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Hablaremos ahora de lo que creo que es la parte más bonita de la ciudad, el Vieux Montreal.
En el Vieux Montreal o casco antiguo se encuentra el germen de la ciudad, ya que allí está la antigua plaza Place d’Youville donde quedaron las ruinas de los primeros fortines en Montreal. En ese lugar se construyó el Museo Pointe-à-callière, dedicado a arqueología e historia natural. Entre las salas permanentes están el espectáculo multimedia, “Ici naquit Montréal”; ¿Piratas o corsarios?, una arqueo-aventura (en la antigua aduana) y la estación de bombeo D’Youville (exposición de la primera estación de bombeo para la electricidad). También hay exposiciones temporales (cuando fuimos nosotros, sobre vikingos). Allí encontramos también las ruinas del antiguo Fuerte Ville-Marie.
El barrio histórico de Montreal está delimitado por antiguas fortificaciones, que estaban allí por la presencia del gran Rio Saint-Laurent. Estas se derrivaron en el siglo XIX.
Ya he comentado que Paul de Chomedey, Sieur de Maisonneuve, fundó la ciudad en 1642. Lo hizo en nombre de la Société Notre-Dame de Montreal para la conversión de los indios en la Nueva Francia, una empresa creada por los sulpicianos Jean-Jacques Olier y Jérôme Le Royer , Sieur de La Dauversière. La compañía adquirió el señorío de la isla de Montreal y trajo los primeros colonos. Las hermanas del Hospital de Montreal, bajo la dirección de Jeanne Mance, construyeron y explotaron el primer hospital en Montreal, el Hotel-Dieu de Montreal, que se terminó en 1645.
Después de la quiebra de la Compañía de Notre-Dame, los sulpicianos, que llegaron en 1657, se convirtieron en 1663 en señores de Montreal.
Se debe François Dollier Casson el establecimiento de la primera red de calles de la colonia. Entre estas se incluyen la calle de Notre-Dame, la Rue Saint-Paul y la Rue Saint-Jacques. Los edificios de la época son el Hotel-Dieu de Montreal, el antiguo Seminario de Saint-Sulpice y la iglesia de Notre Dame, que será sustituida después por la basílica de Notre-Dame.
A principios del siglo XVIII, el nombre de Montreal (que originalmente significaba la isla)sustituye al gradualmente de Ville-Marie.
Nueva Francia pasó a ser una colonia británica en 1763. La desconfianza de las autoridades británicas a los religiosos católicos causó la salida de varios de ellos fuera del casco antiguo de Montreal.
Los incendios de 1765 y 1768 arrasaron casi la mitad de los edificios en el Viejo Montreal. En mayo de 1765, el fuego destruyó alrededor de 110 casas antes de afectar al antiguo hotel Callière y al ex Hospital Général. En abril de 1768, 88 casas entre la calle Saint-Jean-Baptiste y Hotel Vaudreuil se quemaron, así como el convento de la Congregación de Notre-Dame. En los años siguientes, la ciudad fue reconstruida de una forma mucho más densa.
El 6 de junio de 1803 un gran incendio destruyó la cárcel, la iglesia y las dependencias de los jesuitas, una docena de casas y la antigua residencia del Marqués de Vaudreuil. Dos especuladores compraron el campo de Vaudreuil; ofrecen una tercera parte a la ciudad y el resto fue dividido en siete lotes. El espacio concedido a la ciudad se convirtió en la nueva plaza del mercado, llamado Marché Neuf, antes de tomar el nombre actual de la Plaza Jacques-Cartier. El espacio ocupado por la iglesia de los jesuitas se convirtió en el Place Vauquelin, y en los antiguos jardines de los jesuitas en 1873 acabará instalando el Ayuntamiento de Montreal.
En 1821, un incendio destruyó la Mansion House, un hotel de lujo que data de 1815, que albergó la primera biblioteca pública en Montreal con más de 7000 volúmenes. Se sustituye por el British-American Hotel, que fue el primer teatro permanente adjunto al Theatre Royal. El hotel se quemó en 1833 y 1845 y aquí se construirá el Mercado Bonsecours.
El 1849 un motín provoca que el Parlamento se traslade a la nueva capital, Ottawa.
Uno de los edificios más importantes es el Marché Bonsecours, edificio de arquitectura neoclásica que por muchos años fue el símbolo de la ciudad. El mercado, catalogado como uno de los edificios patrimoniales más bellos de Canadá, fue inaugurado en 1847 aunque todos sus trabajos de construcción culminaron fue en 1852. Tiene 4 niveles abiertos al público, en los que se pueden encontrar tiendas boutique, restaurantes y salas para eventos.
Notre-Dame-de-Bon-Secours, construida en 1771, es una de las iglesias más antiguas de la ciudad de Montréal, Québec. Se encuentra ubicada en la Rue St.-Paul, justo al lado del mercado anterior. Se edificó sobre las ruinas de una capilla anterior.
St. Marguerite Bourgeoys, la primera maestra de la colonia de Ville-Marie y fundadora de la Congregación de Notre Dame, reunió a los colonos para construir una capilla en 1655.
En 1673, al regresar de Francia, Bourgeoys trajo una imagen de madera de Nuestra Señora de la Buena Ayuda (Bon-Secours). La iglesia de piedra se completó en 1678. Se quemó en 1754. El relicario y la estatua se rescataron y se colocaron sobre la entrada de la iglesia, reconstruida en 1771.
Después de que Montreal fue conquistada por las fuerzas británicas durante la Guerra Francesa e India, a la iglesia asistieron tropas y familias irlandesas y escocesas.
En el siglo XIX, la capilla se convirtió en un lugar de peregrinación para los marineros que llegaban al Puerto Viejo de Montreal. Hacían ofrendas a la Virgen en agradecimiento por su "buena ayuda" para los viajes marítimos seguros. En 1849, Mons. Ignace Bourget, obispo de Montreal, regaló a la capilla una estatua de la Virgen como estrella del mar, que se colocó en lo alto de la iglesia que domina el puerto. La capilla a menudo recibe el sobrenombre de la Iglesia de los Marineros.
La capilla ahora también alberga el Museo Marguerite Bourgeoys, dedicado a la vida de la primera maestra y a la historia temprana de Montreal y el sitio de la capilla. Debajo de la capilla se han descubierto artefactos coloniales franceses y de las Primeras Naciones, junto con los cimientos de la primera capilla y las fortificaciones de la colonia. En 2005, los restos mortales de Marguerite Bourgeoys fueron devueltos a la iglesia, donde ahora yace en el santuario.
Bourgeoys abrió su primera escuela en 1658 en la rue Saint-Paul, en un terreno sobre el cual se encontraba un viejo establo. Regresö a Francia en 1659 para reclutar a otras institutrices y trajo con ella otras 3 acompañantes, las primeras Religiosas de la Congrégation de Notre-Dame. En 1663, se encargó de recibir a las Hijas del Rey que Luis XIV había reclutado para poblar la colonia.
Margarita Bourgeoys y sus acompañantes ayudaron a los colonos de Ville Marie durante la hambruna, abrieron una escuela para instruir a los jóvenes a tener una casa y una granja. La congregación contaba con 18 religiosas de las cuales 7 eran nativas de Canadá. Dos amerindias se unieron también a la congregación.
En 1693, la madre Margarita da la dirección de la congregación a Marie Barbier, primera nativa canadiense que se unió a la orden, que recibió al fin la aprobación eclesiástica en 1698.
La religiosa murió el 12 de enero del 1700.
Enfrente de la capilla hay un bonito edificio antiguo que albergaba el restaurante Las hijas del rey (hoy abandonado; en Quebec hay otro). Las hijas del rey eran mujeres solteras, de 15 a 30 años, que querían emigrar a la colonia francesa conocida como Nueva Francia para casarse allí. El rey de Francia actuaba como tutor, pagando los gastos del viaje y una dote de 50 libras si contraían matrimonio. La mayoría de ellas eran huérfanas y de origen modesto. Las primeras llegaron a Canadá en 1663.
La bonita basílica de Notre-Dame es otro de los edificios más destacados. La entrada cuesta 14 dólares canadienses.
El Superior de los sulpicianos, François Dollier Casson, fue encargado de hacer el plano de la primera iglesia parroquial. Estuvo situada en el eje de la Rue Notre Dame. Su construcción se inició en 1672 y fue ampliada por primera vez en 1708. Inicialmente no tenía campanario ni fachada, por falta de medios.
A pesar de las expansiones, la iglesia se volvió demasiado pequeña para la creciente congregación: en 1819, la iglesia solo podía albergar a 3.000 de los 15.000 fieles; los demás debían asistir a la misa dominical desde la explanada.
Al sur de esta primera iglesia se construye una basílica de piedra. Debemos su concepción al arquitecto James O' Donnell de Nueva York, en estilo neogótico. Su construcción se inicia en 1824 y dura hasta 1829, fecha de la inauguración oficial. La arquitectura de la nueva iglesia de Notre-Dame toma su ejemplo de las dos torres de Notre-Dame de Paris y Saint-Sulpice. A pesar de las condiciones climáticas que impidieron que los trabajadores trabajaran en invierno, la construcción tomó solo 35 meses, desde 1824 hasta 1829, entre abril y octubre. Sin embargo, hubo que esperar más de diez años para la instalación de los campanarios, por falta de medios. O'Donnell murió en 1830 después de convertirse al catolicismo y su cuerpo fue enterrado en la cripta de la basílica, donde los guardianes de la iglesia erigieron una placa conmemorativa, aún visible hoy.
Al año siguiente fue destruida la primera iglesia. Eso generará el espacio de la Plaza de armas de Montreal que conocemos hoy con su Monumento a Maisonneuve y rodeada de edificios elevados.
Los 2 campanarios, obra del arquitecto Juan Ostell, se añadieron entre 1841 y 1843. Miden 69 metros. La torre oeste se llama « La Persévérance » y alberga una gran campana de 11,000 kilos, bautizada como Jean-Baptiste. La torre este se llama « La Tempérance » y posee un conjunto de 10 pequeñas campanas. Actualmente están en obras por daños provocados en invierno.
La melodía que se escucha a las horas en punto de 9 a 18 horas es la del carillón de Westminster, tocada por el Big Ben de Londres. A las 18 h se puede escuchar el Ángelus: 3 series de 3 golpes de la campana mayor, seguidos de un vuelo de las tres campanas mayores. El zumbido de Jean-Baptiste, como el de un abejorro, solo suena en ocasiones solemnes.
En 1865, la fachada de la iglesia se completó instalando tres grandes estatuas de San José (santo patrón de Canadá), la Virgen María (santo patrón de Montreal) y San Juan Bautista (santo patrón de Quebec).
La basílica en 1910 acogió el congreso eucarístico de Montreal. En el momento de su viaje en Montreal en 1982, el papa Juan Pablo II ascendió la iglesia al rango de basílica menor.
La Basílica de Notre Dame es la primera iglesia de estilo neo-gótico de todo Canadá y es la iglesia más importante de Montreal. Su techo, precioso, es una bóveda de color azul intenso decorado con estrellas doradas.
Resaltan sus vitrales que representan escenas de la vida religiosa y social de Montreal. En el lado oeste, representan escenas de la historia de Montreal, mientras que los del lado este representan episodios de la vida religiosa de feligreses famosos.
La fundación de la ciudad de Montreal, en 1642, está íntimamente ligada a la fundación, en París, de la orden de Saint-Sulpice, en 1641. Es durante este período, que también corresponde a la colonización de las Américas, que se encuentran, en 1635, Jérôme Le Royer de la Dauversière (1597-1659), fundador de las Hijas Hospitalarias de Saint-Joseph de La Flèche, y Jean-Jacques Olier (1608-1657), que fundará en 1642 el seminario de Saint- Sulpicio. Este encuentro condujo a la creación de la Société Notre-Dame de Montréal en 1641 y su adquisición de parte de la isla de Montreal. Los dos hombres querían construir allí una colonia y participar en la evangelización de los pueblos indígenas. Por lo tanto, trabajaron para traer varios colonos, principalmente de Francia. El 17 de mayo de 1642 poco más de treinta colonos tomaron posesión oficialmente de la isla de Montreal. Jeanne Mance (1606-1673) y Paul de Chomedey de Maisonneuve (1612-1676), cofundadores de Montreal, fueron parte de esta primera ola de colonos.
Una estatua de Chomedey de Maisonneuve fue erigida en su honor e inaugurada en 1895 en la Place d'Armes, frente a la Basílica. No fue hasta 2012 que Jeanne Mance fue reconocida como cofundadora de Montreal, al igual que su homólogo masculino. Las principales etapas de la fundación de la ciudad, así como varios de los personajes mencionados anteriormente, están representados en algunas de las pinturas y vidrieras de la Basílica, como comenté.
Jean-Jacques Olier, a través del seminario que fundó, se dedicó a la formación espiritual ya la iniciación pastoral de los futuros sacerdotes. En 1657, a petición de la Société Notre-Dame de Montréal, envió a Montreal los primeros 4 sulpicianos, entre los primeros graduados del seminario de París. Reemplazan así a los misioneros jesuitas que habían ejercido allí el ministerio hasta entonces.
En 1663, los sulpicianos recibieron autorización real para adquirir la isla de Montreal, que administraron hasta 1840. Como Señores de Montreal, muchas responsabilidades recayeron sobre ellos, pero también tenían el privilegio de cobrar tasas y cargos. Con estos ingresos, los sulpicianos participan en el mantenimiento de su comunidad y el desarrollo de las infraestructuras de Montreal.
Fue en 1678 cuando tuvo lugar la institución canónica de la parroquia de Notre-Dame de Montreal, de la que el superior de los sulpicianos era párroco de oficio.
El púlpito de madera es otra de las joyas que alberga la basílica así como el órgano de tipo francés compuesto por 7.000 tubos (cuyo sonido, puedo constatarlo, es excelente).
En el pasado, el sacerdote subía al púlpito para dar su sermón. Durante la segunda fase de decoración del interior de la basílica, el arquitecto Victor Bourgeau (1809-1888) adaptó los diseños originales de Henri Bouriché (1826-1906), y Louis-Philippe Hébert (1850-1917), un escultor muy conocido Quebequense, lleva a cabo la ornamentación. La Cátedra de la Verdad es la última obra creada bajo la dirección de Bourgeau antes de su muerte en 1888.
En su base están tallados en madera de tilo los dos profetas del Antiguo Testamento, Ezequiel y Jeremías. Arriba, en la barandilla, hay estatuillas que representan, entre otros, a Cristo, San Pedro y San Pablo. Debajo de la caja de resonancia, la paloma, símbolo del Espíritu Santo, está acompañada de un triángulo radiante en cuyo interior está inscrito el nombre de Dios en hebreo.
El órgano de la Basílica, inaugurado en 1891, fue construido por la firma Casavant Frères de Saint-Hyacinthe y desde entonces ha sido objeto de varias restauraciones. Con motivo de su 100 aniversario, su composición se incrementó a 7.000 pipas: la mayor de 32 pies (9,75 m) y la menor de ¼ de pulgada (6,35 mm).
Desde 2002, el órgano cuenta con 92 registros dispuestos en cuatro manuales, con pedalera. La consola actual data de 1962.
La Capilla Notre Dame du Sacré-Coeur se encuentra detrás del altar principal y se accede a ella desde la nave izquierda de la Basílica. En 1889, el párroco Léon-Alfred Sentenne encargó a los arquitectos Perreault y Mesnard la construcción de una capilla para utilizarla en ceremonias que reunían a un número limitado de personas, como bodas y funerales. Bautizada Notre-Dame du Sacré-Coeur e inaugurada el 8 de diciembre de 1891, muestra un estilo ecléctico rico en columnas, arcos, frisos y motivos esculpidos.
Un incendio la dañó gravemente el 7 de diciembre de 1978. Su reconstrucción fue confiada a los arquitectos Jodoin, Lamarre, Pratte y asociados, quienes sugirieron reconstruir los dos primeros niveles de forma idéntica, recurriendo a ebanistas, escultores y carpinteros que trabajan según los métodos de la época. La bóveda recibe un tratamiento moderno que permite la iluminación natural y el retablo, lo más espectacular de esa moderna obra, se encargó al escultor Charles Daudelin (1920-2001), quien diseñó una imponente obra en bronce de 20 toneladas, que mide 52 pies de alto por 17 pies de ancho (15,85 x 5,18). metros). La nueva capilla fue inaugurada en 1982. Hoy está reservada para la Adoración y la meditación, así como para bodas.
A la entrada encontramos la capilla Saint-Sacrement, cerrada con mamparas de vidrio y reservada al culto. El Santísimo Sacramento Santísimo está conservado en el sagrario del altar dedicado a los Beatos Mártires Sulpicianos de la Revolución Francesa. Junto a él está el altar dedicado a Santa Teresa de Lisieux, cuya estatua está firmada Elzéar Soucy (1876-1970). Está rodeado de pinturas de Ozias Leduc (1864-1955).
De 1870 a 1900, Rousselot y Bourgeau trabajaron un estilo y un simbolismo inspirados en la capilla inferior de la Sainte-Chapelle de París, especialmente por los colores elegidos, los motivos aplicados al pan de oro de la bóveda y los detalles de las columnas.
De la antigua iglesia de Notre-Dame se conservan seis pinturas que se han incorporado a la decoración actual, así como el Cristo en la cruz atribuido a Paul Jourdain dit Labrosse (1697-1769), que adorna el muro este, cerca de la entrada. El altar mayor de la antigua iglesia también se colocó en la capilla lateral dedicada a Santa Marguerite d'Youville.
El retablo es impresionante. En el fondo del retablo está tallado en madera un altorrelieve de la Última Cena. La Crucifixión está en el centro: Cristo está representado muerto en la cruz, la Virgen y San Juan están a cada lado de la cruz y Santa María Magdalena está arrodillada a sus pies.
Alrededor de la Crucifixión, vemos cuatro escenas del Antiguo Testamento que anuncian el sacrificio de la cruz y la misa:
- Arriba a la izquierda: Moisés ora frente al Arca de la Alianza en la que se guarda una urna de maná; legislaba las reglas del culto.
- Arriba a la derecha, el sumo sacerdote Aarón sacrifica un cordero según la tradición.
- Abajo a la derecha, el sacrificio de Isaac por su padre Abraham.
- Abajo a la izquierda: la ofrenda de pan y vino hecha por Melquisedec.
En la parte superior del retablo, la Virgen María es coronada por su hijo. Los atributos reales que usa indican la victoria sobre la muerte por su resurrección.
Desde la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II (1962-65), el sacerdote debe celebrar la Misa de cara al pueblo. En 1998 se instaló un nuevo altar de celebración y un ambón removible (un atril). Su inauguración tuvo lugar en la Navidad de 1998. El escultor Denis Duguay se inspiró en la arquitectura del altar mayor al fondo del coro para realizarlos. Debajo del altar, los relicarios contienen, entre otras, las reliquias de Santa Marguerite Bourgeoys (1620-1700), Santa Marguerite d'Youville (1701-1771) y el Beato Hermano André (1845-1937).
En la basílica se han celebrado varios funerales importantes, incluidos los de Sir Georges Étienne Cartier, Pierre-Elliot Trudeau, Maurice Richard, Charles Daudelin, Bernard Landry y los de 9 de las 14 víctimas del feminicidio de la École Polytechnique. También fue el escenario de la boda de Celine Dion.
La Plaza de Armas es una de las más importantes del Vieux Montreal. Sucentro está ocupado por una estatua de uno de los fundadores de la ciudad, Maisonneuve. Alrededor se encuentran la Basílica Notre-Dame al sur, la sede social del Banco de Montreal al norte y el Hotel Place d’Armes al nordeste.
Allí encontramos la estación de metro Place-d’Armes.
La plaza fue inaugurada en 1693 y se convirtió en una plaza pública, pero continuó perteneciendo a los Sulpicianos. Era el patio de la antigua iglesia de Ville-Marie ubicada en el eje de la calle Notre Dame. Inicialmente se llamó Place de la Fabrique, pero en 1721 recibió el nombre actual de Place d'Armes cuando se convirtió en el escenario de diversos acontecimientos militares. Entre 1781 y 1813 el lugar se utilizó como plaza de mercado y se convirtió en un lugar común de reunión.
Después de la construcción de la Basílica Notre-Dame de Montreal y la demolición de la primera iglesia, los Sulpicianos vendieron la plaza a la ciudad de Montreal en 1836. En ese mismo año la plaza fue adornada con un jardín victoriano a su alrededor. El 1 de julio de 1895 se inauguró en el centro de la plaza un monumento en honor a Paul Chomedey de Maisonneuve, fundador de la ciudad, elaborada por el escultor Louis-Philippe Hébert para conmemorar la defensa del primer asentamiento francés del ataque de los iroqueses.
El edificio del Banque de Montreal recuerda al Panteón de Roma. Aquí se encuentra la sede del banco más antiguo de Canadá, que data de 1817.
En uno de los laterales de la plaza está el New York Life Building (de color rojizo), construido entre 1887 y 1889. Fue el primer rascacielos de la ciudad. A su lado, el Aldred Building, finalizado en 1931, que se parece al Empire State de Nueva York.
También encontramos las estatuas "The english pug and the french poodle" o Le Caniche français et le Carlin anglais. También se comoce como Les deux snobs. Son dos esculturas de bronce del artista canadiense Marc André J. Fortier, instalada en 2013. Evoca, con humor, las discordias culturales que solían existir entre los canadienses franceses e ingleses.
En la esquina del lado sur de la torre, un inglés, representado como un hombre delgado, elegante y pretencioso, vestido con un traje con una pajarita, presiona firmemente contra su pecho un pug y mira con condescendencia a la Basílica de Notre-Dame, un símbolo del dominio religioso de la Iglesia Católica en Quebec.
En la esquina lateral norte de la misma torre, una mujer francesa, representada como una dama pequeña, elegante y presumida, vestida con un traje estilo Chanel, cubrezapatos de tacón con cremalleras de goma y una boina de imitación, sostiene firmemente contra su pecho un caniche francés y mira con descontento la oficina central del Banco de Montreal, un símbolo del poder inglés. Ambos perros se atraen el uno al otro, pero sus dueños los obligan a mantenerse alejados y separados.
Justo al lado de la Basílica está el Old Seminary. Construido en 1685, sigue ocupado hoy en día por misioneros sulpicianos.
En el Vieux Montreal encontramos muchos restaurantes de todos los lugares del mundo así como tiendas de souvenirs. También hay wifi gratis en las calles.
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Me han salido algunas ofertas de la costa este de Canada, y la verdad no la tenia en mente 
....pero leyendo algún diario la verdad que tiene muy buena pinta 
Ya se que no es lo comparable, pero los que habéis estado me podéis dar alguna opinión? Familia de 4, con dos adolescentes grandes y cañeros 
Y otra pregunta 
