimos no están en el mejor momento. El tiempo, nublado y lluvioso no colabora. Nuestras maletas, abandonadas; nosotros seguimos con lo puesto. Mi idea era hacer el trekking por el Valle del río Mosco, hasta el glaciar Mosco, que ocupa un día completo. Nos avisaron de un desprendimiento en la ruta que impedía llegar hasta el glaciar, pero esto no iba a ser impedimento. El inconveniente estaba en el clima. Sin pantalón de aguas, sin ropa para cambiarnos, todo estaba en las maletas que quedaron en la aduana argentina. Como vamos a estar más días por aquí, lo dejaremos para mañana o pasado. Aprovechamos para tomarnos un día tranquilo y descubrir secretos de este aislado lugar, de sus gentes y de sus paisajes,………charlas con la gente del pueblo, paseos por los alrededores, consultas de Internet, algo de lectura……..mientras cae la lluvia. Horas de conversación, en las que nos vamos dando cuenta de los sentimientos de sus gentes, del amor por su tierra, por su lluvia, por sus bosques, por su agua, y por el aislamiento que les hace vivir con calma, con paciencia, con saber esperar, porque cualquier problema se termina solucionando, sólo es cuestión de tiempo. Dicen que, sólo cuando llueve, estás conociendo la auténtica Patagonia. Esta Patagonia es auténtica del todo. Los habitantes de la Villa aman la lluvia, están enamorados de su agua y de su verdor, y eso se lo deben a su lluvia, es la esencia del lugar. Mejora el tiempo…….no mucho……en la húmeda región de Aysén, la lluvia es una compañera incansable. No se nos ocurrió mejor idea que alquilar unas bicis para recorrer los alrededores del pueblo. Aunque…….¡Como no tenían remos, .............. hicimos lo que pudimos!. ![]() Nos internamos en los bosques de la Patagonia húmeda, en sus ríos, sus lagos, contemplando sus montañas, descubriendo nuevas flores y nuevos árboles, desconocidos para nosotros hasta entonces. Empezando a conocer el coigüe, ese árbol característico de Aysén. Descubriendo nuevos animalitos, que se pasean por los bosques. Un paisaje en un verde rotundo, que cualquier tímido rayo de sol hace brillar intensamente. ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() Cada vez son más las personas que recorren la Ruta Austral en bici. Experimentamos un poco esa sensación. Empezamos con mucho entusiasmo, pero, pedalear por ripio bajo la lluvia, pronto hizo descender nuestro nivel de entusiasmo. ¡Qué duro debe de ser recorrerla durante días y días! ![]() Cuando hablamos de la Patagonia, muchas veces pensamos sólo en Argentina…….en esas pampas infinitas, en llanuras llenas de ovejas, en las montañas de nieves perpetuas. Pero existe esta otra Patagonia, la chilena, la región de Aysén…….una región olvidada, incomunicada, encerrada entre agua. Agua de sus lagos y fiordos, y agua helada de sus Campos de Hielo, que impiden las conexiones, tanto hacia el norte como hacia el sur de su país. Una región de Aysén que se siente auténticamente patagónica, más unida a su país de verdad, La Patagonia, (compartida con Argentina), que a su país político (Chile). ![]() El puente sobre el río Mayer fue un hito en su día. Antes se cruzaba en un cable, que todavía podemos observar. ![]() Llegando a Villa O´Higgins por la Ruta Austral ![]() Nuestras maletas: Hans se había comprometido a arreglarnos el transporte para salir de O´Higgins cuando llegasen las maletas. Lo hemos buscado y no ha aparecido. Tampoco contesta al móvil. Al día siguiente, otra mañana de lluvia continua ……..relax………conversación. Tarde nublada, sin lluvia. Aprovechamos para recorrer a pie los senderos de los alrededores del pueblo. Sendero al Cerro Santiago: Sólo subiendo un poco, ya llegamos a un mirador sobre la Villa y las montañas que la rodean. Pero, se trata de seguir ascendiendo por el sendero hasta lo alto del cerro. Subimos y subimos por un camino extremadamente resbaladizo, entre la exuberante vegetación de la región. Cada día descubro plantas nuevas. ![]() Termina resultando muy peligroso, por lo que no conseguimos llegar hasta lo más alto. Las vistas desde arriba, con muchas nubes. ![]() ![]() Sendero Altavista: Un sendero en medio del bosque, acompañados por los pajarillos, durante el que disfrutamos de algunas vistas, pasando por varios miradores, como el mirador sobre el glaciar Mosco, otro sobre el valle del río Mayer, y el mirador de la laguna El Loco. ![]() Ruta en GPS: es.wikiloc.com/ ...id=3793984 Tema maletas: Por la tarde, nuevas noticias. Se suspende la navegación de los pobladores (ésa que estaba tan confirmada, que era tan segurísimo que saldría), retrasando el envío de maletas hasta la siguiente navegación para turistas. Más días sin maletas. Menos mal que en diciembre ya opera la Quetru 2 veces por semana. Cambiamos planes. Nos vamos mañana a Caleta Tortel, como preveíamos inicialmente. Pedimos que nos envíen las maletas por un transporte cuando sea posible. Hay que confiar. ¡Será posible sobrevivir una semana con lo puesto!. No resulta tan incómodo lavar la ropa por la noche y dejarla secando en la estufa. Además, nos han prestado cargadores para poder recargar la batería de los móviles. Al final, nos vamos sin haber hecho la ruta del glaciar Mosco por la lluvia, y me da bastante rabia, pues era nuestro principal objetivo en Villa O´Higgins. Noche de conversación con Fili. Ya nos hemos adaptado al pueblo, ya entendemos su sentir, su forma de vida, y ¡qué penita nos da marcharnos! En la Villa hay varias opciones de alojamiento. Acertamos eligiendo El Mosco. Nos sentimos como en casa. Compartimos buenas charletas con sus chicas: Fili, Marcela y Julia. Etapas 10 a 12, total 39
Si no dispones de vehículo propio, no te puedes marchar de Villa O´Higgins cuando quieras. Un pequeño autobús recorre, 2 veces por semana, los 155 km de distancia a Caleta Tortel, en 5 h. Se trata de un autobús “directo”, ¡claro!, no hay nada en medio, ni una aldea, ni una casa.
El fin de la Carretera Austral es el principio para nosotros. Nada más salir de la Villa, es imposible apartar la mirada de la ventanilla. Una naturaleza intacta por el hombre. Lagos, ríos, valles, montañas, bosques, cascadas cayendo por todas partes. Mirando para esas montañas te das cuenta de que por muchos de estos lugares no ha pasado nadie jamás. Ni una casa, en esta carretera que fue finalizada en el año 1999. De camino, tuvimos la suerte de ver un huemul, pequeño ciervo, que es el símbolo del país. ![]() En 2 horas y media, llegamos a Río Bravo, un atisbo de civilización en el embarcadero, donde montamos en la barcaza para cruzar el fiordo Mitchell. 45 minutos de navegación (y ya llevamos unas cuantas navegaciones) por un fiordo entre montañas. Seguimos en autobús. Sólo otro pasajero más, un trabajador turístico de Villa O´Higgins, con quién intercambiamos impresiones sobre la Patagonia. ![]() ![]() El paisaje, yo creo que, incluso, si cabe, va aumentando en espectacularidad. Tras el cruce el El Vagabundo, aparece el gran río Baker, el más caudaloso de Chile……..boquiabiertos íbamos todo el rato. 5 horas que se han pasado volando, han sabido a poco, tirándome de los pelos por no tener un coche para ir parando poco a poco. No da tiempo de asimilar todos estos paisajes. Al llegar a Caleta Tortel buscamos alojamiento en la oficina de turismo (aunque preferimos llevarlo reservado, aquí las cosas no funcionan así). Nos instalamos en una agradable cabaña. ![]() Caleta Tortel, 500 habitantes, es un pueblo singular. Zona típica, donde las calles quedan sustituidas por una red de pasarelas de madera de ciprés, con montones de escaleras, que permiten descender hasta la costa. ![]() Enclavado en un fiordo del Pacífico, en la desembocadura del río Baker. Un pueblo entre los 2 campos de hielo continentales. Nada de cemento, nada de asfalto. La madera es la esencia del pueblo, en sus casas, en sus calles, en sus embarcaderos, y en los árboles de su entorno. Y la madera es también su principal forma de vida, y el origen de su creación en 1955. ![]() ![]() Un lugar donde todas las casas tienen jardín. El jardín es su propio entorno, la vegetación selvática que envuelve cada casita. Tan enorme variedad vegetal, casi inimaginable, con la alegría en primavera del colorido de sus flores. Y si a esto añadimos el entorno montañoso, entonces resulta una belleza desbordante. ![]() ![]() La zona era frecuentada desde antiguo por poblados nómadas Kaweskar, que llegaban en canoa. Una población de origen indígena, extremadamente amable y acogedora. “Aquí todos somos amigos, también los visitantes”, nos decían. Te sientes en un lugar mágico. A Caleta Tortel llega la carretera desde el año 2004; antes sólo se accedía en barco remontando el río Baker. Y, los barcos, las lanchas, siguen siendo, precisamente, su principal medio de transporte. Mar, fiordo, río,………..el agua es su medio. Madera, agua y vegetación son las señas de identidad de Tortel. En Tortel casi siempre llueve. Hoy no, hoy tenemos sol. Recorrimos km y km de sus pasarelas, fijándonos en su vegetación, saludando a sus gentes, y obteniendo distintas perspectivas de su pintoresca configuración. ![]() Y, como sus antiguos visitantes, y como siguen haciendo sus pobladores hoy en día, no queríamos pasar por aquí sin navegar por sus aguas. Alquilamos una lanchita, y navegamos por las aguas tranquilas del fiordo. ![]() ![]() ![]() Desembarcamos en la Isla de los Muertos, una isla formada en la desembocadura del Baker por deposición de sedimentos. Unas cuantas cruces de madera recuerdan la trágica historia del lugar. En torno a un centenar de chilotes (indígenas de Chiloé) murieron en la isla a principios del siglo XX. Habían sido reclutados para trabajar en la explotación de la madera, y su muerte sigue siendo un misterio. Aunque se ha intentado investigar, no se han podido encontrar restos humanos, debido a la rápida descomposición por la elevadísima humedad de la zona. Sólo se han encontrado botones y similares, que no han permitido desvelar el misterio. Diferentes teorías……..tal vez el escorbuto, tal vez envenenados por marea roja, o tan vez intencionadamente?? Unos fueron enterrando a los otros, por lo que las muertes ocurrieron escalonadamente, pero en escaso intervalo de tiempo…….Un misterio. ![]() ![]() Todavía se puede ver la maquinaria del barco que la Sociedad Explotadora del Baker usaba en los inicios de explotación de la madera en esta zona. Continuamos la navegación por el delta del Baker. Una bonita cascada, que antes se podía visitar, pero ahora, al dueño no le apetece recibir turistas en su cascada. ![]() Nos adentramos en estrechos brazos del Baker, sólo navegables en marea alta. Casi parecen manglares. ![]() ![]() Subiendo escaleras, unas vistas desde las alturas ![]() Al día siguiente............. En diciembre todavía hay pocos turistas en Tortel, poquísimos, y no ha sido posible formar un grupo para visitar el glaciar Steffen, que cae desde el Campo de Hielo Norte, en el Parque Nacional Laguna San Rafael. Requiere unas horas de navegación y un par de horas de caminata (coste 280.000 pesos). Era mi mayor ilusión en Tortel, pero no ha podido ser. El pueblo es también base para visitar el glaciar Montt, en el Campo de Hielo Sur, aunque, en este caso, la navegación requiere muchas horas en barcos rudimentarios de pesca. Así que, nos quedamos un día menos en Tortel. Día cálido y soleado, muy luminoso, cumbres despejadas……….. Por la mañana, recorremos el sendero del cerro de Tortel. Un paseo tranquilo, con unas vistas absolutamente preciosas. Ascendiendo hacia el cerro, disfrutamos del magnífico paisaje de la desembocadura del Baker, entre montañas con cumbres nevadas, cascadas que caen desde las alturas…….. Un día ideal. ![]() Caminando, bordeamos la parte alta del cerro, girando nuestra perspectiva visual. Contemplamos las islas que se han formado sobre el Baker. ![]() Los fiordos que se encuentran entre los Campos de Hielo, por donde navegaban los kaweskar, indígenas extinguidos. Costas que después “descubrió” Magallanes. Territorios explorados por varios exploradores, como Steffen. ![]() El sendero continúa descendiendo del cerro, hasta que llegamos al extremo del poblado, recorriendo las pasarelas de madera por toda la costanera. ![]() ![]() ![]() ![]() Ruta en GPS: es.wikiloc.com/ ...id=3760779 Para recorrer Caleta Tortel, hay que estar dispuesto a subir y bajar cientos y cientos de escaleras de madera. ![]() Y volviendo a subir escaleras, nos despedimos de este sitio tan pintoresco. Uno de esos pueblos donde todos te saludan. ![]() Etapas 10 a 12, total 39
📊 Estadísticas de Diario ⭐ 4.9 (37 Votos)
![]() Total comentarios: 91 Visualizar todos los comentarios
CREAR COMENTARIO EN EL DIARIO
Diarios relacionados ![]() ![]() ![]() ![]() ![]()
![]() |