Día 13: 20 de agosto
Otra vez hemos tenido atasco para salir de Filadelfia. La verdad es que estamos un poco quemados, pero bueno. El objetivo del día era visitar por la mañana el Condado de Lancaster para por la tarde conducir hasta Washington DC.
El condado de Lancaster es famoso porque en él viven los Amish. Todos los conocemos, al menos por la película “Único testigo”, pero pasear por los pueblos donde viven es bastante… no sé muy bien como decirlo, tal vez relajante. También, aunque esto es menos conocido, es famoso por tener muchos puentes de madera cubiertos, del tipo del puente de “Los puentes de Madison”. Son más difíciles de encontrar que los amish.
Los amish llegaron a Estados Unidos formando parte del gran colectivo emigrante procedente de Europa, concretamente alemanes y suizos. Como muchos, llegaron al Nuevo Mundo para poder practicar sus costumbres de manera libre (como hicieron los primeros colonos, puritanos perseguidos en sus países). Su corriente religiosa es la cristiana-anabaptista y hablan una especie de dialecto medio alemán, aunque, por supuesto, se expresan perfectamente en inglés.
Dicho esto, para visitarles hay que acceder al condado por la carretera 30, recorrer ésta y la 340 desde su intersección hasta Lancaster. Los pueblos donde más amish se ven son Intercourse, Paradise y Bird-in-hand.
El condado de Lancaster es famoso porque en él viven los Amish. Todos los conocemos, al menos por la película “Único testigo”, pero pasear por los pueblos donde viven es bastante… no sé muy bien como decirlo, tal vez relajante. También, aunque esto es menos conocido, es famoso por tener muchos puentes de madera cubiertos, del tipo del puente de “Los puentes de Madison”. Son más difíciles de encontrar que los amish.
Los amish llegaron a Estados Unidos formando parte del gran colectivo emigrante procedente de Europa, concretamente alemanes y suizos. Como muchos, llegaron al Nuevo Mundo para poder practicar sus costumbres de manera libre (como hicieron los primeros colonos, puritanos perseguidos en sus países). Su corriente religiosa es la cristiana-anabaptista y hablan una especie de dialecto medio alemán, aunque, por supuesto, se expresan perfectamente en inglés.
Dicho esto, para visitarles hay que acceder al condado por la carretera 30, recorrer ésta y la 340 desde su intersección hasta Lancaster. Los pueblos donde más amish se ven son Intercourse, Paradise y Bird-in-hand.
Nosotros empezamos por la 30, pero está muy poco señalizada, aunque sí que te avisan de lo que vas a ver. El paisaje de las granjas de los amish es precioso.
Una vez en Leaman Place hemos girado por Belmont Road para ir a Intercourse y justo en la carretera nos hemos encontrado con un puente cubierto y con los primeros amish.
Existen granjas-museo que se pueden visitar y te dan una idea de cómo son y cómo viven los amish, pero nosotros optamos por “callejear” por el campo y disfrutar de las vistas.
Tras pararnos muchas veces y hacer muchas fotos llegamos a Intercourse y dimos una vuelta por el pueblo. Hay muchos amish por la calle, ya que está llena de negocios que les pertenecen: tiendas de muebles y de artesanía, en las que las mujeres confeccionan unos quilts preciosos. El pueblo es muy bonito también.
Después de pasear un rato (hacía un calor horrible) fuimos a un sitio que se llama Kitchen Kettle Village, una parada para turistas con tiendas de artesanía y de productos rurales fabricados por amish, en la que comimos las palomitas dulces más ricas de nuestra vida. Los amish, teóricamente, viven sin emplear la tecnología, sin lujos, sin ostentar, etc., pero me pregunto cuánto de estos que se ven por la calle vivirán así, ya que regentan negocios que parecen bastante lucrativos, montan en coche (aunque ellos no conduzcan) e incluso usan el móvil.
Después de esto fuimos a Bird in Hand a comer a un restaurante de comida típicamente amish, Plain & Fancy farm, en el que no hay ningún amish. Comimos sopa de pollo con pasta, salchichas y el famoso pastel amish Shoofly, muy muy dulce.
Pero no todo son granjas amish en el condado de Lancaster. También hay casas muy bonitas en las que yo me apuntaba a vivir.
Pero no todo son granjas amish en el condado de Lancaster. También hay casas muy bonitas en las que yo me apuntaba a vivir.
Tras la comida fuimos a Manheim, ya que sabíamos que cerca de ese pueblo había dos puentes cubiertos, pero tras preguntar a tres personas, ninguna tenía ni idea de dónde estaban los Covered bridges, alucinante, así que desistimos y nos fuimos hacia Washington.
Teníamos previsto llegar a las 5 de la tarde y por tanto, nos daba tiempo a visitar el cementerio de Arlington, pero justo después de dejar el coche en el parking se puso a llover bastante, así que decidimos ir al hotel. Una vez allí hemos ido a comprar unas cervezas para esperar a que dejara de llover en la habitación.
Cuando terminó la lluvia cogimos Pennsylvania Ave, que era donde estaba nuestro hotel, el Melrose Hotel, hasta el número 1600, es decir, donde está la Casa Blanca. El hotel estupendo.
Teníamos previsto llegar a las 5 de la tarde y por tanto, nos daba tiempo a visitar el cementerio de Arlington, pero justo después de dejar el coche en el parking se puso a llover bastante, así que decidimos ir al hotel. Una vez allí hemos ido a comprar unas cervezas para esperar a que dejara de llover en la habitación.
Cuando terminó la lluvia cogimos Pennsylvania Ave, que era donde estaba nuestro hotel, el Melrose Hotel, hasta el número 1600, es decir, donde está la Casa Blanca. El hotel estupendo.
Después de esto de vuelta al hotel. No había prácticamente nada abierto, así que cenamos en la habitación del hotel unas ensaldas que habíamos comprado en el deli de al lado. El día había sido largo y estábamos cansados.
VISITAR EL CONDADO DE LANCASTER: http://www.discoverlancaster.com/towns-and-heritage/amish-country/index.asp
ALOJAMIENTO WASHINGTON:
Melrose Hotel:
http://www.melrosehoteldc.com/